ANDALUCIA .- Córdoba .- Andalucia Government says that it took correct measures against the contamination of the Iznájar swamp
La consejera de Salud, María Jesús Montero, aseguró hoy que hubo una actuación "correcta" en todo momento para afrontar el problema de la contaminación, el pasado mes de julio, en el pantano de Iznájar, en la provincia de Córdoba, lo que obligó a decretar la prohibición del consumo del agua procedente de la red de abastecimiento.
Montero respondió a una pregunta sobre este asunto del diputado de IU Javier Mariscal, quien denunció que la Junta tiene una "cuota de responsabilidad" ante un hecho de esta gravedad, que, según dijo, supuso que 250.000 ciudadanos se quedaran sin agua para concinar, al tiempo que señaló que hay sospechas de que, desde diciembre de 2004, había niveles superiores a los permitidos de terbutelazina.
La consejera indicó que la contaminación en el citado pantano se detectó gracias al "magnífico" programa de vigilancia sanitaria de aguas de consumo de la Junta de Andalucía y no porque hubiera surgido algún caso de ciudadano enfermo.
Señaló que tras los resultados analíticos realizados, se confirmó la contaminación y, de manera inmediata, se comunicó a los alcaldes de los municipios afectados y a los ciudadanos la decisión de declarar "no apta" el agua para el consumo. Recalcó que se siguieron "escrupulosamente" las actuaciones establecidas en la normativa al respecto.
Asimismo, Montero recomendó a IU que sus alcaldes no intenten hacer de "su dejación de competencias un problema de salud pública", intentado "arrojar" el problema sobre la Junta por "incompetencia" para afrontarlo.
Montero respondió a una pregunta sobre este asunto del diputado de IU Javier Mariscal, quien denunció que la Junta tiene una "cuota de responsabilidad" ante un hecho de esta gravedad, que, según dijo, supuso que 250.000 ciudadanos se quedaran sin agua para concinar, al tiempo que señaló que hay sospechas de que, desde diciembre de 2004, había niveles superiores a los permitidos de terbutelazina.
La consejera indicó que la contaminación en el citado pantano se detectó gracias al "magnífico" programa de vigilancia sanitaria de aguas de consumo de la Junta de Andalucía y no porque hubiera surgido algún caso de ciudadano enfermo.
Señaló que tras los resultados analíticos realizados, se confirmó la contaminación y, de manera inmediata, se comunicó a los alcaldes de los municipios afectados y a los ciudadanos la decisión de declarar "no apta" el agua para el consumo. Recalcó que se siguieron "escrupulosamente" las actuaciones establecidas en la normativa al respecto.
Asimismo, Montero recomendó a IU que sus alcaldes no intenten hacer de "su dejación de competencias un problema de salud pública", intentado "arrojar" el problema sobre la Junta por "incompetencia" para afrontarlo.