Arsenic high leves stop water supply in 25 towns
Sat, 15/07/2006
Salamanca, Ávila, Zamora y Valladolid son las únicas provincias de la región en las que algunos municipios tienen que ser abastecidos con depósitos y camiones cisterna Tan solo una localidad necesita suministro de agua por la sequía este año EL NORTE F. GÓMEZ/VALLADOLID
SALAMANCA Varias personas recogen agua de un camión cisterna durante la época de sequía de año 2000 en Valladolid. / GABRIEL VILLAMIL
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Comienza el verano y con él, los problemas de abastecimiento de agua en muchos municipios de Castilla y León. Si el año pasado alrededor de 150 localidades de toda la región tuvieron que ser abastecidas por camiones cisterna, por el momento este año, tan solo en las provincias de Ávila, Salamanca y Zamora existen problemas con el suministro, aunque en la mayoría de los casos se debe a una alta concentración de arsénico en el agua -lo que desaconseja su consumo- y no por problemas relacionados con la sequía, excepto en el municipio salmantino de Cabeza de Béjar.
ZAMORA
Problemas en dos municipios
Tan solo dos municipios zamoranos -Burganes de Valverde y Gallegos del Pan- se abastecen en estos momentos con camiones cisterna debido a la concentración de atrazina (herbicidas) en el agua potable en la primera localidad, y a una avería en la bomba de agua en la segunda. El diputado de Medio Ambiente de Zamora, Federico Polo, aseguró que la situación es «muy alentadora», ya que hace un año por estas fechas eran al menos una veintena los municipios los que carecían de agua para su consumo. En Gallegos del Pan, además, está previsto que la avería esté reparada entre hoy y mañana.
La situación en la provincia es bastante mejor que hace unos días, ya que la semana pasada los pozos de agua de los municipios de Olmo de la Guareña y Cañizo presentaban concentraciones de arsénico elevadas, lo que impedía que el agua fuese apta para el consumo. En Brime de Urz se decidió además cortar el agua de la distribución general mientras se realizaban las obras de ampliación de captación de agua.
A estos pueblos se añadían también los municipios de Malva y Santa Cruz de Cuérragos, donde el agua del grifo salía con 'tierrilla'. En ambos, un camión cisterna les abasteció hasta que finalizó el problema. Las aguas de Villabrázaro y Arcos de la Polvorosa sufrieron, también durante unos días, un problema de contaminación por atrazinas que suele ser frecuente en los municipios de esta zona de regadío de los Valles de Benavente, según informa Raquel Herrranz.
ÁVILA
«No hay problemas de carestía de agua para el verano en Ávila», según aseguró el presidente de la Diputación abulense, Agustín González, al plantearse cómo será la época estival en la provincia. La institución «está más que preparada» para afrontar cualquier problema que pudiera surgir, cuya solución se sumaría a las acciones que ya se han llevado a cabo para iniciar con holgura y tranquilidad este verano. Y es que, en principio, «no se prevé demasiada alarma» en este sentido.
Sin embargo, en la provincia hay actualmente varias localidades en las que el agua presenta niveles altos de nitrato y arsénico, que afecta principalmente a la comarca de la Moraña, al norte de la provincia. El agotamiento de las reservas con el vaciado del embalse del Burguillo podría además provocar que fuese necesario que los camiones cisterna abasteciesen a varias localidades situadas en el Valle del Alberche y del Tiétar como El Barraco, San Juan de la Nava, Cebreros y Navaluenga. Este problema se resolverá en un futuro con la construcción de una estación de tratamiento de agua potable a cargo de la Consejería de Medio Ambiente a finales de este año con una inversión de nueve millones de euros. Con este proyecto «se garantiza la cantidad y la calidad del agua». El otro gran problema -aunque cada vez se presenta en menor medida en la provincia- atiende a los niveles de aparición de nitratos y arsénico en el agua. Este hecho afecta principalmente al norte de la provincia de Ávila. En este sentido, el presidente de la Diputación de Ávila, Agustín González, explicó que ya están preparados los bidones de cinco litros que reparte la institución provincial a los pueblos que superan el 0,10% del volumen de nitratos y arsénico en el agua. Actualmente son seis municipios los que presentan un nivel elevado de nitrato -Cabezas de Alambre, Jaraíces, El Bohodón, San Vicente de Arévalo, Villanueva de Gómez y Zorita de los Molinos- y catorce de arsénico -Hoyorredondo, Mancera de Arriba, Monsalupe, Muñosancho, Niharra, Papatrigo, Pedro Rodríguez, Peñalba de Ávila, San Bartolomé de Corneja, San Juan de la Encinilla, Solana del Ríoalmar, Bercial de Zapardiel, Cabizuela y Velayos-, todos ellos ubicados en la zona de la Moraña de Ávila, según informa Sonia Andrino.
