La lluvia obliga a desembalsar agua por primera vez este otoño
Mar, 30/11/2010
En tan solo tres días ha llovido tanto que se ha llegado incluso a superar la media histórica de todo el mes de noviembre. Más de cien litros por metro cuadrado han caído en numerosos municipios de la Costa del Sol y la comarca del Guadalhorce desde el pasado viernes. Tal cantidad de agua ha obligado a realizar el primer desembalse de este otoño de los pantanos del Guadalhorce para evitar que se desborden dada las abundantes reservas hídricas con las que ya contaban antes de las lluvias.
Ante la previsión de que durante el fin de semana se registrarían fuertes lluvias, la Agencia Andaluza del Agua ordenó por precaución el pasado viernes a mediodía la apertura de los aliviaderos de los embalses Guadalhorce y el Guadalteba que estaban casi al 95% de su capacidad. Desde entonces se están evacuando unos nueve metros cúbicos por segundo hasta llegar a los 2,2 hectómetros cúbicos que permitirán garantizar el resguardo suficiente para albergar el agua que llegue en forma de escorrentías en los próximos días, aseguró la delegada provincial de Medio Ambiente, Remedios Martel.
Sin llegar a tales extremos, el resto de los pantanos de la provincia de Málaga también han notado ya el aumento de sus reservas gracias a las últimas lluvias. Los siete acumulan un volumen de casi 489 hectómetros cúbicos o, lo que es lo mismo, están al 78,7% de su capacidad total a pesar de que hace apenas dos meses que comenzó el año hidrológico. En municipios como Torremolinos o Alhaurín el Grande han caído más de 120 litros por metro cuadrado desde el viernes hasta ayer, aunque la media en la provincia ha rondado los 65 litros por metro cuadrado.
No lloverá tanto como en los pasados días, pero el Centro Meteorológico de Málaga alerta de que apenas dará tregua esta semana. Hoy continuará lloviendo prácticamente en toda la provincia, aunque de forma más débil e intermitente que ayer. Mañana aún podría seguir el riesgo de precipitaciones y solamente a partir del jueves podría haber una leve mejoría que no durará mucho tiempo porque las previsiones apuntan a que el tiempo se volverá a estropear durante el fin de semana. Junto con la lluvia, el gran protagonista de mañana será el viento de poniente que soplará con fuerza en todo el litoral de la provincia y que podría obligar a Meteorología a activar el nivel de alerta.
El tiempo tenderá a estabilizarse durante el jueves y el viernes, y ya el sábado empezará a notarse la nubosidad que dará paso a un nuevo frente que dejará lluvias previsiblemente a partir del domingo. Aunque la lluvia vaya remitiendo en los próximos días, el Centro Meteorológico no espera que las temperaturas se recuperen demasiado con respecto a los últimos días en los que han sido especialmente bajas para esta época del año. La máxima de ayer y el sábado no pasó de los 13 grados cuando lo normal en noviembre es que ronde los 19 grados en la capital. En cuanto a las mínimas, ayer se alcanzó la más baja del mes, ya que los termómetros no pasaron de los ocho grados.
Pero a pesar del temporal, apenas se registraron incidencias de importancia en ningún punto de la provincia. Sólo en Mijas, los bomberos de la localidad tuvieron que rescatar a un vecino que se había quedado atrapado en su coche mientras intentaba cruzar por un río en la zona de El Esparragal. En total, cuatro bomberos trabajaron para liberar al afectado que no resultó herido.
Ante la previsión de que durante el fin de semana se registrarían fuertes lluvias, la Agencia Andaluza del Agua ordenó por precaución el pasado viernes a mediodía la apertura de los aliviaderos de los embalses Guadalhorce y el Guadalteba que estaban casi al 95% de su capacidad. Desde entonces se están evacuando unos nueve metros cúbicos por segundo hasta llegar a los 2,2 hectómetros cúbicos que permitirán garantizar el resguardo suficiente para albergar el agua que llegue en forma de escorrentías en los próximos días, aseguró la delegada provincial de Medio Ambiente, Remedios Martel.
Sin llegar a tales extremos, el resto de los pantanos de la provincia de Málaga también han notado ya el aumento de sus reservas gracias a las últimas lluvias. Los siete acumulan un volumen de casi 489 hectómetros cúbicos o, lo que es lo mismo, están al 78,7% de su capacidad total a pesar de que hace apenas dos meses que comenzó el año hidrológico. En municipios como Torremolinos o Alhaurín el Grande han caído más de 120 litros por metro cuadrado desde el viernes hasta ayer, aunque la media en la provincia ha rondado los 65 litros por metro cuadrado.
No lloverá tanto como en los pasados días, pero el Centro Meteorológico de Málaga alerta de que apenas dará tregua esta semana. Hoy continuará lloviendo prácticamente en toda la provincia, aunque de forma más débil e intermitente que ayer. Mañana aún podría seguir el riesgo de precipitaciones y solamente a partir del jueves podría haber una leve mejoría que no durará mucho tiempo porque las previsiones apuntan a que el tiempo se volverá a estropear durante el fin de semana. Junto con la lluvia, el gran protagonista de mañana será el viento de poniente que soplará con fuerza en todo el litoral de la provincia y que podría obligar a Meteorología a activar el nivel de alerta.
El tiempo tenderá a estabilizarse durante el jueves y el viernes, y ya el sábado empezará a notarse la nubosidad que dará paso a un nuevo frente que dejará lluvias previsiblemente a partir del domingo. Aunque la lluvia vaya remitiendo en los próximos días, el Centro Meteorológico no espera que las temperaturas se recuperen demasiado con respecto a los últimos días en los que han sido especialmente bajas para esta época del año. La máxima de ayer y el sábado no pasó de los 13 grados cuando lo normal en noviembre es que ronde los 19 grados en la capital. En cuanto a las mínimas, ayer se alcanzó la más baja del mes, ya que los termómetros no pasaron de los ocho grados.
Pero a pesar del temporal, apenas se registraron incidencias de importancia en ningún punto de la provincia. Sólo en Mijas, los bomberos de la localidad tuvieron que rescatar a un vecino que se había quedado atrapado en su coche mientras intentaba cruzar por un río en la zona de El Esparragal. En total, cuatro bomberos trabajaron para liberar al afectado que no resultó herido.