Un proyecto busca sustituir las cañas y carrizos de la ribera del Segura por plantas autóctonas
Lun, 19/04/2010
La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) desarrolla un proyecto pionero de I+D+i para la recuperación vegetal del cauce y la ribera del río Segura con las universidades de Murcia y Alicante, según informaron fuentes del organismo de cuenca en un comunicado.
De este modo, el comisario de Aguas de la CHS, Manuel Aldeguer, mantuvo una reunión con los responsables del Departamento de Ecología de la Universidad de Murcia y de la Universidad de Alicante, y con miembros de la sección ambiental de la empresa estatal Tragsa, para estudiar el seguimiento del proyecto, que ya se está aplicando en la Región de Murcia (Cieza y Murcia-El Reguerón) y en la provincia de Alicante (Guardamar del Segura ).
Una vez terminada con éxito, se pretende exportar esta experiencia al resto de cuencas hidrográficas de España. El objetivo primordial del proyecto es sustituir gradualmente del paisaje de la ribera carrizos y cañas, y que otras especies autóctonas ocupen este espacio.
La actuación tiene un plazo de 18 meses y tras la eliminación del cañaveral alóctono, se encuentra ahora en la fase de crecimiento del nuevo manto vegetal. La investigación cuenta con un presupuesto global de tres millones de euros aportados por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, y la elección de los lugares de actuación se debe a que se pretende experimentar en distintos tramos caracterizados según diferencias en la calidad del agua y en el tipo de suelo. En ellos, se aplicarán diversas técnicas de eliminación de rizomas de cañas y carrizos, al tiempo que se procede a la reintroducción de plantas autóctonas y acuáticas prácticamente desaparecidas en la cuenca, como el junco y la anea, así como sauces, álamo blanco y tarais, especies cuyas poblaciones han disminuido drásticamente debido a la contaminación que ha sufrido este río desde principios de los años 80 y a la acción humana directa mediante su eliminación con talas o roturaciones.
Además, con la sustitución y control de carrizales y cañaverales se busca reducir los riesgos de inundaciones y desbordamiento en caso de avenidas de agua del río Segura , ya que obstruyen los cauces. Del mismo modo, con un sistema más barato, natural y efectivo de eliminación de las cañas, se logrará un importante ahorro de fondos para el contribuyente, destacaron las mismas fuentes.
De este modo, el comisario de Aguas de la CHS, Manuel Aldeguer, mantuvo una reunión con los responsables del Departamento de Ecología de la Universidad de Murcia y de la Universidad de Alicante, y con miembros de la sección ambiental de la empresa estatal Tragsa, para estudiar el seguimiento del proyecto, que ya se está aplicando en la Región de Murcia (Cieza y Murcia-El Reguerón) y en la provincia de Alicante (Guardamar del Segura ).
Una vez terminada con éxito, se pretende exportar esta experiencia al resto de cuencas hidrográficas de España. El objetivo primordial del proyecto es sustituir gradualmente del paisaje de la ribera carrizos y cañas, y que otras especies autóctonas ocupen este espacio.
La actuación tiene un plazo de 18 meses y tras la eliminación del cañaveral alóctono, se encuentra ahora en la fase de crecimiento del nuevo manto vegetal. La investigación cuenta con un presupuesto global de tres millones de euros aportados por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, y la elección de los lugares de actuación se debe a que se pretende experimentar en distintos tramos caracterizados según diferencias en la calidad del agua y en el tipo de suelo. En ellos, se aplicarán diversas técnicas de eliminación de rizomas de cañas y carrizos, al tiempo que se procede a la reintroducción de plantas autóctonas y acuáticas prácticamente desaparecidas en la cuenca, como el junco y la anea, así como sauces, álamo blanco y tarais, especies cuyas poblaciones han disminuido drásticamente debido a la contaminación que ha sufrido este río desde principios de los años 80 y a la acción humana directa mediante su eliminación con talas o roturaciones.
Además, con la sustitución y control de carrizales y cañaverales se busca reducir los riesgos de inundaciones y desbordamiento en caso de avenidas de agua del río Segura , ya que obstruyen los cauces. Del mismo modo, con un sistema más barato, natural y efectivo de eliminación de las cañas, se logrará un importante ahorro de fondos para el contribuyente, destacaron las mismas fuentes.