Prject to restore El Azud, La Alcornia and El Pantanet

Wed, 19/05/2004

Información

Tres monumentos emblemáticos del sistema de riegos de la Huerta de Alicante: la Casa de la Alcornia, el Azud de Mutxamel y la casa del Pantanet; serán rehabilitados por los ayuntamientos de Tibi, el primero, y por el de Mutxamel, los restantes si lo aprueba la junta general extraordinaria del Sindicato de Riegos de la Huerta de Alicante que se celebrará el próximo sábado en la sede de la Sociedad Musical la Alianza.
Según el presidente de la comunidad de regantes propietaria de los inmuebles y edificaciones, Vicente de Cabo, el proyecto de rehabilitación de la Casa de la Alcornia, una edificación de dos plantas de 400 metros cuadrados de superficie total, situada a la cola del Pantano de Tibi, lo llevará a cabo el Ayuntamiento de esta localidad, siempre que la asamblea apruebe la cesión del uso. Para llevar a cabo los trabajos, según De Cabo, el Consistorio de Tibi cuenta con una subvención. La idea que tiene el municipio es la de explotarla de cara al turismo interior, con la organización de actos culturales y convenios con la universidad y otras entidades culturales y científicas.
Asimismo, dice el presidente de los regantes que van a concluir las obras de rehabilitación de la casa del Pantanet, situada en la presa de Tibi, en la que ya se llevan invertidos 168.283 euros. Ahora, añade De Cabo, con una subvención de la Conselleria de Cultura de 132.223 euros, se van a terminar las obras de este inmueble, situado en el mismo pantano, bajo la dirección técnica del arquitecto Marius Beviá. El destino de esta edificación también va a ser cultural y educativo.
Con referencia al Azud de Mutxamel y a la Casa del Pantanet, situadas en el término municipal mutxamelero. El Ayuntamiento, según el representante de los comuneros, está esperando que la junta extraordinaria apruebe la entrega para firmar el convenio de cesión de uso de ambas edificaciones al municipio. La Corporación, según De Cabo, cuenta con un proyecto de uso cultural-educativo para ambas edificaciones. Al preguntarle sobre el costo de las obras y las posibles subvenciones, el presidente dijo desconocer estos extremos. Aunque si quiso dejar claro, que estas obras no solo no les va a costar un euro a los comuneros, si no que la comunidad de regantes seguirá siendo la propietaria de los inmuebles. «Unas obras necesarias para evitar el deterioro total de estas instalaciones, a las que la comunidad no podía hacer frente», concluye Vicente de Cabo.
El resto de puntos de la asamblea hacen referencia al informe de la presidencia, la presentación del resultado presupuestario correspondiente al ejercicio 2003, informe sobre la dimisión del secretario nombrado en la asamblea del pasado 13 de diciembre y nombramiento del mismo, aprobación, si procede, del pago de la parte proporcional correspondiente a las obras de la conducción del trasvase Júcar-Vinalopó y la lectura del informe sobre la sentencia sobre el contencioso con la comunidad general de Riegos de Levante