El Ayuntamiento de Daimiel (Ciudad Real) dice que "no hay ninguna alerta" sobre botulismo cerca de las Tablas
Mar, 09/08/2011
El concejal de Medio Ambiente y Agricultura del Ayuntamiento de Daimiel (Ciudad Real), Gregorio Díaz del Campo, ha confirmado este lunes que "no hay ningún tipo de alerta" ante un supuesto brote de botulismo en la Laguna de Navaseca, cercana al Parque Nacional de las Tablas de Daimiel.
En un comunicado, el concejal, con respecto a informaciones aparecidas este fin de semana, ha declarado que "se mantiene la vigilancia en aves extintas y enfermas aparecidas y se toman medidas al respecto", ante una situación que "obedece a un ciclo natural motivado por el descenso de agua".
El edil ha remarcado que "esta época es propicia para que se desarrolle el botulismo de forma más fácil que en invierno pero, a día de hoy, está controlado al cien por cien por técnicos mediante controles frecuentes".
Díaz del Campo ha puntualizado que técnicos del Centro El Chaparrillo estuvieron realizando una inspección ocular sobre el terreno en la propia laguna donde aparecieron tres aves muertas y dos más enfermas que fueron trasladas al propio centro, en las que, ha añadido, "no se ha detectado ninguna anomalía de grado superior".
La Laguna de Navaseca, ha explicado, disminuye su capacidad de agua debido a la propia evaporación producida por las altas temperaturas, hecho que genera un deterioro en las propiedades del agua, un proceso natural, ha indicado, que "ocurre en otros lados".
Además, ha agregado, en las últimas semanas el censo de flamencos en esta área ha alcanzado las 700 aves, una circunstancia que, en su opinión, "podría favorecer que aflore un posible botulismo debido a que van desprendiendo materia orgánica".
"No en vano es un ciclo natural que se está atajando con el programa habitual de mantenimiento, al igual que en el Parque Nacional Tablas de Daimiel", ha aclarado el concejal.
El mayor grado de eficacia y de control en la zona es evitar el contacto con el medio de aves extintas y, para ello, ha considerado, existe una persona encargada de recoger y aislar las posibles aves muertas y ha negado que se haya hecho una excavación aparte donde se están enterrando.
Díaz del Campo ha insistido en que "es el ciclo natural del hábitat, en invierno, con más agua, todo se desarrolla más favorablemente que en verano, cuando se pierde algo de calidad en las aguas".
Con respecto al Parque Nacional, el concejal ha considerado que existe un control "exhaustivo" y no se ha registrado algún problema "importante".
En el humedal se están regenerando sus aguas con las plantas subacuáticas, y, de cara al otoño, "estarán en mejores condiciones tanto para la avifauna como para la flora", por lo que ha descartado que el botulismo tenga que ver con la contaminación en Las Tablas detectada hace unas semanas.
En un comunicado, el concejal, con respecto a informaciones aparecidas este fin de semana, ha declarado que "se mantiene la vigilancia en aves extintas y enfermas aparecidas y se toman medidas al respecto", ante una situación que "obedece a un ciclo natural motivado por el descenso de agua".
El edil ha remarcado que "esta época es propicia para que se desarrolle el botulismo de forma más fácil que en invierno pero, a día de hoy, está controlado al cien por cien por técnicos mediante controles frecuentes".
Díaz del Campo ha puntualizado que técnicos del Centro El Chaparrillo estuvieron realizando una inspección ocular sobre el terreno en la propia laguna donde aparecieron tres aves muertas y dos más enfermas que fueron trasladas al propio centro, en las que, ha añadido, "no se ha detectado ninguna anomalía de grado superior".
La Laguna de Navaseca, ha explicado, disminuye su capacidad de agua debido a la propia evaporación producida por las altas temperaturas, hecho que genera un deterioro en las propiedades del agua, un proceso natural, ha indicado, que "ocurre en otros lados".
Además, ha agregado, en las últimas semanas el censo de flamencos en esta área ha alcanzado las 700 aves, una circunstancia que, en su opinión, "podría favorecer que aflore un posible botulismo debido a que van desprendiendo materia orgánica".
"No en vano es un ciclo natural que se está atajando con el programa habitual de mantenimiento, al igual que en el Parque Nacional Tablas de Daimiel", ha aclarado el concejal.
El mayor grado de eficacia y de control en la zona es evitar el contacto con el medio de aves extintas y, para ello, ha considerado, existe una persona encargada de recoger y aislar las posibles aves muertas y ha negado que se haya hecho una excavación aparte donde se están enterrando.
Díaz del Campo ha insistido en que "es el ciclo natural del hábitat, en invierno, con más agua, todo se desarrolla más favorablemente que en verano, cuando se pierde algo de calidad en las aguas".
Con respecto al Parque Nacional, el concejal ha considerado que existe un control "exhaustivo" y no se ha registrado algún problema "importante".
En el humedal se están regenerando sus aguas con las plantas subacuáticas, y, de cara al otoño, "estarán en mejores condiciones tanto para la avifauna como para la flora", por lo que ha descartado que el botulismo tenga que ver con la contaminación en Las Tablas detectada hace unas semanas.