Las peores lluvias de los últimos 18 años destruyen 36.000 hogares en Sri Lanka
Vie, 12/11/2010
Las peores lluvias de los últimos 18 años en Sri Lanka han dejado sin hogar a alrededor de 36.000 familias, la mayoría de ellas en la zona occidental del país, donde se encuentra la capital, Colombo, según datos divulgados este jueves por el Ministerio de Gestión de Desastres.
Las precipitaciones caídas alcanzaron los 490 litros por metro cuadrado, una marca que supera el récord anterior, de 440 milímetros, y fijado en junio del año 1992.
Estas lluvias torrenciales han obligado a las autoridades a habilitar al menos 12 refugios provisionales a los que han trasladado a unas 33.000 familias y han sumergido al propio Parlamento bajo 1,2 metros de agua.
El presidente del Parlamento, Chamal Rajapaksa, llegó este jueves en barco al edificio. La sesión, en la que se debía fijar un suplemento salarial para funcionarios de obligatoria aprobación antes del día 15, se celebró en el primer piso y sin electricidad debido al agua que anegaba las instalaciones.
El ministro de Construcción y Vivienda, Wimal Weerawansa, afirmó en declaraciones a la cadena estadounidense CNN que el Gobierno ha adoptado "medidas inmediatas" para ayudar a las miles de personas afectadas. Las autoridades han comenzado a proporcionar "comida y otros suministros" a estos damnificados, mientras fuerzas militares tratan de ayudar a las personas que han quedado atrapadas por las inundaciones.
El temporal ha provocado también graves destrozos en las infraestructuras y la situación del tráfico se ha vuelto tan caótica que la administración pública ha dado permiso a los funcionarios para no acudir a sus puestos de trabajo.
Las precipitaciones caídas alcanzaron los 490 litros por metro cuadrado, una marca que supera el récord anterior, de 440 milímetros, y fijado en junio del año 1992.
Estas lluvias torrenciales han obligado a las autoridades a habilitar al menos 12 refugios provisionales a los que han trasladado a unas 33.000 familias y han sumergido al propio Parlamento bajo 1,2 metros de agua.
El presidente del Parlamento, Chamal Rajapaksa, llegó este jueves en barco al edificio. La sesión, en la que se debía fijar un suplemento salarial para funcionarios de obligatoria aprobación antes del día 15, se celebró en el primer piso y sin electricidad debido al agua que anegaba las instalaciones.
El ministro de Construcción y Vivienda, Wimal Weerawansa, afirmó en declaraciones a la cadena estadounidense CNN que el Gobierno ha adoptado "medidas inmediatas" para ayudar a las miles de personas afectadas. Las autoridades han comenzado a proporcionar "comida y otros suministros" a estos damnificados, mientras fuerzas militares tratan de ayudar a las personas que han quedado atrapadas por las inundaciones.
El temporal ha provocado también graves destrozos en las infraestructuras y la situación del tráfico se ha vuelto tan caótica que la administración pública ha dado permiso a los funcionarios para no acudir a sus puestos de trabajo.