LEÓN
Sequía «controlada»
En la provincia leonesa la sequía «está controlada» por lo que no se prevé sufrir problemas debido a la falta de agua. De momento, únicamente dos municipios están siendo abastecidos con agua por diferentes causas ajenas a la sequía, Quintanillas de los Oteros y Arenillas de Valderahuey, esta última localidad por la desaparición de su pozo artesano, pero el problema de ambas estará solucionado en unos meses, según la institución provincial
Los embalses leoneses, por otra parte, se encuentran prácticamente al 60% de su capacidad, con 770 hectómetros cúbicos sobre los 1.300 de capacidad total, informa Miguel Ángel Pérez.
VALLADOLID
Cuatro urbanizaciones
La provincia de Valladolid no sufre por ahora problemas de desabastecimiento de agua como sucedió en algunas zonas durante el verano pasado. Tan solo cuatro urbanizaciones de distintos puntos de la provincia, según aseguró el diputado del área de Acción Territorial, Alejandro García Sanz, presentan niveles de arsénico en el agua superiores lo permitido (diez microgramos por litro), lo que obliga a las localidades cercanas a abastecer a estas zonas residenciales.
Así sucede en la urbanización Los Arcos y Las Fuentes, ambas pertenecientes a la población de Mojados, donde aunque hay agua corriente, no es apta para el consumo, por lo que los vecinos de estas zonas residenciales tienen que ser abastecidos desde la localidad cercana. Lo mismo sucede en algunas urbanizaciones de Hornillos de Ledesma, de Megeces y de Muriel de Zapardiel. En total, los problemas con el suministro de agua afectan en la provincia vallisoletana a cerca de mil habitantes. Alejandro García Sanz, aseguró, de todas formas, que aunque por ahora no hay problemas con el suministro de agua, algunas poblaciones tendrán que recurrir a los camiones cisterna un año más durante las celebración de sus fiestas patronales debido al aumento de la población.
PALENCIA
En alerta, pero sin problemas
Ninguna localidad palentina presenta por el momento problemas de abastecimiento de agua, aunque las perspectivas de la sequía obligan a mantener activo el dispositivo de alerta. La Diputación palentina tiene toda la infraestructura preparada para abastecer de agua mediante camiones cisternas a los pueblos que lo necesiten, ya que las localidades más propensas a carecer de suministro por la sequía son las que se abastecen de los manantiales. El pasado año, la institución provincial tuvo que transportar agua a trece pequeñas localidades con una población de 1.6000 habitantes, a los que se suministró millón y medio de litros de agua.
SEGOVIA
Situación favorable
En la provincia de Segovia, y según fuentes de la Confederación Hidrográfica del Duero, la situación es favorable, ya que el nivel de reservas de agua en los embalses del Pontón Alto (La Granja y Palazuelos de Eresma) y de Linares del Arroyo (Maderuelo) y del pantano de Revenga, se encuentran en una situación muy aceptable en comparación con su estado durante la sequía de hace dos años y en comparación también com otros embalses de la Cuenca del Duero.
