Spanish government rejects increasing the territorial water quote despite regional pressures

Thu, 20/04/2006

Expansión

A las reclamaciones hídricas de algunas comunidades del arco mediterráneo, se suma ahora la realizada por el Ejecutivo madrileño. El Ministerio de Medio Ambiente cuestiona la eficiencia de sus sistemas de distribución.
L. Ramírez. Madrid
La escasez de agua en determinadas comunidades autónomas españolas sigue generando polémica. De hecho, regiones como Murcia y Valencia han solicitado al Gobierno un aumento de la asignación hidrológica, sin resultados satisfactorios.
Ahora le toca el turno a la Comunidad de Madrid.
Así se puso de manifiesto ayer en la inauguración de las jornadas La gestión del agua en la Comunidad de Madrid, organizadas por el departamento de Conferencias y Formación del Grupo Recoletos y que concluyen hoy en la capital española.
El encargado de abrir el acto fue el director de Expansión, Jesús Martínez de Rioja, quien manifestó la importancia de este preciado bien en una época de sequía, lo que está generando problemas territoriales en España desde hace años. Basta recordar la disputa entre socialistas y populares por el Plan Hidrológico Nacional, derogado por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.
Martínez de Rioja cedió la palabra al vicepresidente primero del Gobierno regional que dirige Esperanza Aguirre, Ignacio González, quien reclamó al Gobierno central 200 hectómetros cúbicos de agua adicionales para la Comunidad de Madrid, que se sumarían a los 200 hectómetros acordados el pasado martes entre Aguirre y la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, de acuerdo con lo establecido en el Plan de la Cuenca del Tajo de 1998.
González afirmó que el hecho de que se hayan asignado 200 hectómetros cúbicos a la región con carácter permanente (112 de forma inmediata y el resto en los próximos años) supone un 'avance', pero añadió que 'eso no quita para que sigamos demandando los 400 hectómetros que necesitamos con carácter estructural'.
El vicepresidente de la Comunidad de Madrid insistió en que 'la solución de futuro tiene que ser el Tajo', lo que permitiría liberar los recursos del río 'para que bebamos, sin problemas, de él las comunidades del interior y una parte de Extremadura'.

Pero la ministra de Medio Ambiente no está de acuerdo con esta visión del problema y, tras escuchar la intervención de González, afirmó que Madrid 'puede disponer de 200 hectómetros más de agua sin hacer ninguna nueva infraestructura de regulación del Tajo, simplemente a través de la reasignación de agua disponible para distintos usos, la optimización de las infraestructuras ya construidas y la aplicación de las mejores tecnologías'.
Además, recordó que las inversiones en infraestructuras ligadas al uso de recursos hídricos 'las puede hacer cualquier administración', y el Gobierno de la nación 'sólo actúa cuando una inversión se declara de interés general, que en el caso de la Comunidad de Madrid son por ejemplo las depuradoras de La Gavia y Arroyo Culebro'.

