The CHS undertakes cleaning sludge from the river, parked for months
Tue, 26/06/2012
La Confederación Hidrográfica del Segura comenzó ayer la operación de limpieza de parte del cauce urbano del Segura a su paso por el casco antiguo de la ciudad, después de meses sin acometer una actuación de esta envergadura. Desde primera hora de la mañana las excavadoras y camiones iniciaron los trabajos de dragado del lecho del río en la zona donde más acumulación de fango había, entre el puente de Las Salesas, que da acceso al centro comercial Ociopía, y la pasarela ubicada en el lateral del monasterio.
Los operarios recibieron ayer por la tarde al Comisario de Aguas de la CHS, José Carlos González, que se desplazó con técnicos del organismo gestor de cuenca para conocer de primera mano el estado de la obra, una visita que también contó con la presencia del concejal de Medio Ambiente del Consistorio oriolano, el ecologista Manuel Culiáñez.
Según indicó el responsable de la Confederación, los trabajos se acometen de forma urgente, como avanzó en la visita que cursó a finales del mes de mayo a la capital de la Vega Baja, y se prolongarán en una primera fase hasta mañana.
González explicó que esta actuación es «una obra de choque para conseguir reducir el lecho del Segura en esta parte del recorrido», que ha visto cómo durante dos años se han ido depositando cientos de toneladas que obstruyen el caudal y causan malos olores, sin que nadie actuase para remediarlo.
La situación ha provocado en reiteradas ocasiones protestas de vecinos de las calles aledañas, sobre todo de los propietarios de casas en la calle del Río, que ayer se acercaron a ver los trabajos y se congratularon de la prontitud de la CHS por poner remedio a la situación. Lo cierto es que ayer los famosos olores del cauce no existían, circunstancia reseñada por el propio comisario.
González destacó que la retirada de los sedimentos es paliativa y que los análisis efectuados de la materia orgánica han dado como resultado que no se trata de lodos contaminantes, sino sedimentos de origen natural.
Los camiones los depositarán, una vez concluya el trabajo de extracción, en vertederos autorizados o incluso en un soto que tiene la Confederación en término municipal de Algorfa para acabar el proceso de secado de los lodos, que pueden emplearse como abono para tareas agrícolas, especificó el responsable de la CHS.
El proceso ha tenido que esperar a la bajada del cauce para que las máquinas pudieran sacar en las mejores condiciones los limos, aprovechando también que las altas temperaturas de la semana pasada han contribuido al secado de la materia. Asimismo el Comisario de Aguas resaltó que el proceso de acumulación se debe al remanso originado por los azudes del centro de la ciudad, y que «se ha tenido que coordinar la extracción con los intereses de los regantes». Una vez concluya la operación la CHS volverá a reanudar la suelta de caudales desde Ojós, operación que devolverá al Segura su aspecto habitual. Mientras llega ese momento las máquinas se dedicarán a apartar a los lados del encauzamiento los limos, para que el secado se produzca de una forma más rápida.
El responsable de la Confederación fue más allá y avanzó que el organismo no descarta realizar una operación similar tras el verano, ya que indicó «lo conveniente es hacerlo por lo menos dos veces al año», un hecho que quiere retomar el nuevo responsable como habitual para las próximas temporadas de riego.
Otra de las cuestiones que relató es que el trabajo se circunscribirá «de momento» a la zona de Las Salesas ya que actuaciones similares más abajo requieren de mayor complejidad y de maquinaria más grande, pero tampoco descartó que se pueda producir a medio plazo.
Por su parte el edil de Medio Ambiente destacó la fluidez de las relaciones existentes con los actuales responsables de la CHS y la predisposición de sus gestores para solventar los problemas planteados por el equipo de gobierno, tanto en la sedimentación del cauce urbano como con las depuradoras del término municipal.
Los operarios recibieron ayer por la tarde al Comisario de Aguas de la CHS, José Carlos González, que se desplazó con técnicos del organismo gestor de cuenca para conocer de primera mano el estado de la obra, una visita que también contó con la presencia del concejal de Medio Ambiente del Consistorio oriolano, el ecologista Manuel Culiáñez.
Según indicó el responsable de la Confederación, los trabajos se acometen de forma urgente, como avanzó en la visita que cursó a finales del mes de mayo a la capital de la Vega Baja, y se prolongarán en una primera fase hasta mañana.
González explicó que esta actuación es «una obra de choque para conseguir reducir el lecho del Segura en esta parte del recorrido», que ha visto cómo durante dos años se han ido depositando cientos de toneladas que obstruyen el caudal y causan malos olores, sin que nadie actuase para remediarlo.
La situación ha provocado en reiteradas ocasiones protestas de vecinos de las calles aledañas, sobre todo de los propietarios de casas en la calle del Río, que ayer se acercaron a ver los trabajos y se congratularon de la prontitud de la CHS por poner remedio a la situación. Lo cierto es que ayer los famosos olores del cauce no existían, circunstancia reseñada por el propio comisario.
González destacó que la retirada de los sedimentos es paliativa y que los análisis efectuados de la materia orgánica han dado como resultado que no se trata de lodos contaminantes, sino sedimentos de origen natural.
Los camiones los depositarán, una vez concluya el trabajo de extracción, en vertederos autorizados o incluso en un soto que tiene la Confederación en término municipal de Algorfa para acabar el proceso de secado de los lodos, que pueden emplearse como abono para tareas agrícolas, especificó el responsable de la CHS.
El proceso ha tenido que esperar a la bajada del cauce para que las máquinas pudieran sacar en las mejores condiciones los limos, aprovechando también que las altas temperaturas de la semana pasada han contribuido al secado de la materia. Asimismo el Comisario de Aguas resaltó que el proceso de acumulación se debe al remanso originado por los azudes del centro de la ciudad, y que «se ha tenido que coordinar la extracción con los intereses de los regantes». Una vez concluya la operación la CHS volverá a reanudar la suelta de caudales desde Ojós, operación que devolverá al Segura su aspecto habitual. Mientras llega ese momento las máquinas se dedicarán a apartar a los lados del encauzamiento los limos, para que el secado se produzca de una forma más rápida.
El responsable de la Confederación fue más allá y avanzó que el organismo no descarta realizar una operación similar tras el verano, ya que indicó «lo conveniente es hacerlo por lo menos dos veces al año», un hecho que quiere retomar el nuevo responsable como habitual para las próximas temporadas de riego.
Otra de las cuestiones que relató es que el trabajo se circunscribirá «de momento» a la zona de Las Salesas ya que actuaciones similares más abajo requieren de mayor complejidad y de maquinaria más grande, pero tampoco descartó que se pueda producir a medio plazo.
Por su parte el edil de Medio Ambiente destacó la fluidez de las relaciones existentes con los actuales responsables de la CHS y la predisposición de sus gestores para solventar los problemas planteados por el equipo de gobierno, tanto en la sedimentación del cauce urbano como con las depuradoras del término municipal.