LOS DATOS
Consumo: 299 litros por persona y día en 2003, la cifra más baja jamás conseguida.

Causas: Detección de fugas en la red y mayor concienciación de los ciudadanos para gastar sólo el agua necesaria.

Tuberías: El año pasado se incorporaron a la red 19 kilómetros y se sustituyeron otros 11.
Vitoria consiguió batir el año pasado el récord de ahorro de agua. Y lo hizo al consumir 299 litros por habitante y día, un dato «histórico», a juicio de José Antonio Pizarro, presidente de Amvisa. «Nunca se había logrado y es algo importante. Además, esta cifra es en bruto, es decir en ella se incluye el agua de uso industrial, el doméstico y el de jardines y piscinas, con lo que tiene más mérito», se felicitó.

Pizarro recordó que desde la década de los ochenta el consumo ha ido a la baja, hasta llegar, por ejemplo, en 1990 a los 307 litros diarios por ciudadano, con la salvedad de que en ese año hubo restricciones como consecuencia de la sequía. «Ahora hay más habitantes y más actividad industrial y se ha bajado», recalcó.

Estos ratios, auguró el responsable de Amvisa, se podrán mejorar este ejercicio a la vista de las cifras registradas en los cuatro primeros meses. Entre enero y abril, los vitorianos han consumido 7,3 millones de metros cúbicos frente a los 7,6 del mismo periodo de 2003. «Creo que en 2004 vamos a estar por debajo de los 299 litros si se cumplen las previsiones», vaticinó.

Para Pizarro, las causas de este ahorro de agua tienen que ver con «la correcta gestión y detección de fugas en la red» y con «la mayor conciencia de los ciudadanos». «La gente consume sólo el agua que necesita e, incluso, hay empresas que han comenzado a reciclarla».

Además, durante el último año se incorporaron a la red 19 kilómetros de tuberías como consecuencia de las nuevas zonas de expansión de la ciudad y se sustituyeron otros 11 kilómetros, buena parte de ellos en el barrio de Zaramaga, en donde se renovó por completo la red de distribución.

Embalses al 83%

Otras actuaciones de Amvisa más recientes se centraron en Gazalbide y El Pilar, con la colocación de detectores de fugas en las tuberías. Mientras en el primer distrito no se produjeron escapes de agua, en El Pilar se totalizaron 23, algunos de ellos importantes. «El 21 de abril se registró una en la calle Basoa. Tras corregirla, el consumo de agua por la noche pasó de 40 metros cúbicos a la hora a 32», relató.

De forma paralela, Pizarro aseguró estar tranquilo ante el estado que presentan los embalses pese a las últimas lluvias. Ayer, el pantano de Ullíbarri-Gamboa se encontraba al 83% de su capacidad. «Las previsiones meteorológicas no nos invitan a pensar que haya que abrir las compuertas. Por eso ahora se puede hablar de una situación de tranquilidad»