El primer mapa del cambio climático revela qué pasaría si la temperatura subiese 4 grados

Vie, 23/10/2009

La Voz de Galicia

¿Qué ocurriría si la temperatura del planeta se incrementase en cuatro grados de a aquí a fin de siglo? Nada bueno, sin duda, pero si quiere saberlo con la mayor certeza y detalle que la ciencia ofrece actualmente, puede consultarlo en el mapa presentado ayer por el Gobierno británico, que ilustra las consecuencias que tendrá para el planeta Tierra un brusco aumento de las temperaturas por encima de los dos grados, a partir de los cuales los científicos consideran que los efectos del cambio climático ya serían irreversibles: negativos efectos en el abastecimiento de agua, descenso en la producción agrícola, temperaturas extremas, sequías, incremento del peligro de incendios forestales y el aumento del nivel del mar.. «El mapa proporciona una prueba gráfica de la dramática transformación que nuestro mundo sufriría con un aumento medio de la temperatura de cuatro grados. Tampoco deja duda alguna sobre la importancia que tendría un resultado exitoso en las negociaciones de Copenhague», señaló Chris Rapley, director del Museo de Ciencias de Londres, donde ayer se presentó el plano, y profesor de Cambio Climático en la University College de Londres. En España, 6 grados más El mapa del cambio climático demuestra que una subida media de cuatro grados no será uniforme a lo largo y ancho del globo. La tierra se calentará más rápidamente que el mar y las latitudes más altas, en particular el Ártico, sufrirán mayores aumentos de temperatura. Según esta cartografía, la temperatura media de la tierra será de 5,5 grados por encima de los niveles preindustriales. En España, el incremento previsto es de seis grados. «Si las emisiones continúan al ritmo presente, la temperatura media global es probable que llegue a alcanzar un aumento de cuatro grados antes del final de este siglo o incluso mucho antes. La ciencia nos dice que tendremos severos impactos generalizados en todo el mundo, de manera que necesitamos pasar a la acción ahora para reducir las emisiones y evitar la escasez de agua y de alimentos en el futuro», destacó Vicky Pope, de la Oficina de Meteorología británica.