Fenacore purpose users integration to improve aquifer management
Thu, 18/05/2006
El presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore), Andrés del Campo, abogó hoy en Palma por la integración de los usuarios en la gestión eficiente de los acuíferos, con el fin de garantizar la explotación sostenible de las aguas subterráneas en España.
Durante la celebración de la segunda jornada de la XI edición del Congreso Nacional de Regantes celebrado en Mallorca, que será clausurado mañana por la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, Del Campo resaltó la necesidad de que en España se siga el camino seguido en Baleares, ya que, según destacó, el archipiélago es "pionero en el empleo de las aguas subterráneas desde hace cuarenta años".
En este encuentro, cerca de un millar de regantes procedentes de todas las cuencas hidrográficas de España analizan en profundidad temas de actualidad que despiertan su inquietud, como son el Régimen Económico y Financiero del agua en la legislación española y comunitaria, la reutilización de aguas residuales depuradas en el regadío y la explotación sostenible de los acuíferos con la participación de los usuarios.
Con respecto a este último tema, el presidente de los regantes afirmó que en todas las cuencas hidrográficas de España se pueden encontrar ejemplos de descontrol de los acuíferos. Para solventarlo, apuntó como necesaria la creación de Juntas Centrales de Usuarios que ordenen la explotación de una manera sostenible, tal y como está sucediendo en Mallorca, con la proliferación de nuevas comunidades de regantes de aguas subterráneas en los últimos años.
En este sentido, Del Campo considera que las Confederaciones Hidrográficas carecen de medios económicos, materiales y humanos para controlar eficazmente la explotación de este tipo de aguas, por lo que deben ser los propios usuarios, organizados en comunidades de regantes, los que gestionen el acuífero mediante el autocontrol en las dotaciones por hectárea, etc.
Por otro lado, el responsable de Fenacore aseguró que la discusión sobre el uso de aguas superficiales o subterráneas es "estéril" y la separación de ambos recursos "equívoca", ya que la unidad del ciclo hidrológico es una realidad física y cualquier alteración en la fase superficial del recurso influye sobre la fase subterránea, y viceversa.
Por tanto, defendió como única solución el aprovechamiento "conjunto" y "complementario" de recursos superficiales y subterráneos en función de distintos factores, como son la naturaleza de la demanda, su localización, las afecciones a otros usos, los costes de amortización y explotación, las garantías de suministro, los impactos ambientales, las reservas existentes en el sistema de almacenamiento superficial y acuíferos, y la calidad disponible en cada uno, entre otros.
"La utilización conjunta de aguas superficiales y subterráneas aprovecha la complementariedad hidrológica de los embalses construidos y los acuíferos, ya que al explotar las aguas subterráneas, cuando los caudales o los almacenamientos superficiales son menores, se consigue un aumento de la garantía del suministro", explicó Del Campo.
Asimismo, afirmó que la capacidad de almacenamiento de un acuífero puede aprovecharse si se hace más uso de los embalses superficiales o de los caudales de los ríos en los períodos húmedos y, por el contrario, se bombea más de los acuíferos en períodos secos. "Este tipo de uso conjunto, denominado utilización alternativa, es el que presenta más posibilidades en España", según explicó.
Finalmente, Del Campo apuntó que en la federación tienen cabida las comunidades de regantes y juntas centrales de usuarios de España dedicadas a la administración del agua para riego, tanto superficial como subterránea.
Durante la celebración de la segunda jornada de la XI edición del Congreso Nacional de Regantes celebrado en Mallorca, que será clausurado mañana por la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, Del Campo resaltó la necesidad de que en España se siga el camino seguido en Baleares, ya que, según destacó, el archipiélago es "pionero en el empleo de las aguas subterráneas desde hace cuarenta años".
En este encuentro, cerca de un millar de regantes procedentes de todas las cuencas hidrográficas de España analizan en profundidad temas de actualidad que despiertan su inquietud, como son el Régimen Económico y Financiero del agua en la legislación española y comunitaria, la reutilización de aguas residuales depuradas en el regadío y la explotación sostenible de los acuíferos con la participación de los usuarios.
Con respecto a este último tema, el presidente de los regantes afirmó que en todas las cuencas hidrográficas de España se pueden encontrar ejemplos de descontrol de los acuíferos. Para solventarlo, apuntó como necesaria la creación de Juntas Centrales de Usuarios que ordenen la explotación de una manera sostenible, tal y como está sucediendo en Mallorca, con la proliferación de nuevas comunidades de regantes de aguas subterráneas en los últimos años.
En este sentido, Del Campo considera que las Confederaciones Hidrográficas carecen de medios económicos, materiales y humanos para controlar eficazmente la explotación de este tipo de aguas, por lo que deben ser los propios usuarios, organizados en comunidades de regantes, los que gestionen el acuífero mediante el autocontrol en las dotaciones por hectárea, etc.
Por otro lado, el responsable de Fenacore aseguró que la discusión sobre el uso de aguas superficiales o subterráneas es "estéril" y la separación de ambos recursos "equívoca", ya que la unidad del ciclo hidrológico es una realidad física y cualquier alteración en la fase superficial del recurso influye sobre la fase subterránea, y viceversa.
Por tanto, defendió como única solución el aprovechamiento "conjunto" y "complementario" de recursos superficiales y subterráneos en función de distintos factores, como son la naturaleza de la demanda, su localización, las afecciones a otros usos, los costes de amortización y explotación, las garantías de suministro, los impactos ambientales, las reservas existentes en el sistema de almacenamiento superficial y acuíferos, y la calidad disponible en cada uno, entre otros.
"La utilización conjunta de aguas superficiales y subterráneas aprovecha la complementariedad hidrológica de los embalses construidos y los acuíferos, ya que al explotar las aguas subterráneas, cuando los caudales o los almacenamientos superficiales son menores, se consigue un aumento de la garantía del suministro", explicó Del Campo.
Asimismo, afirmó que la capacidad de almacenamiento de un acuífero puede aprovecharse si se hace más uso de los embalses superficiales o de los caudales de los ríos en los períodos húmedos y, por el contrario, se bombea más de los acuíferos en períodos secos. "Este tipo de uso conjunto, denominado utilización alternativa, es el que presenta más posibilidades en España", según explicó.
Finalmente, Del Campo apuntó que en la federación tienen cabida las comunidades de regantes y juntas centrales de usuarios de España dedicadas a la administración del agua para riego, tanto superficial como subterránea.