El Pontón Alto, pantano de cuyas aguas bebe la ciudad de Segovia y parte de su alfoz, posee en la actualidad un volumen de agua embalsado de 7,1 hectómetros cúbicos, cuando la capacidad es de 7,4 hectómetros cúbicos. El año pasado por estas mismas fechas el volumen de reservas era de 7 hectómetros cúbicos. En estos momentos, el Pontón Alto recibe una media de 0,4 metros cuadrados de agua por segundo y suelta 0,8 metros cuadrados, lo mismo que el embalse de Linares del Arroyo. La recuperación de este pantano, situado en el término municipal de Maderuelo, ha sido evidente, ya que hace dos veranos estaba prácticamente vacío. Ambas presas garantizan el abastecimiento a sus respectivas zonas.
SORIA
65.000 litros de agua este año
La Diputación de Soria ha repartido desde principios de año un total de 650.000 litros de agua entre los municipios sorianos que lo han requerido como Torlengua, Torrubia o La Seca. Una cantidad que, comparándola con el pasado verano y teniendo en cuenta que ya ha transcurrido la primera quincena estival, es inferior a lo esperado, algo que la Administración Provincial atribuye a las inversiones dedicadas a reformas hidráulicas que se han desarrollado en los últimos años.
En el punto de mira de la polémica sigue sin embargo la localidad soriana de Molinos de Duero, donde su alcalde no concede la licencia para la construcción de una estación depuradora, por lo que el pueblo debe seguir recibiendo agua provincial. De hecho, gran parte de los 13 millones de litros que fueron repartidos el año pasado, fueron distribuidos en esta localidad, según informa desde Soria Laura Álvaro.
BURGOS
Aumento de la población
En la provincia de Burgos, los problemas de abastecimiento de agua en verano suelen ser consecuencia del aumento de población en algunas localidades, sobre todo en las zonas del norte. Pueblos de la Bureba y Merindades y algunos pequeños municipios en la parte de la provincia limítrofe con la comunidad de Cantabria pueden sufrir dificultades de abastecimiento al doblar, incluso triplicar, su número de vecinos con la llegada de un gran número de veraneantes. En estos primeros días de verano, según fuentes de la Diputación de Burgos, ya se han registrado los primeros problemas de abastecimiento en zonas como Dobro y Soncillo, cercanas a Cantabria, debido a este aumento de población. Las restricciones de agua, de todas maneras, no son habituales en la capital burgalesa, informa desde Burgos Rosalía Santaolalla.La reciente inauguración del sistema de abastecimiento Cabeza de Horno ha reducido considerablemente los problemas de captación que muchos municipios salmantinos sufren con la llegada del verano. Si bien el año pasado por esta fechas casi once mil salmantinos y un total de 43 localidades (el 13% del total del territorio de la provincia) necesitaban que los camiones cisterna les abasteciesen de agua potable debido a la sequía, en este momento únicamente el municipio de La Cabeza de Béjar requiere camiones cisterna para su abastecimiento diario por un problema de captación derivado de la sequía. Se trata de un pequeño municipio de 103 habitantes situado en las proximidades de Guijuelo y que durante el verano ve ampliada considerablemente su población, lo que agrava los problemas de sequía. Unas dificultades que este año, a pesar de registrar un final de primavera y un verano con total carencia de lluvia, están teniendo una menor repercusión en el abastecimiento de la provincia de Salamanca gracias a la finalización del sistema Cabeza de Horno. Tras una inversión de 40 millones de euros la nueva red ha solucionado los problemas que tradicionalmente afectaban a la zona comprendida entre el Huebra y el Uces, que durante el verano eleva su población hasta los 20.000 habitantes.
En cualquier caso, el principal problema de la provincia de Salamanca con la llegada del verano sigue siendo la falta de potabilidad de algunos sondeos y captaciones. Con el descenso del nivel de agua de las reservas, se incrementa la presencia de arsénico lo que impide que el agua sea destinada para el consumo humano.
