UNICEF advierte que los supervivientes del tsunami se enfrentan al aumento del riesgo de enfermedades por el agua
Tue, 25/01/2005
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) anunció hoy que cientos de miles de supervivientes del tsunami que viven en campamentos temporales se enfrentan al aumento del riesgo de enfermedades por causa del agua, debido a que el número de letrinas y de instalaciones sanitarias es insuficiente y que muchas de ellas han quedado inundadas, según afirma en un comunicado.
La situación de los servicios sanitarios es particularmente preocupante en Indonesia, donde en algunas áreas de la provincia de Aceh sólo una de cada mil personas tiene acceso a letrinas. La escasez de letrinas se ha visto agravada por las fuertes lluvias, que han inundado muchas de ellas en los campamentos situadas en zonas bajas y que han provocado que el Gobierno anuncie la reubicación de 21 campamentos de desplazados a lugares más altos.
"La lluvia y la sobrepoblación están empeorando la ya de por sí mala situación", declaró el pasado viernes la directora ejecutiva de UNICEF, Carol Bellamy. "Las instalaciones de emergencia se están viendo saturadas y la reconstrucción de nuevas letrinas no se está haciendo de acuerdo a la demanda. Las condiciones en las que viven las familias cada vez son más deplorables, y les están dejando con poca defensa ante las enfermedades".
Los niños y niñas, que representan al menos un tercio de la población en los países más afectados, son particularmente vulnerables a las enfermedades causadas por el agua como el cólera o la diarrea.
Las fuertes lluvias también han empeorado la situación en Sri Lanka, donde los campamentos están inundados y muchas letrinas están llenas y necesitan ser vaciadas. Mientras los que residen en los 450 campamentos temporales de Sri Lanka tienen acceso a agua potable, sólo el 35 por ciento de las personas de los campamentos tiene acceso a servicios sanitarios seguros, asegura UNICEF.
En las Maldivas, 85.000 personas en 69 islas tienen destruidos sus suministros de agua potable. Los suministros de agua están siendo restaurados, pero la higiene y el saneamiento son serios problemas, añade la organización.
UNICEF afirma que está trabajando con los gobiernos para coordinar los esfuerzos de ayuda humanitaria a través de los países afectados con el fin de restaurar el acceso al agua potable y saneamiento.
ACTIVIDADES DE AYUDA
Las actividades de ayuda humanitaria de la agencia incluyen la construcción de letrinas de emergencia para campamentos y tiendas escolares; el suministro de kits de saneamiento (con palas y sábanas de plástico) y kits de agua (con contenedores de agua, tabletas de purificación y jabón); y bienes para limpieza y rehabilitación e instalación de plantas de desalinización.
Asimismo, incluyen el apoyo a la educación sobre higiene en escuelas y campamentos; la dirección de los servicios sanitarios y de limpieza en las áreas afectadas y el suministro de tanques de agua y agua potable.
Los proyectos de emergencia de agua y servicios sanitarios de UNICEF serán apoyados por el Fondo de Agua y Saneamiento del Tsunami, creado por la Fundación Clinton y UNICEF. El fondo también ayudará a los gobiernos afectados con la dirección a largo plazo del suministro de agua y sistemas de saneamiento, incluyendo temas como la excavación y la construcción permanente de letrinas, especialmente en escuelas y centros de salud.
Además, el fondo apoyará la educación y promoción de la higiene en las escuelas y grupos comunitarios. Muchos de los niños afectados por el tsunami carecían de acceso a agua potable y saneamiento antes del golpe de las olas, añade UNICEF. En todo el sur de Asia, sólo el 35 por ciento de las personas tienen acceso a una letrina básica y el 84 por ciento a agua potable. Los niños que viven sin estos elementos esenciales son propensos a estados de debilidad y desnutrición por los repetitivos ataques de diarrea y otras enfermedades vinculadas al agua y el saneamiento, advierte la organización.
Además, muchos niños en la región, particularmente las niñas, tienen negado su derecho a la educación porque están ocupados trayendo agua o están impedidos por la carencia de instalaciones sanitarias separadas y decentes en las escuelas.
