Alerta máxima por la crecida del río Bogotá en el centro de Colombia
Mié, 18/05/2011
Las autoridades colombianas declararon hoy el estado de alerta máxima en las riberas del río Bogotá, en una zona muy poblada y cercana a la capital, ante la crecida del cauce como consecuencia de las lluvias, intensificadas por el fenómeno de La Niña.
La parte más afectada es la zona rural de los municipios de Chía, Cajicá y Cota, al norte de Bogotá.
La temporada de precipitaciones afecta a Colombia desde abril del año pasado y ha causado 448 muertos, ha dejado 524 heridos y 73 personas han sido dadas por desaparecidas.
Asimismo, han dejado a 3,3 millones de damnificados, han resultado dañadas 447.482 casas y 13.110 más han quedado destruidas por la fuerza de las aguas.
Las mismas lluvias han anegado más de 1,2 millones de hectáreas de cultivos, han destruido decenas de carreteras y puentes, así como acueductos, escuelas y otras edificaciones públicas en buena parte de 28 de los 32 departamentos del país.
La alcaldía de Chía declaró la alerta máxima para prevenir pérdida de vida o accidentes en las carreteras, especialmente la que comunica con la autopista norte que conduce a la capital colombiana en un trayecto de menos de 20 kilómetros.
Varios tramos de esa carretera están hoy bajo el agua, situación que obligó a la policía a desviar el intenso tráfico de vehículos que ingresan o salen de un vasto sector de la llamada Sabana de Bogotá.
Fuentes del Cuerpo de Bomberos de Cundinamarca, departamento al que pertenece Chía, señalaron que el nivel del río Bogotá ha aumentado considerablemente en la zona este martes.
Desde el pasado sábado, y a consecuencia de las lluvias, se ha producido la crecida del río a la altura del municipio de Villapinzón, 100 kilómetros al norte de Bogotá y en cuya zona rural montañosa nace la corriente.
El gobernador de Cundinamarca, Andrés González Díaz, quien sobrevoló en helicóptero la Sabana de Bogotá, dijo a periodistas que el río está bajo vigilancia permanente.
En algunas localidades como Cajicá y en barrios de Chía fue ordenada una evacuación preventiva de los habitantes de unas 100 casas.
En otras regiones colombianas, en la norteña costa Caribe, en los departamentos de Santander y Norte de Santander (nordeste), en Antioquia y Valle (oeste) y en Boyacá (centro), principalmente, se han registrado situaciones similares de emergencia también por las lluvias.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) ha pronosticado que las precipitaciones se prolongarán hasta mediados de junio.
La parte más afectada es la zona rural de los municipios de Chía, Cajicá y Cota, al norte de Bogotá.
La temporada de precipitaciones afecta a Colombia desde abril del año pasado y ha causado 448 muertos, ha dejado 524 heridos y 73 personas han sido dadas por desaparecidas.
Asimismo, han dejado a 3,3 millones de damnificados, han resultado dañadas 447.482 casas y 13.110 más han quedado destruidas por la fuerza de las aguas.
Las mismas lluvias han anegado más de 1,2 millones de hectáreas de cultivos, han destruido decenas de carreteras y puentes, así como acueductos, escuelas y otras edificaciones públicas en buena parte de 28 de los 32 departamentos del país.
La alcaldía de Chía declaró la alerta máxima para prevenir pérdida de vida o accidentes en las carreteras, especialmente la que comunica con la autopista norte que conduce a la capital colombiana en un trayecto de menos de 20 kilómetros.
Varios tramos de esa carretera están hoy bajo el agua, situación que obligó a la policía a desviar el intenso tráfico de vehículos que ingresan o salen de un vasto sector de la llamada Sabana de Bogotá.
Fuentes del Cuerpo de Bomberos de Cundinamarca, departamento al que pertenece Chía, señalaron que el nivel del río Bogotá ha aumentado considerablemente en la zona este martes.
Desde el pasado sábado, y a consecuencia de las lluvias, se ha producido la crecida del río a la altura del municipio de Villapinzón, 100 kilómetros al norte de Bogotá y en cuya zona rural montañosa nace la corriente.
El gobernador de Cundinamarca, Andrés González Díaz, quien sobrevoló en helicóptero la Sabana de Bogotá, dijo a periodistas que el río está bajo vigilancia permanente.
En algunas localidades como Cajicá y en barrios de Chía fue ordenada una evacuación preventiva de los habitantes de unas 100 casas.
En otras regiones colombianas, en la norteña costa Caribe, en los departamentos de Santander y Norte de Santander (nordeste), en Antioquia y Valle (oeste) y en Boyacá (centro), principalmente, se han registrado situaciones similares de emergencia también por las lluvias.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) ha pronosticado que las precipitaciones se prolongarán hasta mediados de junio.