The Commission of Water approves the favorable report to the intermediate level of Yesa
Tue, 28/09/2004
El pleno de la Comisión del Agua de Aragón aprobó el lunes el dictamen, elaborado por la ponencia de Obras del Pacto del Agua, favorable al recrecimiento de Yesa a la cota intermedia de 510,5 metros, lo que llevaría la capacidad del embalse de los actuales 470 hectómetros cúbicos a 1.106. Este documento obtuvo el respaldo de 53 miembros del pleno, un 80,3% del mismo.
La cota intermedia logró los votos a favor de los representantes de la DGA, Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), PSOE, PP, PAR, IU, usuarios, regantes y municipios afectados por la obra, excepto Artieda y Mianos, que se desmarcaron de la Comisión al entender que era "una pantomima de debate" en el que la decisión estaba tomada de antemano.
Los doce votos en contra fueron de Chunta Aragonesista, los representantes de la Universidad de Zaragoza, de organizaciones ecologistas y de asociaciones de afectados por obras hidráulicas como Río Aragón. La Fundación Ecología y Desarrollo se abstuvo, como explicó su portavoz, Victor Viñuales, "por estar inmersos en la Iniciativa Social de Mediación", que busca alcanzar consensos sobre el Pacto del Agua al margen del marco institucional.
Cambio de posición
De la votación del lunes destaca especialmente el cambio de posición de quienes hasta ahora se habían pronunciado tajantemente por la cota máxima (521 metros sobre el nivel del mar): el Partido Popular y los regantes de Bardenas. Los representantes de ambos dieron su respaldo al dictamen, aunque siguen manteniendo que la mejor opción es el recrecimiento máximo.
El portavoz parlamentario del PP, Antonio Suárez, calificó hoy de "un primer paso" declaró al respecto que "no es nuestro proyecto, pero al menos permite desbloquear una situación que llevaba enquistada demasiado tiempo". "Ya no se podía esperar más y el perjuicio que estaba originando la paralización de la obra comenzaba a ser irreversible", añadió. Para Suárez, la DGA debe decir ahora "dónde quiere almacenar los hectómetros cúbicos que se pierden con la cota intermedia" para que se preserve la reserva hídrica para la Comunidad que se fijó en el Pacto del Agua.
El presidente de los regantes cincovilleses, Luis Ciudad, se manifestó de forma similar. "Si cediendo 200 hectómetros cúbicos se consigue consenso social para que las obras se reactiven está bien, aunque somos conscientes de que los que se oponen no van a cambiar y el tema judicial seguirá adelante", dijo Ciudad. "Ahora no hay excusas para que no se empiece a trabajar a buen ritmo en las obras", agregó.
Sin embargo, desde el otro frente del debate sobre Yesa, fundamentalmente sostenido por los ayuntamientos de Artieda y Mianos, CHA, la Fundación Nueva Cultura del Agua y los colectivos ecologistas, se sostiene que la Comisión ha sido manipulada desde el principio para que la cota intermedia fuera aprobada de antemano, que no se ha permitido debatir las alternativas a cualquier recrecimiento y que, por lo tanto, su resultado no refleja ningún consenso social.
El representante de CHA, Bizén Fuster, no restó legitimidad a la Comisión, pero denunció su "utilización bastarda". "Lejos de disminuirse las diferencias, quienes estábamos en contra lo seguimos estando y quienes estaban a favor de recrecer Yesa lo siguen estando, es decir, la Comisión es un fracaso, debe cambiar el tono, el funcionamiento y el método de trabajo", afirmó.
Fuster no descartó "abandonar la Comisión" si los próximos debates que acoja este órgano de participación, que debe debatir sobre los proyectos de Biscarrués y Santaliestra, "siguen por el mismo camino".
