La Audiencia Nacional declara ilegal el bitrasvase Ebro Besaya por la tramitación del impacto ambiental

Jue, 27/01/2011

Europa Press

La Audiencia Nacional ha declarado ilegal el bitrasvase del Ebro-Besya, por la tramitación del impacto ambiental, al haberse encomendado a Cantabria este fase del proceso cuando le correspondía al Estado al tratarse de una obra de Interés General.
El fallo estima así, según han informado a Europa Press fuentes del Gobierno regional, un recurso de la asociación ecologista Arca, que también sostenía que el bitrasvase dañaba dos espacios protegidos (la ZEPA del embalse del Ebro y el LIC del Pas).
Desde el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM), se ha señalado que este departamento "respetará" y "estudiará" el contenido de la sentencia.
Por su parte, el consejero de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, Francisco Martín, ha llamado a "hacer una piña" en torno a esta infraestructura "imprescindible" para el "futuro" de la comunidad, al permitir garantizar el abastecimiento a hogares y empresas para los próximos 30 años.
Martín ha precisado que la sentencia de la Audiencia Nacional "en modo alguna altera la prioridad" que para el Ejecutivo "tenía y tiene" el Bitrasvase, una obra que se ve como un "ejercicio de justicia histórico" al permitir a la comunidad cántabra "aprovechar una parte del embalse del Ebro".
Además, el consejero, que se ha remitido a conocer el contenido de la sentencia y a la asesoría del Abogado del Estado sobre los pasos que puedan darse, ha remarcado que este verano se demostró otro de los efectos de esta obra: que los santanderinos pudieron disfrutar de su abastecimiento, manteniéndose el caudal ecológico de Ebro.

CARACTERISTICAS DEL PROYECTO

El objetivo de esta actuación era asegurar el suministro de agua a las localidades de Santander y Torrelavega durante la temporada estival.
Como consecuencia de la optimización de la gestión de los recursos hidráulicos existentes, se podrá recuperar el caudal natural de estiaje de los ríos Pas y Besaya, lo que permitirá la restauración ambiental en estos dos ríos de Cantabria.
Así, durante los meses de invierno, en los que los ríos Pas y Besaya son más caudalosos, el agua se envia desde la Cuenca Norte hasta el Embalse del Ebro, donde se almacena hasta el momento de su devolución.
Posteriormente, en época de estiaje, el volumen embalsado se transporta por tubería hasta los actuales puntos de captación de los sistemas de abastecimiento de Santander y de Torrelavega.
Como consecuencia de este sistema de explotación, la tubería principal tiene un carácter reversible, circulando el agua en sentido Norte-Ebro durante la época de lluvias y en sentido inverso en período de aguas bajas.
El proyecto se divide en cinco tramos: desde el embalse del Ebro al Azud de Aguayo; desde el Azud de Aguayo hasta el Túnel de Alsa; y desde el embalse de Alsa hasta el punto de bifurcación de los trazados que van hacia los abastecimientos de las comarcas de Torrelavega y Santander.
El sistema se completa con dos últimos tramos hasta los sistemas de abastecimiento de Santander, en las instalaciones de La Molina, y Torrelavega, en las proximidades del río Besaya.
El bitrasvase del Ebro a Cantabria permite a la Comunidad Autónoma tomar 26 hectómetros cúbicos de agua del embalse del Ebro en la época de estiaje para garantizar así el suministro a los ciudadanos de la región y la población estacional que se recibe en verano. Para poder extraer esos 26 hm3, durante los meses de invierno se enviará al pantano idéntica cantidad de agua procedente de los ríos de las cuencas del Pas y el Besaya.
El embalse del Ebro servirá así a Cantabria para guardar reservas en la época de lluvias y recuperar ese mismo agua en verano. Además, cada cuatro años, si se constatara un desequilibrio entre el agua tomada del embalse del Ebro y la enviada, se deberá realizar un ajuste y devolver al pantano la diferencia.
El Gobierno cántabro propuso en su momento la inclusión de este proyecto en el Plan Hidrológico Nacional (gobernando el PP tanto en España como en Cantabria) para paliar así uno de los problemas de abastecimiento que se planteaban en la región, donde el suministro de agua a las poblaciones se realiza con los recursos que fluyen por los cauces de los ríos y en sus pozos.
Esto es así porque en la región --exceptuando el pantano del Ebro, cuyas reservas van a parar a otras comunidades autónomas-- sólo existen pequeños embalses, en cuencas como las del Besaya o el Nansa, dedicados a usos hidroeléctricos. Éste es el caso, por ejemplo, de los embalses de Alsa o La Cohílla. La única excepción es el embalse del Juncal, que sí se destina al abastecimiento de agua, pero su capacidad es de dos hectómetros cúbicos.
Con este panorama, si los meses de verano eran secos, Cantabria tenía serias dificultades para abastecer a algunas zonas de la región y debía realizar cortes, sobre todo en la zona oriental, donde la población se multiplica los veranos por la llegada de numerosos visitantes, sobre todo ciudadanos vascos.
La solución que se propuso a este problema fue el proyecto de mejora del abastecimiento de agua a Santander, el conocido como bitrasvase Ebro-Besaya-Pas. El Gobierno cántabro, encabezado en los orígenes del proyecto por el PP, consiguió que la obra se incluyera en el Plan Hidrológico Nacional, con un caudal inicial de 16,8 hectómetros cúbicos de agua.

TRAMITACIÓN.

En el año 2002, con un Gobierno "popular" también en Madrid, el Consejo de Ministros aprobó un convenio con la sociedad estatal Aguas de la Cuenca del Norte para encargarle el proyecto y ese mismo año se adjudicó la redacción.
El Ejecutivo cántabro (de coalición PP-PRC) también dio el visto bueno al proyecto, en mayo de 2003, semanas antes de las elecciones autonómicas, y sus sucesores en el Gobierno (el pacto PSOE-PRC) pidieron meses más tarde un incremento del caudal del bitrasvase.
Se demandaba un total de 50 hectómetros cúbicos de agua, una petición que fue atendida en parte cuando el Consejo de Ministros, en febrero de 2004, apenas un mes antes de las elecciones generales que llevaron a José Luis Rodríguez Zapatero al Gobierno, acordó aumentar el caudal del bitrasvase hasta alcanzar los 26 hectómetros cúbicos.
Ya con el PSOE en el Gobierno de España, en junio de 2004 se adjudicaron las obras, y en noviembre del mismo año comenzaron los trabajos.

CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS

La ejecución del bitrasvase ha supuesto una inversión de más de 70 millones de euros para la construcción de las conducciones, de unos 50 kilómetros de longitud y con capacidad para transportar 2.500 litros por segundo. La tubería principal tiene carácter reversible, lo cual permite bombear el agua en ambos sentidos.
Financiada en un 65 por ciento por parte del Gobierno central, que ha utilizado para ello fondos europeos, y en un 35 por ciento el Ejecutivo autonómico (aunque un 10% de ello se lo ha adelantado ACUANUR), la obra tiene ahora por delante una segunda fase, su conexión con la Autovía del Agua de Cantabria, para lo cual se prevé una inversión de 32 millones de euros.
Los términos municipales atravesados por estas conducciones son: Las Rozas de Valdearroyo, Campoo de yuso, San Miguel de Aguayo, Molledo, Arenas de Iguña, Anievas, Corvera de Toranzo, Santiurde de Toranzo, Cieza, Santiurde de Reinosa, Enmedio y Campoo de Yuso.