Mayors of Alberche (Ávila) are worried about the water shortage in the El Burguillo dam
Thu, 07/07/2005
Los alcaldes populares de la comarca del Alberche (Avila) lamentaron hoy el escaso caudal del pantano de El Burguillo y pidieron a la Confederación Hidrográfica del Tajo el cese del actual caudal ecológico, la paralización de "todos los bombeos" al Canal de Isabel II y el mantenimiento del mismo nivel de agua cedido años anteriores para el regadío de Castilla La Mancha.
En este sentido, el alcalde de la localidad abulense de El Tiemblo, Rubén Rodríguez, calificó de "muy elevada" la cantidad de agua que llega al pantano de Picadas, en la Comunidad de Madrid, ya que se están bombeando desde el Alberche 400.000 metros cúbicos al día "para zonas de regadío de Castilla La Mancha que anteriormente eran de secano".
Por su parte, el alcalde de El Barraco, José María Manso, explicó que el pantano de El Burguillo, con el que se abastece al 100 por ciento su localidad, se encuentra al 12 por ciento de su capacidad, con una cantidad remansada de 25,6 hectómetros cúbicos.
Manso afirmó que según las previsiones realizadas por la Confederación Hidrográfica del Tajo, el agua remansada en este pantano descenderá a 17,8 hectómetros cúbicos en el mes de agosto y registrará 12,3 en septiembre, lo que equivale a los niveles de sequía que se registraron en el año 1995.
"Hemos pasado de ser solidarios a víctimas de la mala gestión que se está haciendo con el pantano del Burguillo", afirmó Manso, quien añadió que dicho enclave "se está desangrando", "huele a peces" y está "arruinando" a los industriales y a los ganaderos de la zona.
Además insistió en que el embalse está "lleno del algas" que han proliferado como consecuencia de las elevadas temperaturas, por lo que teme que éste pudiera dejar de ser apto para el consumo, al tiempo que planteó la posible contaminación de otros pantanos si continúa el desembalse de agua.
VELAR POR INTERESES DE AVILA.
Por su parte, el presidente del Partido Popular en Avila, Antolín Sanz, quien acusó al secretario provincial del PSOE de "demagogia" al pedir mediante un escrito a la Comunidad de Madrid un "uso racional del agua", afirmó que no se trata de ser "insolidarios" sino de velar por los intereses de los abulenses.
En este sentido, Sanz criticó al presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, José María Macías, de "no escuchar ni a las administraciones no a los alcaldes", y afirmó que los ediles no han recibido respuesta ante las peticiones realizadas el 30 de junio en relación a los problemas de escasez de agua que sufre la provincia.
Por otro lado, el alcalde de la localidad de El Tiemblo, Armando García, aseguró que el pantano de El Burguillo está sufriendo un trato "discriminatorio" respecto a otros embalses y mostró su desacuerdo con la continuidad del caudal ecológico, en su opinión muy apropiado en épocas en las que hay suficiente agua.
En referencia al suministro a los pueblos de la comarca del Tiétar, la alcaldesa de Cebreros, Pilar García, afirmó que esa cesión de agua "no supone nada", puesto que sólo asciende a dos hectómetros cúbicos diarios.
Al respecto, García recordó al dirigente socialista de Ávila que en estas situaciones los políticos no están "para tirarse de los pelos" sino "para trabajar por los intereses de toda la provincia" con la garantía de abastecimiento a los vecinos antes de dar agua a las comunidades limítrofes.
En este sentido, el alcalde de la localidad abulense de El Tiemblo, Rubén Rodríguez, calificó de "muy elevada" la cantidad de agua que llega al pantano de Picadas, en la Comunidad de Madrid, ya que se están bombeando desde el Alberche 400.000 metros cúbicos al día "para zonas de regadío de Castilla La Mancha que anteriormente eran de secano".
Por su parte, el alcalde de El Barraco, José María Manso, explicó que el pantano de El Burguillo, con el que se abastece al 100 por ciento su localidad, se encuentra al 12 por ciento de su capacidad, con una cantidad remansada de 25,6 hectómetros cúbicos.
Manso afirmó que según las previsiones realizadas por la Confederación Hidrográfica del Tajo, el agua remansada en este pantano descenderá a 17,8 hectómetros cúbicos en el mes de agosto y registrará 12,3 en septiembre, lo que equivale a los niveles de sequía que se registraron en el año 1995.
"Hemos pasado de ser solidarios a víctimas de la mala gestión que se está haciendo con el pantano del Burguillo", afirmó Manso, quien añadió que dicho enclave "se está desangrando", "huele a peces" y está "arruinando" a los industriales y a los ganaderos de la zona.
Además insistió en que el embalse está "lleno del algas" que han proliferado como consecuencia de las elevadas temperaturas, por lo que teme que éste pudiera dejar de ser apto para el consumo, al tiempo que planteó la posible contaminación de otros pantanos si continúa el desembalse de agua.
VELAR POR INTERESES DE AVILA.
Por su parte, el presidente del Partido Popular en Avila, Antolín Sanz, quien acusó al secretario provincial del PSOE de "demagogia" al pedir mediante un escrito a la Comunidad de Madrid un "uso racional del agua", afirmó que no se trata de ser "insolidarios" sino de velar por los intereses de los abulenses.
En este sentido, Sanz criticó al presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, José María Macías, de "no escuchar ni a las administraciones no a los alcaldes", y afirmó que los ediles no han recibido respuesta ante las peticiones realizadas el 30 de junio en relación a los problemas de escasez de agua que sufre la provincia.
Por otro lado, el alcalde de la localidad de El Tiemblo, Armando García, aseguró que el pantano de El Burguillo está sufriendo un trato "discriminatorio" respecto a otros embalses y mostró su desacuerdo con la continuidad del caudal ecológico, en su opinión muy apropiado en épocas en las que hay suficiente agua.
En referencia al suministro a los pueblos de la comarca del Tiétar, la alcaldesa de Cebreros, Pilar García, afirmó que esa cesión de agua "no supone nada", puesto que sólo asciende a dos hectómetros cúbicos diarios.
Al respecto, García recordó al dirigente socialista de Ávila que en estas situaciones los políticos no están "para tirarse de los pelos" sino "para trabajar por los intereses de toda la provincia" con la garantía de abastecimiento a los vecinos antes de dar agua a las comunidades limítrofes.