La presencia del flúor en el agua de consumo sigue afectando a varias zonas del municipio de La Laguna. Así, las familias con menores de seis años a su cargo y que residan en el casco histórico, La Vega lagunera, Barrio Nuevo, San Bartolomé de Geneto, Los Menceyes, Montaña La Mina, San Miguel de Geneto, El Coromoto y Montaña Pacho no pueden consumir agua del grifo.

Sanidad considera que los niveles de flúor en el agua no deben superar el 1,5 miligramos por litro. Sin embargo, en el agua de abastecimiento de estas zonas se ha detectado una media de 2 y 2,3 miligramos por litro, reconoció ayer el gerente de Teidagua, Javier Davara.

La empresa encargada del abastecimiento del agua en el municipio realiza una serie de controles periódicos, según se establece en el Real Decreto 140 de 2003 por el que se establecen los criterios sanitarios de la calidad del agua de consumo humano.

"Realizamos uno o dos controles exhaustivos al año. Además, en el caso de La Laguna, donde se han detectado niveles altos de flúor, tenemos la obligación de controlar que la presencia del fluoruro en el agua esté dentro de los parámetros establecidos, por ello, hacemos un análisis de control semanal", afirmó Davara.

La alta presencia de este mineral en el agua de consumo es un problema no sólo difícil de solucionar -afecta a los acuíferos de la Isla por su origen volcánico- sino que también lleva varios años influyendo en la economía de las familias con menores de edad, puesto que la prohibición implica que no se pueda consumir ni cocinar con ella.
Para tratar de aliviar la economía de los laguneros que se vean en la obligación de comprar agua embotellada, el Ayuntamiento tiene una línea de bonificaciones que se aplican en los recibos del agua.

Además de poner en marcha estas ayudas, la empresa ha tomado medidas para intentar rebajar los niveles del fluoruro. Así, el gerente de Teidagua explicó: "Estamos avanzando en las negociaciones para conseguir agua puramente privada".Esto permitirá continuar con las mezclas de aguas de distintas procedencias y mejorar su calidad. De la misma manera, la realización de distintas obras hidráulicas también han ayudado a "mantener y disminuir esos niveles", comentó Javier Davara en referencia a las elevaciones de agua que se realizan desde Valle de Guerra a Guamasa y desde Finca España.

Además, está previsto que se empiece a elevar agua de calidad desde El Cardonal hasta Montaña Pacho.

Una trabajadora en el laboratorio de Teidagua analiza las muestras de agua que llegan después a los grifos de los laguneros.