Entre los municipios más importantes que han necesitado la presencia de camiones cisterna por problemas de potabilidad se encuentra Alaraz, un municipio que cuenta con cerca de 650 habitantes y que lleva ya varias semanas arrastrando este problema.
También la localidad de Trabanca, con un población que ronda los 250 habitantes, situado en el Parque Natural Arribes del Duero, ha requerido alguna semana ser abastecido por cisternas debido a los problemas de falta de potabilidad de sus captaciones.
Bañobárez, Buenamadre, Canillas de Abajo, Cipérez, Encina de San Silvestre, Olmedo, Rollán, Sando, Villar de Samaniego, Villaseco de los Gamitos y Yecla de Yeltes, completan la lista de los municipios que han requerido en algún momento del verano camiones cisterna por este mismo problema.
A pesar de todo, las cifras de este año son notablemente inferior a las del 2005, año especialmente crítico en cuanto a la sequía por la falta de agua y los problemas de potabilidad que se derivaron.
SALAMANCA Varias personas recogen agua de un camión cisterna durante la época de sequía de año 2000 en Valladolid. / GABRIEL VILLAMIL
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Comienza el verano y con él, los problemas de abastecimiento de agua en muchos municipios de Castilla y León. Si el año pasado alrededor de 150 localidades de toda la región tuvieron que ser abastecidas por camiones cisterna, por el momento este año, tan solo en las provincias de Ávila, Salamanca y Zamora existen problemas con el suministro, aunque en la mayoría de los casos se debe a una alta concentración de arsénico en el agua -lo que desaconseja su consumo- y no por problemas relacionados con la sequía, excepto en el municipio salmantino de Cabeza de Béjar.
ZAMORA
Problemas en dos municipios
Tan solo dos municipios zamoranos -Burganes de Valverde y Gallegos del Pan- se abastecen en estos momentos con camiones cisterna debido a la concentración de atrazina (herbicidas) en el agua potable en la primera localidad, y a una avería en la bomba de agua en la segunda. El diputado de Medio Ambiente de Zamora, Federico Polo, aseguró que la situación es «muy alentadora», ya que hace un año por estas fechas eran al menos una veintena los municipios los que carecían de agua para su consumo. En Gallegos del Pan, además, está previsto que la avería esté reparada entre hoy y mañana.
La situación en la provincia es bastante mejor que hace unos días, ya que la semana pasada los pozos de agua de los municipios de Olmo de la Guareña y Cañizo presentaban concentraciones de arsénico elevadas, lo que impedía que el agua fuese apta para el consumo. En Brime de Urz se decidió además cortar el agua de la distribución general mientras se realizaban las obras de ampliación de captación de agua.
A estos pueblos se añadían también los municipios de Malva y Santa Cruz de Cuérragos, donde el agua del grifo salía con 'tierrilla'. En ambos, un camión cisterna les abasteció hasta que finalizó el problema. Las aguas de Villabrázaro y Arcos de la Polvorosa sufrieron, también durante unos días, un problema de contaminación por atrazinas que suele ser frecuente en los municipios de esta zona de regadío de los Valles de Benavente, según informa Raquel Herrranz.
ÁVILA
«No hay problemas de carestía de agua para el verano en Ávila», según aseguró el presidente de la Diputación abulense, Agustín González, al plantearse cómo será la época estival en la provincia. La institución «está más que preparada» para afrontar cualquier problema que pudiera surgir, cuya solución se sumaría a las acciones que ya se han llevado a cabo para iniciar con holgura y tranquilidad este verano. Y es que, en principio, «no se prevé demasiada alarma» en este sentido.
