Junta y CHG determinarán en diciembre qué cultivos de regadío no tendrán agua por la sequía
Tue, 19/09/2006
El consejero de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, Isaías Pérez Saldaña, anunció hoy en Córdoba que, de acuerdo con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), "probablemente en diciembre haya que tomar decisiones en torno reducción de regadíos para los cultivos no permanentes".
En rueda de prensa, Pérez Saldaña defendió la necesidad de tal medida en el hecho de que "la situación de los embalses no resiste que sigamos manteniendo producciones no permanentes y al mismo tiempo seguir sosteniendo la garantía del abastecimiento urbano para los dos próximos años y sirva de ejemplo que los embalses de Córdoba no llegan ya al 30 por ciento, y parece por lo tanto necesario empezar a marcar, y así lo estamos haciendo las consejerías de Medio Ambiente y Agricultura en acuerdo con la CHG, qué cultivos deben ser prioritarios (y tendrán agua para regadío) y cuáles tienen que ser sometidos o a la imposibilidad de sembrar para el próximo año".
En este sentido, Pérez Saldaña subrayó que "el arroz, casi con seguridad, no podrá ser sembrado la próxima campaña porque no hay posibilidades y porque se tomó la decisión de utilizar los derechos de este año para poder regar el pasado año, y junto al arroz tendrán problemas otros cultivos, a no ser que hubiera un otoño de lluvias que hicieran recuperarse a los embalses hasta más del 50 por ciento, cantidad sobre la que siempre marcamos la normalidad en cuanto a los regadíos".
Junto al arroz, según el consejero de Agricultura, también pueden resultar afectados por la falta de agua para regadío cultivos como "el algodón, el tomate o el maiz, cultivo éste último que alcanza, junto con el arroz, uno de los de mayor consumo de agua, pues hablamos de más de 9.000 metros cúbicos de agua por hectárea, cuando la media está entre 4.000 y 5.000 metros cúbicos", mientras que otros cultivos, como los frutales, los cítricos en particular y también el olivar, si tendrán agua para regadío, dado su carácter permanente y por la necesidad de contar con riegos de mantenimiento.
TOMATE, ALGODON Y OLIVAR
Entrando en detalles, Pérez Saldaña destacó que "el tomate tendrá dificultades si no hay agua, pues, indudablemente, este año el tomate industrial ha sido uno de los grandes productos perdedores, ya que ha perdido más del 75 por ciento de la producción, como consecuencia de la falta de regadíos para la producción de tomates destinados a la industria de transformación".
Por otro lado, también el algodón ha perdido producción, tanto por la falta de agua de regadío, como por la reforma de la OCM del algodón, "que hizo que, en vez de 80.000 hectáreas, se hayan sembrado 71.800", y junto a ello, "la falta de los últimos riegos ha hecho que el rendimiento haya sido muy bajo, de forma que se prevé que la nueva cosecha no alcance ni el 48 por ciento de la del año anterior, con lo que hablaríamos de 140.000 toneladas de algodón como máximo, pero como la reforma no obliga a recoger el algodón, sino sólo a llevarlo hasta cápsula, no sabemos si se recogerá algodón y, por tanto, las cifras finales de la cosecha pueden ser catastróficas".
En consecuencia, según Pérez Saldaña, "el daño que el reglamento (de la reforma de OCM del algodón) ha hecho abre la vía de las indemnizaciones para el sector desmotador, porque no tendrán algodón para desmotar, para el agricultor, que no ha podido alcanzar una cosecha adecuada, y para la propia Administración, que se ve mermada en los intereses económicos de Andalucía en la ficha presupuestaria, porque más de 8.000 hectáreas no se han sembrado, como consecuencia de la decisión del reglamento que ahora ha anulado el Tribunal de Luxemburgo, pero que sigue en vigor".
Finalmente, respecto al caso del olivar, que sí dispondría de agua para regadío, a pesar de las restricciones anunciadas para otros cultivos a partir de diciembre, Pérez Saldaña dijo que la próxima campaña se prevé "generosa, de las de tipo media-alta", por lo que aseguró que el precio del aceite a partir de diciembre "no puede exceder de los 2,5 euros por litro".
El consejero reconoció que todavía se encuentra el aceite de oliva en el mercado por encima de los cuatro euros por litro, debido a que "aún no ha perdido su valor comercial", dado que se trata de aceite de la anterior campaña, que, por la sequía, tuvo una producción menor y un aceite resultante mucho más caro, lo que hizo que bajara el consumo en España un once por ciento.
AÑO HISTORICO EN SECANO
A pesar de los malos resultados que en general han presentado los cultivos de regadío, Pérez Saldaña consideró que "el nivel de pérdidas de regadío no es significativo, pues, aunque fueran a perderse unos 100 millones de euros en producción, se van a ganar en valor comercial muchos más".
