El agua consumida en Catalunya equivale a llenar una piscina olímpica cada segundo
Dom, 19/09/2010
Los ciudadanos de Catalunya consumen anualmente 2.965 hectómetros cúbicos de agua, lo que equivale a llenar una piscina olímpica cada segundo, según datos del Plan de gestión del agua de la comunidad, actualmente en proceso de estudio tras las alegaciones presentadas.
Los datos, a los que ha tenido acceso Europa Press, evidencian que en las cuencas internas, a pesar de ser el lugar donde se concentra el 92% de la población, se consume solo un tercio del total de agua gastada en Catalunya --mediante usos principalmente domésticos--.
En las cuencas del Ebro, que incluyen el río Segre y sus afluentes pirenaicos, se consumen los dos tercios restantes, aunque vive solamente el 8% de la población, debido "esencialmente" al mayor uso intensivo de agua que se hace en la agricultura de regadío.
La Agencia Catalana del Agua (ACA) señala en su informe que desde 2003 se han registrado descensos continuados del consumo, lo que pone de manifiesto una mayor concienciación de la ciudadanía.
De hecho, después del episodio de sequía que asoló Catalunya en 2007 y 2008, los catalanes han logrado ahorrar en tres años 101,5 hectómetros cúbicos en las cuencas internas, el equivalente al embalse de La Baells (Lleida).
Estas cifras se complementan con el hecho de que en 2007 ya se había reducido en un 4% el consumo respecto a 2003, aunque durante este periodo la población de Catalunya creció en medio millón de personas.
Los planes del Govern pasan por lograr en 2015 aumentar el agua disponible en 101 hectómetros cúbicos mediante la reutilización, en 43 hectómetros cúbicos mediante la recuperación de acuíferos actualmente contaminados y en 200 hectómetros cúbicos con la puesta en marcha y ampliación de plantas desalinizadoras.
El plan de Gestión señala explícitamente que entre los usos no consumibles del agua más importantes destaca la utilización del agua que hacen las 40 centrales hidroeléctricas y 314 minicentrales presentes en el territorio. Dicha actividad, aunque no altera el balance de recursos hídricos, sí puede influir en el nivel de los caudales ecológicos.
Según el mismo documento, el precio del agua en Catalunya debería aumentar un 77,65% en los próximos cinco años, desde los actuales 1,7 euros de media que paga una familia por cada 1.000 litros de agua consumida hasta los 3,02 euros, lo que permitiría afrontar los costes crecientes de su suministro.
Los datos, a los que ha tenido acceso Europa Press, evidencian que en las cuencas internas, a pesar de ser el lugar donde se concentra el 92% de la población, se consume solo un tercio del total de agua gastada en Catalunya --mediante usos principalmente domésticos--.
En las cuencas del Ebro, que incluyen el río Segre y sus afluentes pirenaicos, se consumen los dos tercios restantes, aunque vive solamente el 8% de la población, debido "esencialmente" al mayor uso intensivo de agua que se hace en la agricultura de regadío.
La Agencia Catalana del Agua (ACA) señala en su informe que desde 2003 se han registrado descensos continuados del consumo, lo que pone de manifiesto una mayor concienciación de la ciudadanía.
De hecho, después del episodio de sequía que asoló Catalunya en 2007 y 2008, los catalanes han logrado ahorrar en tres años 101,5 hectómetros cúbicos en las cuencas internas, el equivalente al embalse de La Baells (Lleida).
Estas cifras se complementan con el hecho de que en 2007 ya se había reducido en un 4% el consumo respecto a 2003, aunque durante este periodo la población de Catalunya creció en medio millón de personas.
Los planes del Govern pasan por lograr en 2015 aumentar el agua disponible en 101 hectómetros cúbicos mediante la reutilización, en 43 hectómetros cúbicos mediante la recuperación de acuíferos actualmente contaminados y en 200 hectómetros cúbicos con la puesta en marcha y ampliación de plantas desalinizadoras.
El plan de Gestión señala explícitamente que entre los usos no consumibles del agua más importantes destaca la utilización del agua que hacen las 40 centrales hidroeléctricas y 314 minicentrales presentes en el territorio. Dicha actividad, aunque no altera el balance de recursos hídricos, sí puede influir en el nivel de los caudales ecológicos.
Según el mismo documento, el precio del agua en Catalunya debería aumentar un 77,65% en los próximos cinco años, desde los actuales 1,7 euros de media que paga una familia por cada 1.000 litros de agua consumida hasta los 3,02 euros, lo que permitiría afrontar los costes crecientes de su suministro.