Sin embargo, en la provincia hay actualmente varias localidades en las que el agua presenta niveles altos de nitrato y arsénico, que afecta principalmente a la comarca de la Moraña, al norte de la provincia. El agotamiento de las reservas con el vaciado del embalse del Burguillo podría además provocar que fuese necesario que los camiones cisterna abasteciesen a varias localidades situadas en el Valle del Alberche y del Tiétar como El Barraco, San Juan de la Nava, Cebreros y Navaluenga. Este problema se resolverá en un futuro con la construcción de una estación de tratamiento de agua potable a cargo de la Consejería de Medio Ambiente a finales de este año con una inversión de nueve millones de euros. Con este proyecto «se garantiza la cantidad y la calidad del agua». El otro gran problema -aunque cada vez se presenta en menor medida en la provincia- atiende a los niveles de aparición de nitratos y arsénico en el agua. Este hecho afecta principalmente al norte de la provincia de Ávila. En este sentido, el presidente de la Diputación de Ávila, Agustín González, explicó que ya están preparados los bidones de cinco litros que reparte la institución provincial a los pueblos que superan el 0,10% del volumen de nitratos y arsénico en el agua. Actualmente son seis municipios los que presentan un nivel elevado de nitrato -Cabezas de Alambre, Jaraíces, El Bohodón, San Vicente de Arévalo, Villanueva de Gómez y Zorita de los Molinos- y catorce de arsénico -Hoyorredondo, Mancera de Arriba, Monsalupe, Muñosancho, Niharra, Papatrigo, Pedro Rodríguez, Peñalba de Ávila, San Bartolomé de Corneja, San Juan de la Encinilla, Solana del Ríoalmar, Bercial de Zapardiel, Cabizuela y Velayos-, todos ellos ubicados en la zona de la Moraña de Ávila, según informa Sonia Andrino.
LEÓN
Sequía «controlada»
En la provincia leonesa la sequía «está controlada» por lo que no se prevé sufrir problemas debido a la falta de agua. De momento, únicamente dos municipios están siendo abastecidos con agua por diferentes causas ajenas a la sequía, Quintanillas de los Oteros y Arenillas de Valderahuey, esta última localidad por la desaparición de su pozo artesano, pero el problema de ambas estará solucionado en unos meses, según la institución provincial
Los embalses leoneses, por otra parte, se encuentran prácticamente al 60% de su capacidad, con 770 hectómetros cúbicos sobre los 1.300 de capacidad total, informa Miguel Ángel Pérez.
VALLADOLID
Cuatro urbanizaciones
La provincia de Valladolid no sufre por ahora problemas de desabastecimiento de agua como sucedió en algunas zonas durante el verano pasado. Tan solo cuatro urbanizaciones de distintos puntos de la provincia, según aseguró el diputado del área de Acción Territorial, Alejandro García Sanz, presentan niveles de arsénico en el agua superiores lo permitido (diez microgramos por litro), lo que obliga a las localidades cercanas a abastecer a estas zonas residenciales.
Así sucede en la urbanización Los Arcos y Las Fuentes, ambas pertenecientes a la población de Mojados, donde aunque hay agua corriente, no es apta para el consumo, por lo que los vecinos de estas zonas residenciales tienen que ser abastecidos desde la localidad cercana. Lo mismo sucede en algunas urbanizaciones de Hornillos de Ledesma, de Megeces y de Muriel de Zapardiel. En total, los problemas con el suministro de agua afectan en la provincia vallisoletana a cerca de mil habitantes. Alejandro García Sanz, aseguró, de todas formas, que aunque por ahora no hay problemas con el suministro de agua, algunas poblaciones tendrán que recurrir a los camiones cisterna un año más durante las celebración de sus fiestas patronales debido al aumento de la población.
PALENCIA
En alerta, pero sin problemas
Ninguna localidad palentina presenta por el momento problemas de abastecimiento de agua, aunque las perspectivas de la sequía obligan a mantener activo el dispositivo de alerta. La Diputación palentina tiene toda la infraestructura preparada para abastecer de agua mediante camiones cisternas a los pueblos que lo necesiten, ya que las localidades más propensas a carecer de suministro por la sequía son las que se abastecen de los manantiales. El pasado año, la institución provincial tuvo que transportar agua a trece pequeñas localidades con una población de 1.6000 habitantes, a los que se suministró millón y medio de litros de agua.
