The swamps of La Rioja are at 44% of their total capacity
Sat, 27/08/2005
La lluvia caída en La Rioja de enero a julio es la mitad de la registrada en un año 'normal'
Un invierno inusualmente seco seguido de una primavera y un verano tan escaso en lluvias como ya es habitual ha dado como resultado este año una situación que el propio Instituto de Meteorología define como «sin precedentes». Los pantanos de La Rioja son lógico reflejo de esta coyuntura de extrema sequía y a día de hoy Pajares, Mansilla y González Lacasa acumulan tan sólo el 44,3% de su capacidad conjunta.
J. A. GONZÁLEZ./LOGROÑO
El pantano de Pajares es el que más está acusando la ausencia de precipitaciones, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro. De sus 35 hectómetros cúbicos de capacidad sólo acumula 11, es decir, apenas el 31%, cuando a finales de agosto del año pasado este porcentaje se situaba en el 53%.
El de Mansilla tiene ahora disponibles 34 de sus potenciales 68 hectómetros cúbicos (el 50%), mientras que el González Lacasa alberga 17 hectómetros cúbicos cuando su capacidad es de 33 (el 42%). El año pasado por estas fechas estaban al 65 y 64% de su capacidad respectivamente.
Las cifras no pueden ser de otra manera teniendo en cuenta que el 'año hidrológico' -que va de septiembre a septiembre- está siendo el más seco desde 1947, fecha en la que se comenzó a recopilar información sistemática y fiable sobre precipitaciones. Meteorología ha reconocido que la situación actual no tiene precedentes y viene condicionada por un otoño-invierno sorprendentemente seco. Tanto es así que el pasado enero sólo llovió en España el 16% de lo que llueve en un enero 'normal' (calculado sobre la media de las últimas tres décadas).
En La Rioja -que no es una de las regiones peor paradas- ha llovido este año prácticamente la mitad de lo que debería, pues el Observatorio Meteorológico de Agoncillo ha contabilizado 128 litros por metro cuadrados desde enero hasta julio frente a los 240 que corresponderían si este hubiera sido un año normal
Un invierno inusualmente seco seguido de una primavera y un verano tan escaso en lluvias como ya es habitual ha dado como resultado este año una situación que el propio Instituto de Meteorología define como «sin precedentes». Los pantanos de La Rioja son lógico reflejo de esta coyuntura de extrema sequía y a día de hoy Pajares, Mansilla y González Lacasa acumulan tan sólo el 44,3% de su capacidad conjunta.
J. A. GONZÁLEZ./LOGROÑO
El pantano de Pajares es el que más está acusando la ausencia de precipitaciones, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro. De sus 35 hectómetros cúbicos de capacidad sólo acumula 11, es decir, apenas el 31%, cuando a finales de agosto del año pasado este porcentaje se situaba en el 53%.
El de Mansilla tiene ahora disponibles 34 de sus potenciales 68 hectómetros cúbicos (el 50%), mientras que el González Lacasa alberga 17 hectómetros cúbicos cuando su capacidad es de 33 (el 42%). El año pasado por estas fechas estaban al 65 y 64% de su capacidad respectivamente.
Las cifras no pueden ser de otra manera teniendo en cuenta que el 'año hidrológico' -que va de septiembre a septiembre- está siendo el más seco desde 1947, fecha en la que se comenzó a recopilar información sistemática y fiable sobre precipitaciones. Meteorología ha reconocido que la situación actual no tiene precedentes y viene condicionada por un otoño-invierno sorprendentemente seco. Tanto es así que el pasado enero sólo llovió en España el 16% de lo que llueve en un enero 'normal' (calculado sobre la media de las últimas tres décadas).
En La Rioja -que no es una de las regiones peor paradas- ha llovido este año prácticamente la mitad de lo que debería, pues el Observatorio Meteorológico de Agoncillo ha contabilizado 128 litros por metro cuadrados desde enero hasta julio frente a los 240 que corresponderían si este hubiera sido un año normal