La Junta aprueba el "Plan de Protección Civil ante el Riesgo de Inundaciones"
Jue, 25/02/2010
El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León, en su reunión de hoy jueves, aprobó el "Plan de Protección Civil ante el Riesgo de Inundaciones", que se une a los ya existentes sobre incendios forestales, riesgos químicos y transporte de mercancías peligrosas y completa el mapa de los planes especiales de emergencias de Protección Civil. El 97,6 por ciento de los núcleos de población no tiene riesgo de inundación o lo tiene en el nivel más bajo.
La Comunidad de Castilla y León ha completado, con este acuerdo, su mapa de planes especiales, ya que el Plan de Protección Civil ante el Riesgo de Inundaciones (Inuncyl), aprobado hoy, ha sido el último de los que ha elaborado la Junta para la prevenir y organizar la respuesta ante estos sucesos con el fin de proteger a la población, los bienes y el medio ambiente y reducir así sus daños y sus consecuencias.
La elaboración de este plan ha sido de gran complejidad y ha requerido un esfuerzo de estudio debido a que la Comunidad de Castilla y León incluye territorio de cinco grandes Cuencas Hidrográficas (Duero, Ebro, Tajo, Miño-Sil y Cantábrico), las cuales se han dividido en un total de 20 subcuencas al objeto de realizar una caracterización de las mismas y así poder determinar el riesgo de inundación.
En el proceso para su elaboración se han tenido en cuenta variables como localización, orografía, características geológicas y geomorfológicas, régimen hidrológico, régimen climático, vegetación y usos del suelo, infraestructuras hidráulicas y vías de comunicación, así como un análisis de los eventos históricos.
A partir del tratamiento de esos datos, se efectúa una clasificación de los núcleos de población de Castilla y León en función de la peligrosidad (A, B y C) y en función de su número de habitantes clasificándose cada uno de los núcleos en función del riesgo poblacional en tres niveles de riesgo (bajo, medio y alto). Cabe subrayar que el 97,6 por ciento de los núcleos de población de Castilla y León no tiene riesgo de inundación o lo tiene en el nivel más bajo.
NUEVE NÚCLEOS EN EL NIVEL ALTO.
El Inuncyl contempla nueve núcleos de población en el nivel alto de riesgo por inundación, que son Burgos, Miranda de Ebro (Burgos), Ciudad Rodrigo (Salamanca), Valladolid, Tordesillas (Valladolid), Tudela de Duero (Valladolid), Zamora, Benavente (Zamora) y Toro (Zamora). En cuanto al resto de niveles, el segundo incluye un total de 128 núcleos, y el nivel bajo, un total de 2.248, mientras que 3.465 núcleos no presentan riesgos al ubicarse fuera de las llanuras y áreas inundables.
La operatividad de este Plan se basa en los sistemas de previsión y alerta hidrometeorológica relacionados con la evolución de lluvias o tormentas, así como del estado de los niveles en cauces y embalses. Esta información debe proporcionarla tanto la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) como las Confederaciones Hidrográficas, mientras que la información referente al estado de presas y embalses deben proporcionarla los titulares de las presas o la Delegación/Subdelegaciones del Gobierno.
La Comunidad de Castilla y León ha completado, con este acuerdo, su mapa de planes especiales, ya que el Plan de Protección Civil ante el Riesgo de Inundaciones (Inuncyl), aprobado hoy, ha sido el último de los que ha elaborado la Junta para la prevenir y organizar la respuesta ante estos sucesos con el fin de proteger a la población, los bienes y el medio ambiente y reducir así sus daños y sus consecuencias.
La elaboración de este plan ha sido de gran complejidad y ha requerido un esfuerzo de estudio debido a que la Comunidad de Castilla y León incluye territorio de cinco grandes Cuencas Hidrográficas (Duero, Ebro, Tajo, Miño-Sil y Cantábrico), las cuales se han dividido en un total de 20 subcuencas al objeto de realizar una caracterización de las mismas y así poder determinar el riesgo de inundación.
En el proceso para su elaboración se han tenido en cuenta variables como localización, orografía, características geológicas y geomorfológicas, régimen hidrológico, régimen climático, vegetación y usos del suelo, infraestructuras hidráulicas y vías de comunicación, así como un análisis de los eventos históricos.
A partir del tratamiento de esos datos, se efectúa una clasificación de los núcleos de población de Castilla y León en función de la peligrosidad (A, B y C) y en función de su número de habitantes clasificándose cada uno de los núcleos en función del riesgo poblacional en tres niveles de riesgo (bajo, medio y alto). Cabe subrayar que el 97,6 por ciento de los núcleos de población de Castilla y León no tiene riesgo de inundación o lo tiene en el nivel más bajo.
NUEVE NÚCLEOS EN EL NIVEL ALTO.
El Inuncyl contempla nueve núcleos de población en el nivel alto de riesgo por inundación, que son Burgos, Miranda de Ebro (Burgos), Ciudad Rodrigo (Salamanca), Valladolid, Tordesillas (Valladolid), Tudela de Duero (Valladolid), Zamora, Benavente (Zamora) y Toro (Zamora). En cuanto al resto de niveles, el segundo incluye un total de 128 núcleos, y el nivel bajo, un total de 2.248, mientras que 3.465 núcleos no presentan riesgos al ubicarse fuera de las llanuras y áreas inundables.
La operatividad de este Plan se basa en los sistemas de previsión y alerta hidrometeorológica relacionados con la evolución de lluvias o tormentas, así como del estado de los niveles en cauces y embalses. Esta información debe proporcionarla tanto la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) como las Confederaciones Hidrográficas, mientras que la información referente al estado de presas y embalses deben proporcionarla los titulares de las presas o la Delegación/Subdelegaciones del Gobierno.