La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha constatado la presencia de mejillón cebra adulto en el embalse de Sobrón, en la provincia de Burgos, y aguas abajo del mismo, y en el salto hidroeléctrico de Puentelarrá, en Álava, ambos dedicados a la producción hidroeléctrica. Este hallazgo se ha realizado a través de una prospección preliminar de la zona por parte de la guardería fluvial del Organismo de Cuenca que se llevó a cabo durante la jornada de ayer.
La inspección visual se desarrolló en esta zona después de que la Confederación del Ebro recibiera el miércoles, 13 de septiembre, una comunicación de la Asociación para la Conservación y el Estudio de la Biodiversidad (ACEBI), que realiza distintos estudios para el Departamento de Biodiversidad del Gobierno Vasco, en la que se informaba sobre la posible presencia de mejillón cebra en el curso alto del Ebro a su paso por las provincias de Álava y Burgos.
Los biólogos de ACEBI se encontraban en la zona realizando un informe para el Gobierno Vasco y dirigido por el Museo Nacional de Ciencias Naturales sobre las poblaciones de Náyades, un grupo de bivalvos, en Álava, cuando detectaron ejemplares de mejillón cebra y lo comunicaron a la Confederación y a otras autoridades.
Este hallazgo confirma las sospechas de la existencia de mejillón cebra adulto en el Ebro aguas arriba de Zaragoza, donde el organismo halló la presencia de larvas en los últimos muestreos realizados en la estación de control de larvas en el meandro de Ranillas de Zaragoza.
INSPECCIÓN
En la inspección realizada ayer, cuyos datos han sido cotejados por los técnicos del Organismo de Cuenca, los resultados de búsqueda de mejillón dieron positivo en tres puntos, aguas abajo de Puentelarrá, donde se halló el primer ejemplar adherido a un motor de riego; aguas abajo de la presa de Sobrón, donde sólo se encontró un ejemplar de 2 centímetros y en el propio embalse de Sobrón, donde se halla la mayor concentración, aunque de ejemplares pequeños, en los tallos de las plantas acuáticas. Además, se han ampliado estas inspecciones oculares a otros embalses de la cuenca y por el momento en Tranquera, Maidevera y Monteagudo no se ha hallado presencia de mejillón cebra.
La Confederación, como ya informó en comunicado oficial el pasado miércoles, ha solicitado para el próximo lunes, día 18, la convocatoria de la reunión del grupo técnico del mejillón cebra dependiente de la Comisión Nacional de Protección de la Naturaleza integrado por el propio organismo, el Gobierno de Aragón, la Generalitat de Cataluña y la Generalitat Valenciana.
Además ha invitado a dicha reunión a las nueve comunidades autónomas de la Cuenca del Ebro, tanto las afectadas como las potencialmente afectadas, por ser las administraciones competentes en esta materia.
La Confederación Hidrográfica del Ebro realiza desde el año 2004 estudios sobre el estado larvario del mejillón cebra y su evolución. Hasta el momento las larvas se habían detectado sólo en los puntos muestreados aguas abajo de Mequinenza. La detección de las mismas en el río Ebro en Zaragoza ya se consideraba una muestra de la existencia de colonias de mejillón cebra adulto en el eje del Ebro aguas arriba.
SEMINARIO INTERNACIONAL
Para ampliar el conocimiento sobre la gestión de la plaga del mejillón cebra y compartir las experiencias a nivel internacional, la Confederación Hidrográfica del Ebro ha organizado para los próximos días 18 y 19 de octubre el Seminario Internacional "Estrategias de actuación en aguas infectadas por el mejillón cebra" que reunirá a expertos en este tema procedentes de todo el mundo.
La afección del mejillón cebra se da en cuencas de Estados Unidos y de la práctica totalidad de Europa sin que, por el momento, se hayan encontrado soluciones efectivas. En España en la cuenca del Ebro se detectó por primera vez en 2001 y en 2005 se detectó en la cuenca del Júcar.
El mejillón cebra es un molusco bivalvo de agua dulce, que también resiste en aguas salobres. Procede de los mares Negro y Caspio, donde habita en equilibrio biológico y no es comestible, aunque no se considera tóxico.
Esta especie invasora se caracteriza por su rápida propagación y porque se reproduce con gran facilidad, en Estados Unidos, en la zona de los Grandes Lagos han alcanzado la cifra de 750.000 individuos por metro cuadrado, provocando graves daños ambientales y económicos, al cubrir y tapizar todo el sustrato que encuentra a su paso inutilizando todo tipo de infraestructuras.