La legionela cuadruplicó su mortalidad el año pasado, con ocho fallecidos
Mar, 31/08/2010
Las nuevas formas de vida guardan mucha relación con esta patología, cuya bacteria viaja por el aire y suele anidar en sistemas de refrigeración como los aires acondicionados. La legionelosis, considerada como una patología emergente en el Principado y en España, tiene una mayor presencia en Oviedo, aunque durante 2009 el área más afectada fue Arriondas, con una tasa de 9,3 casos por cada cien mil personas (la media en Asturias estuvo en 3,3 casos).
La investigación llevada a cabo por Salud Pública ha permitido establecer que dos de los 35 enfermos podrían haber contraído la infección en un hospital (el informe no menciona ningún centro sanitario en particular). Otros tres lo hicieron en alojamientos turísticos. El resto la contrajeron en el ámbito comunitario. Hasta hace poco más de una década, la legionela era una enfermedad prácticamente desconocida. Originada por una bacteria que provoca neumonía, forma parte de las llamadas "enfermedades emergentes" y no fue hasta 1997 cuando se convirtió en una patología de declaración obligatoria en España, junto a trastornos más comunes como la propia gripe, el sarampión, la varicela o el tétanos. En Asturias, los primeros registros oficiales de legionelosis datan de 1999. Diez años más tarde, esta enfermedad no sólo ha incrementado su incidencia y abandonado su ostracismo (cuatro brotes obligaron en 2003 a cerrar y limpiar todas las fuentes de Oviedo), sino que ha cuadriplicado su mortalidad.
Durante 2009, la legionela provocó en Asturias el fallecimiento de ocho personas. Se trata de la tasa de letalidad más alta de la década. El dato aparece reflejado en el Informe Epidemiológico 2009 elaborado por la Consejería de Salud, donde se reconoce la existencia de un «incremento considerable de la letalidad» de la legionela. La Administración sanitaria asegura que el incremento de las muertes por legionelosis «no guardan relación con ningún factor conocido», sino «con la patología de base de los pacientes».
Los ocho muertos de 2009 contrastan con los dos de 2008 o con el único de 2007. El año de mayor mortalidad del que hasta ahora se tenía constancia en el Principado fue 2005, cuando la bacteria de la legionela llegó a causar 4 fallecimientos, la mitad de los contabilizados en 2009. Teniendo en cuenta que el pasado año fueron 35 las personas que contrajeron la enfermedad, los 8 fallecimientos representan una tasa de letalidad del 22,9%, un índice que se sitúa por encima del sida o de la meningitis, por citar sólo dos ejemplos. La legionela, también conocida como enfermedad del legionario, adquirió su denominación en 1976, cuando apareció un brote de neumonía entre los participantes de una convención de la Legión AmeLa legionela es una enfermedad de claro perfil masculino y vinculada al tabaquismo. Según los datos recogidos en el Informe Epidemiológico de 2009, de los 366 afectados contabilizados en la última década, la relación hombremujer fue de 3 a 1. El factor de riesgo más importante fue el tabaquismo, presente en casi la mitad de los que contrajeron este tipo de neumonía. La mayor parte de los que enferman superan los 70 años. En varones de esa edad la incidencia fue once veces superior a la de las mujeres.
La legionela es una bacteria que, además de hallarse en medios acuáticos naturales, ha encontrado un hábitat muy adecuado en sistemas de agua creados y manipulados por el hombre, los cuales actúan como amplificadores y propagadores de la misma. El germen suele encontrarse a gusto a una temperatura ambiental de entre 25 y 45 grados centígrados, de ahí que la enfermedad suele concentrarse más en verano. Se trata, además, de un organismo que tiene la capacidad de quedarse en letargo a temperaturas muy bajas para volver a multiplicarse en condiciones más favorables, es decir, con más calor. Para «matarla» hay que someterla a un choque térmico superior a los 70 grados centígrados. Pero la legionela no sólo puede crear colonias en torres de refrigeración de grandes dimensiones o de uso industrial. También puede hacerlo a nivel doméstico en las casas. De ahí que los expertos aconsejen, entre un amplio abanico de medidas preventivas en el hogar, limpiar con lejía la "cebolleta" de las duchas. Un técnico de laboratorio trabaja con un cultivo de la bacteria causante de la legionela.
