CATALUÑA RIEGOS-RESTRICCIONES Canal Aragón y Cataluña afronta peor campaña riegos de historia

Fri, 01/04/2005

EFE

La Comunidad General del Canal de Aragón y Cataluña afronta este año la peor de las campañas de riego llevadas a cabo en sus casi cien años de historia a causa de la prolongada sequía y a la escasa disponibilidad de caudales, situación que ha obligado a reducir los cupos de agua para los regantes.
Fuentes de la organización regante, cuya junta de gobierno se reunirá esta noche para analizar la situación y estudiar la aplicación de posibles restricciones, han explicado a EFE que la incidencia de la sequía es mayor en la zona de influencia del embalse de Barasona, donde la escasez de caudales obliga a regar con 0,25 litros/segundo por hectárea, la mitad del cupo habitual en otras campañas.
El embalse de Barasona, que riega una superficie total aproximada de cincuenta mil hectáreas de las comarcas altoaragonesas del Bajo Cinca, Cinca Medio y Litera, se encuentra actualmente, un mes después de iniciarse la campaña, por debajo de los cuarenta hectómetros, nivel en el que suelen situarse sus aguas en agosto, en los años en que el régimen de lluvias se considera normal.
Las fuentes han añadido que las escasas precipitaciones de nieve registradas durante la temporada invernal, junto a la ausencia de lluvias y al bajo nivel de las aguas en Barasona, sitúan a la campaña de 2005 en unas condiciones de mayor escasez para afrontar los riegos que las que se produjeron en 1948.
La incidencia de la sequía en la producción agropecuaria se trasladó a la Lonja de Binéfar, que en su sesión de ayer acordó, con la conformidad de vendedores y compradores, una subida de los precios de la alfalfa y maíz que se emplea para fabricar piensos.
Por otra parte, la Asociación de Habitantes del Pirineo ha cuantificado hoy las pérdidas provocadas en la economía agropecuaria de las comarcas pirenaicas en más de 16 millones de euros, 12 de los cuales corresponderían a la producción ovina y el resto, a la bovina.
Desde esta Asociación, se asegura que las pérdidas cuantificadas hasta la fecha, en su mayor parte gastos correspondientes a una alimentación adicional para el ganado, se incrementarán de forma progresiva ya que la ausencia de lluvias suficientes provocará una situación de falta de pastos en los puertos durante el verano