Acuamed, la empresa pública responsable de la ejecución de Programa AGUA desconoce todavía el lugar en el que se construirá la nueva presa del Marquesado, sobre el río Magro, destinada a evitar las avenidas de este río y a incrementar, en su caso, los recursos de este río, cuyos regadíos, en parte, han sido situados bajo la responsabilidad del trasvase Júcar-Turia debido a la crónica falta de caudales.
Pese a que Acuamed ha adjudicado ya el estudio informativo sobre «regulación del bajo Magro con la alternativa de la presa del Marquesado», lo cierto es que esta polémica obra, rechazada por la mayor parte de los municipios afectados, no tiene ni una ubicación ni un dimensionamiento definitivo, aunque parece claro que el objetivo del Gobierno no es construir la presa que formó parte del proyecto del trasvase del Ebro y que se diseñó con 60 metros de altura y 200 hectómetros cúbicos de capacidad.
Según un estudio realizado en esa fecha, la zona próxima a Turís donde pretendía construir la presa posee unas laderas inestables y «de manera general, no es apta para la construcción de una presa de las dimensiones pretendidas».De momento, Acuamed parece inclinarse con el proyecto de 1999, con una presa de 37 metros de altura, una capacidad de 48 hectómetros cúbicos y una cuenca receptora de 320 kilómetros cuadrados y un caudal punta de salida de 100 metros cúbicos por segundo que apenas incidiría en las avenidas del río Júcar.
Sin embargo, ni siquiera este proyecto esta claro, ya que el Ministerio de Medio Ambiente no descarta utilizar este embalse para incrementar los recursos disponibles y no solo como protección frente avenidas.
Estudian alternativas
«La cuenca intermedia entre el embalse de Forata y la confluencia del río Buñol es menor que la de este último- destaca un informe previo al que ha tenido acceso Levante-EMV, que avanza también dificultades para encontrar una cerrada- el estrecho en el que construir la presa- viable.
En consecuencia, la empresa adjudicataria del proyecto analiza en estos momentos la posibilidad de construir el embalse en otras áreas del río Magro no evaluadas hasta la fecha, en el río Buñol o incluso sustituirla por dos o más presas de menor tamaño.