La USC investiga la mejora de los sistemas de depuración de compuestos de nitrógeno en aguas residuales
Mié, 10/11/2010
El avance de los sistemas de depuración de compuestos de nitrógeno en las aguas residuales que pueden causar importantes problemas ambientales es la línea de trabajo de Isaac Fernández Rodríguez, que acaba de obtener el título de Doctor Ingeniero Europeo por su tesis de doctorado. La investigación, dirigida por Méndez Pampín y José Luís Campos Gómez, se ha realizado en el Grupo de Ingeniería Ambiental y Bioprocesos del Departamento de Ingeniería Química de la USC.
El empleo de fertilizantes y el vertido de aguas residuales industriales y urbanas son las principales fuentes de contaminación por nitrógeno. La ley regula la concentración de compuestos de nitrógeno tanto en las aguas residuales industriales cómo en las urbanas.
Por su menor coste, la eliminación de los compuestos de nitrógeno de las aguas residuales se lleva a cabo tradicionalmente mediante procesos biológicos de nitrificación-desnitrificación frente a los físico-químicos. Sin embargo, hace menos de dos décadas surgió una alternativa para la depuración de este tipo de efluentes que es el denominado proceso Anammox (Anaerobic Ammonium Oxidation) en el que el amonio presente en el agua residual es oxidado por bacterias autótrofas usando nitrito como donador de electrones.
Ahorro en consumo de oxígeno
La aplicación de esta tecnología supone un ahorro en el consumo de oxígeno respeto al proceso de nitrificación-desnitrificación convencional ya que no requiere añadir compuestos orgánicos externos y además es una tecnología más sostenible “al generar menos lodos y menos gases de efecto invernadero”, apunta Isaac Fernández, quien advierte de que a pesar de estas importantes ventajas en términos económicos y ambientales el proceso Anammox aun se encuentra en estado de desarrollo.
Para avanzar en este sentido el investigador de la USC ha estudiado en su tesis aspectos como el efecto de la presencia de antibióticos, la posibilidad de trabajar a bajas temperaturas y el desarrollo de reactores de biopelícula que pueden ser claves para una más rápida implantación del sistema a escala industrial.
El empleo de fertilizantes y el vertido de aguas residuales industriales y urbanas son las principales fuentes de contaminación por nitrógeno. La ley regula la concentración de compuestos de nitrógeno tanto en las aguas residuales industriales cómo en las urbanas.
Por su menor coste, la eliminación de los compuestos de nitrógeno de las aguas residuales se lleva a cabo tradicionalmente mediante procesos biológicos de nitrificación-desnitrificación frente a los físico-químicos. Sin embargo, hace menos de dos décadas surgió una alternativa para la depuración de este tipo de efluentes que es el denominado proceso Anammox (Anaerobic Ammonium Oxidation) en el que el amonio presente en el agua residual es oxidado por bacterias autótrofas usando nitrito como donador de electrones.
Ahorro en consumo de oxígeno
La aplicación de esta tecnología supone un ahorro en el consumo de oxígeno respeto al proceso de nitrificación-desnitrificación convencional ya que no requiere añadir compuestos orgánicos externos y además es una tecnología más sostenible “al generar menos lodos y menos gases de efecto invernadero”, apunta Isaac Fernández, quien advierte de que a pesar de estas importantes ventajas en términos económicos y ambientales el proceso Anammox aun se encuentra en estado de desarrollo.
Para avanzar en este sentido el investigador de la USC ha estudiado en su tesis aspectos como el efecto de la presencia de antibióticos, la posibilidad de trabajar a bajas temperaturas y el desarrollo de reactores de biopelícula que pueden ser claves para una más rápida implantación del sistema a escala industrial.