La inversión más importante de estas medidas de urgencia es, con diferencia, la destinada a la limpieza de la contaminación química existente en el embalse de Flix. El plan alternativo al trasvase ha previsto 90 millones de euros para la primera fase de este programa, lo que presupone la voluntad del Gobierno de continuar con la actuación más all. de esta primera medida de choque. Según diversos estudios de entidades ecologistas, el fondo de este embalse puede contener entre 8 y 14 toneladas de mercurio y otras sustancias contaminantes, procedentes de la actividad industrial y acumuladas durante años. Esta contaminación vivió un momento crítico en diciembre de 2001, cuando el río registró unos niveles de mercurio tres veces superiores a los permitidos, en un episodio que acabó con la vida de 4.000 peces y provocó el suministro de agua contaminada por parte del Consorci d'Aigües de Tarragona (CAT), que se vio obligado a adquirir un analizador de mercurio. Este proyecto, como el resto de actuaciones previstas por Medio Ambiente, aspira a conseguir la financiación de la Unión Europea a través de los fondos estructurales que el gobierno del PP había solicitado para el trasvase del Ebre