El acuífero de Ciutadella, por su elevada presencia de nitratos, es el único de Menorca y uno de los cinco de Balears que no podrá cumplir a tiempo la directiva europea del agua, que obliga a garantizar en 2015 la suficiente disponibilidad de recursos hídricos sometidos a una gestión sostenible. Al igual que la zona de Sa Pobla, que presenta una contaminación similar por nitratos, y las áreas del Pla de Sant Jordi, Jesús y Campos, que sufren problemas de salinización, el acuífero de Ciutadella deberá esperar a los años 2021 o 2027 para certificar su «buen estado ecológico». Esto obligará a las administraciones competentes a prorrogar las medidas tendentes a alcanzar este objetivo. El compromiso es que las masas de agua de las Islas no empeoren, al menos, su situación actual. Con estas cinco únicas excepciones, Balears pasa por ser la única comunidad autónoma del Estado español que, a decir de la Conselleria de Medi Ambient, está cumpliendo los plazos de tramitación de la directiva europea del agua. Esta afirmación contradice el Plan Hidrológico, según el que el acuífero de Maó también tardará veinte años en recuperarse. El conseller Miquel Àngel Grimalt aseguró ayer que en un 47% de los acuíferos de las Islas será preciso tomar medidas para cumplir con la directiva en 2015. Entre las actuaciones previstas sobresale el compromiso de reordenar las captaciones de agua y recagarlas para evitar la intrusión marina, utilizando para ello plantas desaladoras como la que se está construyendo actualmente en la costa sur de Ciutadella. Además, incide el conseller, cabrá reutilizar el agua depurada, promover buenas prácticas agrícolas y ganaderas, evitar la contaminación e incentivar medidas de ahorro entre la población. Éstas consisten en la detección de fugas en la red de suministro municipal y, también, en la aplicación de tarifas progresivas que penalicen el excesivo consumo de agua. Los ayuntamientos deberán colaborar activamente en la consecución de este objetivo. El Govern, que dice haber invertido nueve millones de euros en los últimos cinco años para conocer el estado de las reservas hídricas de Balears, también ha hecho extensivo el estudio a las praderas de posidonia oceánica. Ni una sola ha sido hallada en un estado ecológico «deficiente». Desaladora Una de las medidas comprometidas por la Conselleria es la recarga de los acuíferos mediante agua desalada. Esta acción será posible en Ciutadella a partir de la puesta en marcha de la planta, el próximo año.