"El agua no es una necesidad inmediata, pero sí un desafío a largo plazo", declaró Bellamy, quien añadió que el "agua potable y el saneamiento adecuado son esenciales para mantener a la gente con vida hoy y darles la oportunidad de tener una vida mejor mañana".
La situación de los servicios sanitarios es particularmente preocupante en Indonesia, donde en algunas áreas de la provincia de Aceh sólo una de cada mil personas tiene acceso a letrinas. La escasez de letrinas se ha visto agravada por las fuertes lluvias, que han inundado muchas de ellas en los campamentos situadas en zonas bajas y que han provocado que el Gobierno anuncie la reubicación de 21 campamentos de desplazados a lugares más altos.
"La lluvia y la sobrepoblación están empeorando la ya de por sí mala situación", declaró el pasado viernes la directora ejecutiva de UNICEF, Carol Bellamy. "Las instalaciones de emergencia se están viendo saturadas y la reconstrucción de nuevas letrinas no se está haciendo de acuerdo a la demanda. Las condiciones en las que viven las familias cada vez son más deplorables, y les están dejando con poca defensa ante las enfermedades".
Los niños y niñas, que representan al menos un tercio de la población en los países más afectados, son particularmente vulnerables a las enfermedades causadas por el agua como el cólera o la diarrea.
Las fuertes lluvias también han empeorado la situación en Sri Lanka, donde los campamentos están inundados y muchas letrinas están llenas y necesitan ser vaciadas. Mientras los que residen en los 450 campamentos temporales de Sri Lanka tienen acceso a agua potable, sólo el 35 por ciento de las personas de los campamentos tiene acceso a servicios sanitarios seguros, asegura UNICEF.
En las Maldivas, 85.000 personas en 69 islas tienen destruidos sus suministros de agua potable. Los suministros de agua están siendo restaurados, pero la higiene y el saneamiento son serios problemas, añade la organización.
UNICEF afirma que está trabajando con los gobiernos para coordinar los esfuerzos de ayuda humanitaria a través de los países afectados con el fin de restaurar el acceso al agua potable y saneamiento.
ACTIVIDADES DE AYUDA
Las actividades de ayuda humanitaria de la agencia incluyen la construcción de letrinas de emergencia para campamentos y tiendas escolares; el suministro de kits de saneamiento (con palas y sábanas de plástico) y kits de agua (con contenedores de agua, tabletas de purificación y jabón); y bienes para limpieza y rehabilitación e instalación de plantas de desalinización.
Asimismo, incluyen el apoyo a la educación sobre higiene en escuelas y campamentos; la dirección de los servicios sanitarios y de limpieza en las áreas afectadas y el suministro de tanques de agua y agua potable.
Los proyectos de emergencia de agua y servicios sanitarios de UNICEF serán apoyados por el Fondo de Agua y Saneamiento del Tsunami, creado por la Fundación Clinton y UNICEF. El fondo también ayudará a los gobiernos afectados con la dirección a largo plazo del suministro de agua y sistemas de saneamiento, incluyendo temas como la excavación y la construcción permanente de letrinas, especialmente en escuelas y centros de salud.
Además, el fondo apoyará la educación y promoción de la higiene en las escuelas y grupos comunitarios. Muchos de los niños afectados por el tsunami carecían de acceso a agua potable y saneamiento antes del golpe de las olas, añade UNICEF. En todo el sur de Asia, sólo el 35 por ciento de las personas tienen acceso a una letrina básica y el 84 por ciento a agua potable. Los niños que viven sin estos elementos esenciales son propensos a estados de debilidad y desnutrición por los repetitivos ataques de diarrea y otras enfermedades vinculadas al agua y el saneamiento, advierte la organización.
Además, muchos niños en la región, particularmente las niñas, tienen negado su derecho a la educación porque están ocupados trayendo agua o están impedidos por la carencia de instalaciones sanitarias separadas y decentes en las escuelas.
"El agua no es una necesidad inmediata, pero sí un desafío a largo plazo", declaró Bellamy, quien añadió que el "agua potable y el saneamiento adecuado son esenciales para mantener a la gente con vida hoy y darles la oportunidad de tener una vida mejor mañana".