"Sin embargo --concluyó-- en secano se va a ganar en valor comercial y en valor producción, y será un año histórico en positivo, de forma que el equilibrio entre estos dos extremos hará que este año será uno de los llamados buenos, y económicamente muy bueno, pues el valor de la balanza nos dice que la agricultura ha incrementado en un tres por ciento el PIB andaluz".
En rueda de prensa, Pérez Saldaña defendió la necesidad de tal medida en el hecho de que "la situación de los embalses no resiste que sigamos manteniendo producciones no permanentes y al mismo tiempo seguir sosteniendo la garantía del abastecimiento urbano para los dos próximos años y sirva de ejemplo que los embalses de Córdoba no llegan ya al 30 por ciento, y parece por lo tanto necesario empezar a marcar, y así lo estamos haciendo las consejerías de Medio Ambiente y Agricultura en acuerdo con la CHG, qué cultivos deben ser prioritarios (y tendrán agua para regadío) y cuáles tienen que ser sometidos o a la imposibilidad de sembrar para el próximo año".
En este sentido, Pérez Saldaña subrayó que "el arroz, casi con seguridad, no podrá ser sembrado la próxima campaña porque no hay posibilidades y porque se tomó la decisión de utilizar los derechos de este año para poder regar el pasado año, y junto al arroz tendrán problemas otros cultivos, a no ser que hubiera un otoño de lluvias que hicieran recuperarse a los embalses hasta más del 50 por ciento, cantidad sobre la que siempre marcamos la normalidad en cuanto a los regadíos".
Junto al arroz, según el consejero de Agricultura, también pueden resultar afectados por la falta de agua para regadío cultivos como "el algodón, el tomate o el maiz, cultivo éste último que alcanza, junto con el arroz, uno de los de mayor consumo de agua, pues hablamos de más de 9.000 metros cúbicos de agua por hectárea, cuando la media está entre 4.000 y 5.000 metros cúbicos", mientras que otros cultivos, como los frutales, los cítricos en particular y también el olivar, si tendrán agua para regadío, dado su carácter permanente y por la necesidad de contar con riegos de mantenimiento.
TOMATE, ALGODON Y OLIVAR
Entrando en detalles, Pérez Saldaña destacó que "el tomate tendrá dificultades si no hay agua, pues, indudablemente, este año el tomate industrial ha sido uno de los grandes productos perdedores, ya que ha perdido más del 75 por ciento de la producción, como consecuencia de la falta de regadíos para la producción de tomates destinados a la industria de transformación".
Por otro lado, también el algodón ha perdido producción, tanto por la falta de agua de regadío, como por la reforma de la OCM del algodón, "que hizo que, en vez de 80.000 hectáreas, se hayan sembrado 71.800", y junto a ello, "la falta de los últimos riegos ha hecho que el rendimiento haya sido muy bajo, de forma que se prevé que la nueva cosecha no alcance ni el 48 por ciento de la del año anterior, con lo que hablaríamos de 140.000 toneladas de algodón como máximo, pero como la reforma no obliga a recoger el algodón, sino sólo a llevarlo hasta cápsula, no sabemos si se recogerá algodón y, por tanto, las cifras finales de la cosecha pueden ser catastróficas".
En consecuencia, según Pérez Saldaña, "el daño que el reglamento (de la reforma de OCM del algodón) ha hecho abre la vía de las indemnizaciones para el sector desmotador, porque no tendrán algodón para desmotar, para el agricultor, que no ha podido alcanzar una cosecha adecuada, y para la propia Administración, que se ve mermada en los intereses económicos de Andalucía en la ficha presupuestaria, porque más de 8.000 hectáreas no se han sembrado, como consecuencia de la decisión del reglamento que ahora ha anulado el Tribunal de Luxemburgo, pero que sigue en vigor".
Finalmente, respecto al caso del olivar, que sí dispondría de agua para regadío, a pesar de las restricciones anunciadas para otros cultivos a partir de diciembre, Pérez Saldaña dijo que la próxima campaña se prevé "generosa, de las de tipo media-alta", por lo que aseguró que el precio del aceite a partir de diciembre "no puede exceder de los 2,5 euros por litro".
El consejero reconoció que todavía se encuentra el aceite de oliva en el mercado por encima de los cuatro euros por litro, debido a que "aún no ha perdido su valor comercial", dado que se trata de aceite de la anterior campaña, que, por la sequía, tuvo una producción menor y un aceite resultante mucho más caro, lo que hizo que bajara el consumo en España un once por ciento.
AÑO HISTORICO EN SECANO
A pesar de los malos resultados que en general han presentado los cultivos de regadío, Pérez Saldaña consideró que "el nivel de pérdidas de regadío no es significativo, pues, aunque fueran a perderse unos 100 millones de euros en producción, se van a ganar en valor comercial muchos más".
"Sin embargo --concluyó-- en secano se va a ganar en valor comercial y en valor producción, y será un año histórico en positivo, de forma que el equilibrio entre estos dos extremos hará que este año será uno de los llamados buenos, y económicamente muy bueno, pues el valor de la balanza nos dice que la agricultura ha incrementado en un tres por ciento el PIB andaluz".