Número de personas que contrajeron legionela en Asturias entre 1999 y 2009. A lo largo de esa década hubo 27 fallecimientos. La tasa por cien mil habitantes se sitúo en 2009 en Asturias en 3,2 casos, algo por encima del 2,5 del conjunto de España.
Salud Pública asegura que dos de los 35 enfermos contrajeron la infección en un hospital y otros tres en alojamientos turísticos
La investigación llevada a cabo por Salud Pública ha permitido establecer que dos de los 35 enfermos podrían haber contraído la infección en un hospital (el informe no menciona ningún centro sanitario en particular). Otros tres lo hicieron en alojamientos turísticos. El resto la contrajeron en el ámbito comunitario. Hasta hace poco más de una década, la legionela era una enfermedad prácticamente desconocida. Originada por una bacteria que provoca neumonía, forma parte de las llamadas "enfermedades emergentes" y no fue hasta 1997 cuando se convirtió en una patología de declaración obligatoria en España, junto a trastornos más comunes como la propia gripe, el sarampión, la varicela o el tétanos. En Asturias, los primeros registros oficiales de legionelosis datan de 1999. Diez años más tarde, esta enfermedad no sólo ha incrementado su incidencia y abandonado su ostracismo (cuatro brotes obligaron en 2003 a cerrar y limpiar todas las fuentes de Oviedo), sino que ha cuadriplicado su mortalidad.
Durante 2009, la legionela provocó en Asturias el fallecimiento de ocho personas. Se trata de la tasa de letalidad más alta de la década. El dato aparece reflejado en el Informe Epidemiológico 2009 elaborado por la Consejería de Salud, donde se reconoce la existencia de un «incremento considerable de la letalidad» de la legionela. La Administración sanitaria asegura que el incremento de las muertes por legionelosis «no guardan relación con ningún factor conocido», sino «con la patología de base de los pacientes».
Los ocho muertos de 2009 contrastan con los dos de 2008 o con el único de 2007. El año de mayor mortalidad del que hasta ahora se tenía constancia en el Principado fue 2005, cuando la bacteria de la legionela llegó a causar 4 fallecimientos, la mitad de los contabilizados en 2009. Teniendo en cuenta que el pasado año fueron 35 las personas que contrajeron la enfermedad, los 8 fallecimientos representan una tasa de letalidad del 22,9%, un índice que se sitúa por encima del sida o de la meningitis, por citar sólo dos ejemplos. La legionela, también conocida como enfermedad del legionario, adquirió su denominación en 1976, cuando apareció un brote de neumonía entre los participantes de una convención de la Legión AmeLa legionela es una enfermedad de claro perfil masculino y vinculada al tabaquismo. Según los datos recogidos en el Informe Epidemiológico de 2009, de los 366 afectados contabilizados en la última década, la relación hombremujer fue de 3 a 1. El factor de riesgo más importante fue el tabaquismo, presente en casi la mitad de los que contrajeron este tipo de neumonía. La mayor parte de los que enferman superan los 70 años. En varones de esa edad la incidencia fue once veces superior a la de las mujeres.
La legionela es una bacteria que, además de hallarse en medios acuáticos naturales, ha encontrado un hábitat muy adecuado en sistemas de agua creados y manipulados por el hombre, los cuales actúan como amplificadores y propagadores de la misma. El germen suele encontrarse a gusto a una temperatura ambiental de entre 25 y 45 grados centígrados, de ahí que la enfermedad suele concentrarse más en verano. Se trata, además, de un organismo que tiene la capacidad de quedarse en letargo a temperaturas muy bajas para volver a multiplicarse en condiciones más favorables, es decir, con más calor. Para «matarla» hay que someterla a un choque térmico superior a los 70 grados centígrados. Pero la legionela no sólo puede crear colonias en torres de refrigeración de grandes dimensiones o de uso industrial. También puede hacerlo a nivel doméstico en las casas. De ahí que los expertos aconsejen, entre un amplio abanico de medidas preventivas en el hogar, limpiar con lejía la "cebolleta" de las duchas. Un técnico de laboratorio trabaja con un cultivo de la bacteria causante de la legionela.
Número de personas que contrajeron legionela en Asturias entre 1999 y 2009. A lo largo de esa década hubo 27 fallecimientos. La tasa por cien mil habitantes se sitúo en 2009 en Asturias en 3,2 casos, algo por encima del 2,5 del conjunto de España.
Salud Pública asegura que dos de los 35 enfermos contrajeron la infección en un hospital y otros tres en alojamientos turísticos