La crítica de la ministra no modificó la visión del vicepresidente regional, quien señaló que, pese a que una mejora en la gestión del agua 'es importante', el otro factor clave es la inexistencia de infraestructuras que aseguren el almacenamiento de agua 'Si la Comunidad de Madrid tuviera más sitio donde guardar el agua no habrían tenido que adoptarse medidas de restricción de consumo, como ocurrió el pasado año', indicó.
En esta línea, recordó que en 2004 los embalses madrileños 'estaban llenos' y aseguró que el Gobierno regional se vió obligado a 'soltar' 300 hectómetros. Es decir, que el 50% de lo que consume Madrid en un año fue desperdiciado.
'Una buena gestión es suficiente si no conseguimos tener más sitios donde disponer de agua. Hay que estudiar las nuevas infraestructuras para permitir disponer de más agua en el futuro', concluyó González.
Una de las soluciones para abastecer las regiones del interior peninsular es liberar recursos del río Tajo
Sin restricciones al consumo
La ministra de Medio Ambiente confía en que este verano no haya cortes de suministro de agua en las ciudades, gracias a las restricciones a los agricultores y las inversiones del Gobierno. 'Hay restricciones al regadío, y esas restricciones unidas a las inversiones que está realizando el Gobierno de la Nación, confiamos en que permita, de nuevo que no haya cortes en el suministro de agua potable en las ciudades', dijo. De esta forma, los agricultores de las cuencas de los ríos Segura, Júcar y Guadalquivir 'van a poder utilizar menos de la mitad del agua a la que tienen en principio derecho', ya que la situación en los regadíos de estas cuencas sigue siendo 'difícil' por la escasez de precipitaciones. La ministra afirmó que la prioridad máxima es el abastecimiento a ciudades, no el riego de parques y jardines o el llenado de las piscinas. En 2005, 'el más seco de la Historia de España, se evitaron las restricciones, entre otras cosas, gracias a la puesta en marcha de nuevas plantas desaladoras', indicó Narbona.
La explotación de las presas
Al finalizar el encuentro, el Ministerio de Medio Ambiente y la Comunidad de Madrid suscribieron un convenio con la Comunidad de regantes del Canal de Estremera para instalar el riego por aspersión y goteo en casi 3.000 hectáreas de terrenos donde ahora se utiliza el método de inundación, lo que ahorrará un 80% el consumo de agua. La modernización de este sistema de riego, que durará dos años y costará 25 millones de euros (el 80% a cargo del Ministerio y el resto, del Gobierno regional), permitirá incorporar 15 hectómetros cúbicos de agua anuales al abastecimiento de la región. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, informó tras la firma del convenio de que el departamento ministerial que dirige Narbona había accedido a 'cambiar el sistema de explotación de algunas presas' que sólo daban agua a la región cuando se encontraban 'a rebosar' y que desde ahora proporcionarán reservas para años de vacas flacas.
La Comunidad de Madrid pide más infraestructuras que permitan almacenar el agua cuando sobra
Kioto se aleja cada vez más
Además, Narbona calificó los datos de aumento de emisiones de gases de efecto invernadero de 'muy insatisfactorios', y apuntó que 'en el caso de 2005 agravados sin ningún género de dudas por la situación climatológica que impidió el uso pleno de los recursos hidroeléctricos'. No obstante, la escasez de precipitaciones 'no quita para hacer el máximo esfuerzo antes de 2012, tomar nuevas medidas y desarrollar adecuadamente todas las puestas en marcha desde hace un año y medio', indicó. La ministra señaló que el Protocolo de Kioto 'es un desafío de extraordinaria envergadura, no sólo para el Gobierno, sino para todas las administraciones públicas y sectores productivos''. Este desafío se traduce, según Narbona, en 'mejorar la eficiencia en el uso de la energía, en un país tan dependiente de un combustible cuyo precio aumenta cada día'. Asimismo, el desafío es 'esforzarse por generalizar en nuestro país el uso de las energías renovables'.
La reserva de los embalses creció en la última semana y se acerca ya al 60%
La reserva de agua acumulada en los embalses peninsulares ha vuelto a crecer durante los últimos días, gracias a las abundantes lluvias registradas. De esta forma, el volumen disponible se sitúa en el 58,9% de su capacidad total. Según los últimos datos hechos públicos por el Ministerio de Medio Ambiente, los embalses almacenan un total de 31.358 hectómetros cúbicos de agua, 368 más que la pasada semana, lo que supone un incremento del 0,7% respecto a las cifras de hace siete días. Así, los embalses peninsulares se encuentran a solo un punto de la reserva de agua acumulada el pasado año en las mismas fechas, aunque están todavía muy alejados de la media de los últimos cinco años (70,3%) y de la media del último decenio (68,2%). Sin embargo, la situación apenas ha mejorado e incluso ha empeorado en las cuencas donde la prolongada sequía es más severa. En la cuenca del Segura los embalses no han incrementado sus reservas y mantienen los 192 hectómetros cúbicos que tenían la pasada semana, que representan el 17% de su capacidad. En la del Júcar los embalses han perdido tres hectómetros cúbicos de agua y están al 23,3% de su capacidad. La situación de estas cuencas contrasta con las ubicadas en el interior del País Vasco, que están al 90,5% de su capacidad. Las precipitaciones han sido abundantes en toda la península ibérica, y la máxima se registró en Navacerrada (Madrid), donde se contabilizó un volumen de 33,9 litros por metro cuadrado. Esas lluvias han sido más intensas en la vertiente atlántica, donde se ha recogido una media de 12,9 litros por metro cuadrado, frente a los 6,5 de la mediterránea. Las variaciones más importantes se han producido en los embalses de la cuenca del Duero, que han aumentado sus reservas en 221 hectómetros cúbicos, mientras que los del Guadalquivir han perdido 5 hectómetros cúbicos.
A pesar de estos datos, Medio Ambiente quiere que los hogares se conciencien del uso eficiente del agua, aunque este año hidrológico sea más esperanzador que el pasado. Por ello, el departamento ministerial que dirige Narbona pide a los ciudadanos que 'mantengan la prudencia' el consumo doméstico y agrícola.