SPANISH HYDROLOGICAL PLAN. Small divert CAT-Abrera is eliminated and new alternatives are incorporated

Thu, 07/04/2005

EFE

La Comisión de Medio Ambiente del Congreso decidió hoy eliminar el "minitrasvase" previsto entre el Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT) y la localidad barcelonesa de Abrera, e incluyó como alternativa un amplio conjunto de obras en Cataluña.
La citada Comisión incorporó hoy al proyecto de Ley que modifica el Plan Hidrológico Nacional varias enmiendas relativas a infraestructuras hidráulicas en la Comunidad de Cataluña, que fueron pactadas por el PSOE e IU-ICV.
Este último grupo mantiene que las obras que se han incluido en el PHN comprometen unos 700 millones de euros de inversiones en Cataluña, y ha destacado que la Generalitat será la responsable de gestionar las obras de las cuencas internas de esta Comunidad, y que éstas podrían contar con fondos europeos.
La enmienda incorporada esta mañana supone que la Generalitat de Cataluña y el Gobierno central firmarán, "en el plazo máximo de tres meses, un convenio en el que se garantiza el acceso a la financiación con cargo a fondos comunitarios, con el máximo coeficiente de aportación posible y por cuantía equivalente a la prevista para la realización de las obras sustituidas en las cuencas internas de Cataluña".
Además de las actuaciones alternativas al "minitrasvase", que ascenderán a unos 162 millones de euros, el convenio incluirá otras infraestructuras que afectan a las cuencas internas de Cataluña, que conllevarían un compromiso de financiación de 542 millones de euros.
Algunas de ellas, según las enmiendas incorporadas hoy, permitirán incrementar de la disponibilidad de recursos hídricos, y entre éstas destacan la construcción de una planta desalinizadora del área metropolitana de Barcelona y la ampliación de la desalinizadora del Tordera.
Entre las actuaciones para mejorar la gestión de los recursos hídricos destacan la ampliación y mejora del tratamiento en la potabilizadora de Abrera, balsas de recarga en el acuífero del Bajo Llobregat, la descontaminación del acuífero del Besós, la prolongación de la conducción Abrera-Fonsanta hasta el Prat de Llobregat o el refuerzo del abastecimiento de la Costa Brava Centro.
Además, se introducirán en el convenio actuaciones orientadas a mejorar la calidad del agua, prevenir inundaciones y restauración ambiental, y entre ellos la restauración hidrológico-ambiental de los residuos salinos del Llobregat, o la recuperación hidromorfológica en Cardener, Llobregat y Ter.
Contra las modificaciones incluidas hoy en el PHN se manifestó CiU, cuyo portavoz en materia medioambiental, Josep María Guinart, defendió el interés de la conexión hídrica CAT-Abrera.
Guinart, en declaraciones a EFE, consideró que las actuaciones previstas en el PHN tenían mayor garantía de contar con financiación europea, por estar plasmadas en una ley y tener la consideración de "obras de interés general", que las actuaciones que han negociado el PSOE e IU-ICV y que se plasmarán en un convenio entre las administraciones central y autonómica.
Guinart defendió hoy en la Comisión varias propuestas para evitar que prosperaran algunas enmiendas que suprimían del proyecto inicial del PHN obras "de interés general y prioritarias" que hacían referencia a las cuencas internas de Cataluña.
Según Guinart, la eliminación de estas actuaciones del proyecto del PHN supone que desaparezca más de un 80 por ciento de la inversión destinada a Cataluña que figuraba en la memoria económica.
La portavoz de Medio Ambiente del PSOE, Monserrat Colldeforns, mantuvo sin embargo que Cataluña no pierde "ni un euro" de las inversiones previstas en el PHN, y garantizó que todas las actuaciones estarán incluidas en el convenio que suscribirán ambas partes.
Según Calldeforns, de esta manera no sólo "no se perderán los fondos comprometidos", sino que además la Comunidad de Cataluña recuperará la iniciativa en las obras que afectan a sus cuencas internas.
La portavoz de Medio Ambiente del PP, Teresa de Lara, aseveró en la Comisión que el debate de hoy ha evidenciado que ERC condicionó su apoyo a la investidura de José Luis Rodríguez Zapatero a la derogación del trasvase del Ebro y el apoyo a un conjunto de actuaciones, y opinó que el grupo mayoritario ha sido "humillado".