Tras anunciar su decisión de rescatar para Utrera el servicio de la red en baja que actualmente presta en el municipio Aguas del Huesna, el alcalde, de la localidad, el andalucista Francisco Jiménez Morales, mantuvo ayer una reunión con el consejero delegado de Emasesa (Empresa Metropolitana de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas de Sevilla), Jesús Maza, y con el director de Operaciones y Desarrollo Urbano de la misma entidad, Antonio Díaz.

Según el alcalde, la reunión es un primer contacto destinado a analizar las posibilidades de «poder llegar a un entendimiento entre ambas partes», con relación a la gestión del agua en Utrera. La determinación de que el abastecimiento de Utrera no sea gestionado por Aguas del Huesna, está motivada, según indicó Jiménez Morales por «el cúmulo de incumplimientos y despropósitos por parte de la Junta de Andalucía y del propio Huesna con la localidad utrerana».

«Esta decisión es algo que me entristece después de la lealtad institucional que hemos demostrado durante todos estos años tanto en la Mancomunidad del Bajo Guadalquivir, como en el Huesna, o en la propia Diputación. El gobierno municipal de Utrera ha cumplido más allá de lo exigible pero en cambio sólo hemos recibido trabas, dificultades y humillaciones», señaló.

Entre los motivos expuestos para el rescate del abastecimiento, se encuentran el desvío del arroyo Calzas Anchas, proyecto en el que el Ayuntamiento utrerano se ha quedado sólo «abonando la cantidad de 4 millones de euros»(el 30 por ciento del proyecto total), pese a que el consistorio no tiene competencias en materia hídrica y como recoge el PGOU de Utrera, la consejería de Obras Públicas y Transportes iba a llevar a cabo la totalidad de la obra.

«Claro, que para otras poblaciones cercanas, con similares problemas, la breve Agencia Andaluza del Agua le ha financiado el 100%», aseveró con cierta ironía.

Otro de los incumplimientos sobre los que Jiménez mostró su malestar se refiere al anillo hídrico.

Se trata de una infraestructura de suministro de agua que está valorada en torno a los 2 millones de euros y que fue exigida por el Huesna para abastecer a las diversas promociones tanto residenciales como industriales del municipio.