Comisión de Seguimiento
Tras esta aprobación, la DGA, a través del Instituto Aragonés del Agua, elevará el dictamen a la Comisión de Seguimiento del Pacto del Agua, integrada por las Cortes y el Gobierno de Aragón y por el Ministerio de Medio Ambiente. La titular de esta cartera ministerial, Cristina Narbona, ha mostrado explícitamente su disposición a asumir el acuerdo mayoritario que surgiese en la Comunidad Autónoma sobre la cota del recrecimiento de Yesa.
La cota intermedia logró los votos a favor de los representantes de la DGA, Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), PSOE, PP, PAR, IU, usuarios, regantes y municipios afectados por la obra, excepto Artieda y Mianos, que se desmarcaron de la Comisión al entender que era "una pantomima de debate" en el que la decisión estaba tomada de antemano.
Los doce votos en contra fueron de Chunta Aragonesista, los representantes de la Universidad de Zaragoza, de organizaciones ecologistas y de asociaciones de afectados por obras hidráulicas como Río Aragón. La Fundación Ecología y Desarrollo se abstuvo, como explicó su portavoz, Victor Viñuales, "por estar inmersos en la Iniciativa Social de Mediación", que busca alcanzar consensos sobre el Pacto del Agua al margen del marco institucional.
Cambio de posición
De la votación del lunes destaca especialmente el cambio de posición de quienes hasta ahora se habían pronunciado tajantemente por la cota máxima (521 metros sobre el nivel del mar): el Partido Popular y los regantes de Bardenas. Los representantes de ambos dieron su respaldo al dictamen, aunque siguen manteniendo que la mejor opción es el recrecimiento máximo.
El portavoz parlamentario del PP, Antonio Suárez, calificó hoy de "un primer paso" declaró al respecto que "no es nuestro proyecto, pero al menos permite desbloquear una situación que llevaba enquistada demasiado tiempo". "Ya no se podía esperar más y el perjuicio que estaba originando la paralización de la obra comenzaba a ser irreversible", añadió. Para Suárez, la DGA debe decir ahora "dónde quiere almacenar los hectómetros cúbicos que se pierden con la cota intermedia" para que se preserve la reserva hídrica para la Comunidad que se fijó en el Pacto del Agua.
El presidente de los regantes cincovilleses, Luis Ciudad, se manifestó de forma similar. "Si cediendo 200 hectómetros cúbicos se consigue consenso social para que las obras se reactiven está bien, aunque somos conscientes de que los que se oponen no van a cambiar y el tema judicial seguirá adelante", dijo Ciudad. "Ahora no hay excusas para que no se empiece a trabajar a buen ritmo en las obras", agregó.
Sin embargo, desde el otro frente del debate sobre Yesa, fundamentalmente sostenido por los ayuntamientos de Artieda y Mianos, CHA, la Fundación Nueva Cultura del Agua y los colectivos ecologistas, se sostiene que la Comisión ha sido manipulada desde el principio para que la cota intermedia fuera aprobada de antemano, que no se ha permitido debatir las alternativas a cualquier recrecimiento y que, por lo tanto, su resultado no refleja ningún consenso social.
El representante de CHA, Bizén Fuster, no restó legitimidad a la Comisión, pero denunció su "utilización bastarda". "Lejos de disminuirse las diferencias, quienes estábamos en contra lo seguimos estando y quienes estaban a favor de recrecer Yesa lo siguen estando, es decir, la Comisión es un fracaso, debe cambiar el tono, el funcionamiento y el método de trabajo", afirmó.
Fuster no descartó "abandonar la Comisión" si los próximos debates que acoja este órgano de participación, que debe debatir sobre los proyectos de Biscarrués y Santaliestra, "siguen por el mismo camino".
Comisión de Seguimiento
Tras esta aprobación, la DGA, a través del Instituto Aragonés del Agua, elevará el dictamen a la Comisión de Seguimiento del Pacto del Agua, integrada por las Cortes y el Gobierno de Aragón y por el Ministerio de Medio Ambiente. La titular de esta cartera ministerial, Cristina Narbona, ha mostrado explícitamente su disposición a asumir el acuerdo mayoritario que surgiese en la Comunidad Autónoma sobre la cota del recrecimiento de Yesa.