Castilla La Mancha Government demands an exhaustive control of the use of the divert´s water

Thu, 30/03/2006

EFE

El vicepresidente segundo de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, dijo hoy que el Gobierno regional exigirá el control exhaustivo del uso real que se dé al agua del trasvase Tajo-Segura, incluida la destinada a abastecimiento.
En la rueda de prensa para informar de los acuerdos del Consejo de Gobierno, García-Page dijo que el Ejecutivo regional confía en la coherencia y prudencia del Ministerio de Medio Ambiente a la hora de aprobar un nuevo trasvase, una confianza que, afirmó, se sustenta en que el propio departamento ministerial ya ha expresado que no cabe un trasvase para regadíos dada la situación actual de la cabecera del Tajo.
Indicó que en la reunión que hoy mantiene la Comisión de Explotación del Acueducto Tajo-Segura, previa a la decisión que tomará el próximo viernes el Consejo de Ministros sobre una nueva derivación, el Gobierno de Castilla-La Mancha seguirá manteniendo su solidaridad en los trasvases que sean necesarios "para beber".
No obstante, advertirá de que "los meses del año que quedan por delante son los más difíciles" y que "hay que tener en la cabeza el conjunto del volumen trasvasable en todo el año hidrológico", además de recordar que en los últimos quince días en cinco ocasiones el caudal del Tajo ha estado por debajo del establecido legalmente, que es de 6 metros cúbicos por segundo a su paso por Aranjuez (Madrid).
García-Page admitió que la situación de los embalses ha mejorado algo en las últimas semanas, pero más en la cuenca del Segura que en la cabecera del Tajo, y señaló que los ríos son "ecosistemas de vida" y que "no se puede seguir incumpliendo el caudal mínimo del río Tajo".
Respecto al informe que va a presentar hoy Murcia a la Comisión de Explotación del Acueducto Tajo-Segura, según el cual hay un excedente de 88 hectómetros cúbicos en la cabecera del Tajo, consideró que "en Murcia están en una escala insaciable" y añadió que "no se puede estar así toda la vida".
"Esto ha llegado adonde tenía que llegar", dijo García-Page, que señaló que el precio a pagar por el modelo de desarrollo que tiene Murcia no puede ser que "toda la cuenca del Tajo se quede como un arroyo para que puedan regar unos árboles y además haciéndolo tirado de precio".
El vicepresidente segundo indicó que "es más fácil mover un huerto, es más fácil plantar al lado del Tajo, que trasladar el Tajo" y afirmó que "la política de mover los ríos de sitio está llegando a su fin".