Las organizaciones agrarias y Cooperativas Agro-alimentarias analizan los efectos del temporal de nieve, lluvia y viento de los últimos días en la agricultura y la ganadería, y han adelantado que las precipitaciones alejan la sequía, pero que dejarán pérdidas millonarias aún sin cuantificar en los cultivos.

En relación con los sectores más afectados, fuentes del sector ya han cuantificado numerosos daños en el sur peninsular en la aceituna, las frutas y las infraestructuras rurales, aunque han apuntado que beneficiarán a producciones de invierno, frutales, cultivos de secano y leñosos.

Las mismas fuentes han precisado que habrá que esperar a que se recupere el tiempo para evaluar todos los posibles daños provocados por la climatología adversa, porque "sigue lloviendo" en muchas zonas y hay campos anegados a los que aún no es posible acceder para cuantificar las pérdidas.

El presidente de Cooperativas Agro-alimentarias, Fernando Marcén, ha subrayado que están haciendo un seguimiento del impacto de los temporales en la agricultura y ha asegurado que es "precipitado" aún emitir conclusiones.

Ha afirmado que la nieve y las lluvias "vendrán bien" a las producciones agrarias con carácter general, al garantizar recursos hídricos, si bien ha puntualizado que habrá que contabilizar daños en algunos sectores por la intensidad de las precipitaciones o las bajas temperaturas, especialmente en producciones mediterráneas.

Desde los Servicios Técnicos de la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja), Gregorio Juárez ha señalado que la aceituna se verá perjudicada y, especialmente en zonas como Toledo y Ciudad Real más del 50% de la producción "está muy afectada", al igual que la de hortalizas en Murcia y Campo de Elche, con daños "elevadísimos" por las heladas, y la de los cítricos de la Comunidad Valenciana.

Ha reconocido que el agua vendrá muy bien para recargar acuíferos y mejorar la calidad de los recursos para el regadío del arco Mediterráneo y Levante, que actualmente utilizan agua de poca calidad o procedente de desaladoras, además de que favorecerá el desarrollo vegetativo de árboles y frutales.

El secretario general de la Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas (COAG), Miguel López, ha indicado que se han producido inundaciones, pérdidas de cosecha y dificultades para alimentar el ganado en varias Comunidades Autónomas.

Ha apuntado que, a pesar de los perjuicios concretos que se han producido en algunas explotaciones, "que habrá que determinar" y "que tendrán que recibir ayudas para restablecer la normalidad", las lluvias también han contrarrestado un "declive peligroso" del sector agroganadero, en situación "crítica" por la falta de lluvias.

El secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), Lorenzo Ramos, ha detallado que habrá daños importantes en sectores como la aceituna de Andalucía, porque mucha de ella ha caído al suelo, y que se reducirá también la calidad del aceite.

A pesar de ello, Ramos ha subrayado que las precipitaciones "caen como agua de mayo" sobre el campo y contribuyen a recuperar los embalses, garantizando el suministro para el regadío durante las próximas campañas, y ha recordado que en Extremadura no se producían unas lluvias tan abundantes desde 1995 que han logrado recuperar las reservas de agua rápidamente.

Por su parte, los embalses se han recuperado, y, según los datos ofrecidos hoy por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, la reserva de agua se sitúa un 15 por ciento por encima de los niveles de hace un año.

En concreto, las mayores reservas corresponden a la Cuenca del País Vasco (con un 85,7 por ciento) del Miño-Sil (82,7%), Cantábrico (80,8), Ebro (73,4%), Guadalquivir (73,2%), la Cuenca Atlántica Andaluza (70,4%) y el Duero (69,2%).