El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), José Luis Alonso, afirmó hoy que "la postura de la coalición que está en el Gobierno de Aragón --PSOE y PAR-- ha sido determinante para que el nuevo Gobierno central haya tomado la decisión" de derogar el trasvase del Ebro, incluido en el Plan Hidrológico Nacional (PHN).
Así lo manifestó en declaraciones a los medios de comunicación después de mantener una reunión con el consejero de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Alfredo Boné, en la sede del organismo de cuenca.
Según explicó Alonso, esta reunión se enmarca "dentro de la nueva política que tiene el Ministerio de Medio Ambiente, y por tanto la Confederación, de unas relaciones totalmente fluidas y cordiales con el resto de administraciones autonómicas y locales porque tenemos la obligación de gestionar bien un tema como es el agua".
El presidente de la CHE indicó que Aragón ha sido la primera Comunidad con la que se ha reunido "porque es casi el 50 por ciento de la cuenca y porque hay una serie de temas pendientes" en los que "vamos a ir colaborando".
Como ejes estratégicos de su gestión, José Luis Alonso se refirió a la "transparencia" y la "participación social" y valoró positivamente "las iniciativas que ha tomado el Gobierno de Aragón en estos dos sentidos, en concreto, la iniciativa de medición social y la creación del Consejo del Agua".
Asimismo, aseguró que "existe una sintonía de lo que queremos obtener y de la forma en que queremos llegar a ello entre los dos gobiernos, el central, representado en este caso por la CHE, y el autonómico, representado por Alfredo Boné, que nos permite que el diálogo sea fluido" y, además, comentó "tenemos una relación personal de antiguo".
Por su parte, el consejero de Medio Ambiente del Ejecutivo aragonés, Alfredo Boné, destacó que ésta es la primera vez que se visita la CHE y se reúne con su presidente "en los 18 meses que llevo de consejero".
A su vez, mostró su satisfacción porque "capto por parte de la Confederación, además de por numerosos colectivos, la enorme disponibilidad a encontrar soluciones que contribuyan a alcanzar acuerdos por parte de todos" en relación a las obras de regulación del Pacto del Agua que pueden tener alguna cuestión problemática.
En relación con la CHE y con el Ministerio de Medio Ambiente, Boné aseguró que "hay enorme coincidencia" en cuanto a las obras del Pacto del Agua. "Nosotros no queremos paralizar ninguna, queremos que estas obras, recogidas en el Plan Hidrológico de la Cuenca del Ebro en 1996 y después en el PHN, continúen adelante", apuntó.
En concreto, apostó porque que "aquellas obras que están paradas se inicien y las ralentizadas se actualicen y se pongan en funcionamiento, y aquellas que tienen algún tipo de problema lo resolvamos cuando antes para evitar cualquier tipo de retraso".
En este sentido, anunció que ha planteado al presidente de la CHE la posibilidad de conformar un órgano técnico "para que todos los detalles administrativos se hagan como la mayor agilidad posible y dentro de la normativas y directivas europeas que existen" porque "las obras del Pacto del Agua hay que hacerlas" para "tener en esta tierra los recursos que necesitamos, con el consenso de todos".
Boné afirmó que "tampoco son muchas las cuestiones que han generado problemas y tenemos unos foros donde debatir" e incidió en la necesidad de consenso tanto del llano como de la montaña, pero también de otros elementos implicados, porque "todos tenemos que hacer un esfuerzo para llegar a los acuerdos que deberán adoptarse en el foro que corresponde", que es la Comisión de Seguimiento del Pacto del Agua, "que será donde converjan las propuestas que esperamos que lleguen lo más consensuadas posibles".
OTROS ÓRGANOS DE COORDINACIÓN
El consejero también anunció la creación otros órganos de coordinación y de trabajo técnico entre la CHE y el Departamento de Medio Ambiente, así como su compromiso "de mantener una relación muy fluida de información y comunicación" y afirmó que "he percibido que la colaboración va a ser intensa y fructífera" porque "coincidimos en cuáles son los grandes problemas que tenemos por delante".
Boné aseguró que "lejos de pensar que con la derogación del trasvase del Ebro nos hemos quedado sin cometido, aquellos que nos dedicamos a las cuestiones del agua tenemos un gran reto por delante" con temas como la depuración de las aguas residuales, que son competencia municipal, "pero en las que el Gobierno de Aragón ha tomado una posición clarísima con los planes de saneamiento y depuración y también el propio ministerio con las depuradoras de las cabeceras de los ríos pirenaico".
Otros temas pendientes son los convenios de restitución y la interrelación entre las Comunidades autónomas y la CHE. Además, también mostró su interés por la calidad integral de los ríos, "donde la Confederación tiene casi todo que decir, nosotros algo y la gente del territorio también" y abogó por "ser capaces de abordar una política que sea pionera en Europa" en este ámbito