SEGOVIA
Situación favorable
En la provincia de Segovia, y según fuentes de la Confederación Hidrográfica del Duero, la situación es favorable, ya que el nivel de reservas de agua en los embalses del Pontón Alto (La Granja y Palazuelos de Eresma) y de Linares del Arroyo (Maderuelo) y del pantano de Revenga, se encuentran en una situación muy aceptable en comparación con su estado durante la sequía de hace dos años y en comparación también com otros embalses de la Cuenca del Duero.
El Pontón Alto, pantano de cuyas aguas bebe la ciudad de Segovia y parte de su alfoz, posee en la actualidad un volumen de agua embalsado de 7,1 hectómetros cúbicos, cuando la capacidad es de 7,4 hectómetros cúbicos. El año pasado por estas mismas fechas el volumen de reservas era de 7 hectómetros cúbicos. En estos momentos, el Pontón Alto recibe una media de 0,4 metros cuadrados de agua por segundo y suelta 0,8 metros cuadrados, lo mismo que el embalse de Linares del Arroyo. La recuperación de este pantano, situado en el término municipal de Maderuelo, ha sido evidente, ya que hace dos veranos estaba prácticamente vacío. Ambas presas garantizan el abastecimiento a sus respectivas zonas.
SORIA
65.000 litros de agua este año
La Diputación de Soria ha repartido desde principios de año un total de 650.000 litros de agua entre los municipios sorianos que lo han requerido como Torlengua, Torrubia o La Seca. Una cantidad que, comparándola con el pasado verano y teniendo en cuenta que ya ha transcurrido la primera quincena estival, es inferior a lo esperado, algo que la Administración Provincial atribuye a las inversiones dedicadas a reformas hidráulicas que se han desarrollado en los últimos años.
En el punto de mira de la polémica sigue sin embargo la localidad soriana de Molinos de Duero, donde su alcalde no concede la licencia para la construcción de una estación depuradora, por lo que el pueblo debe seguir recibiendo agua provincial. De hecho, gran parte de los 13 millones de litros que fueron repartidos el año pasado, fueron distribuidos en esta localidad, según informa desde Soria Laura Álvaro.
BURGOS
Aumento de la población
En la provincia de Burgos, los problemas de abastecimiento de agua en verano suelen ser consecuencia del aumento de población en algunas localidades, sobre todo en las zonas del norte. Pueblos de la Bureba y Merindades y algunos pequeños municipios en la parte de la provincia limítrofe con la comunidad de Cantabria pueden sufrir dificultades de abastecimiento al doblar, incluso triplicar, su número de vecinos con la llegada de un gran número de veraneantes. En estos primeros días de verano, según fuentes de la Diputación de Burgos, ya se han registrado los primeros problemas de abastecimiento en zonas como Dobro y Soncillo, cercanas a Cantabria, debido a este aumento de población. Las restricciones de agua, de todas maneras, no son habituales en la capital burgalesa, informa desde Burgos Rosalía Santaolalla.La reciente inauguración del sistema de abastecimiento Cabeza de Horno ha reducido considerablemente los problemas de captación que muchos municipios salmantinos sufren con la llegada del verano. Si bien el año pasado por esta fechas casi once mil salmantinos y un total de 43 localidades (el 13% del total del territorio de la provincia) necesitaban que los camiones cisterna les abasteciesen de agua potable debido a la sequía, en este momento únicamente el municipio de La Cabeza de Béjar requiere camiones cisterna para su abastecimiento diario por un problema de captación derivado de la sequía. Se trata de un pequeño municipio de 103 habitantes situado en las proximidades de Guijuelo y que durante el verano ve ampliada considerablemente su población, lo que agrava los problemas de sequía. Unas dificultades que este año, a pesar de registrar un final de primavera y un verano con total carencia de lluvia, están teniendo una menor repercusión en el abastecimiento de la provincia de Salamanca gracias a la finalización del sistema Cabeza de Horno. Tras una inversión de 40 millones de euros la nueva red ha solucionado los problemas que tradicionalmente afectaban a la zona comprendida entre el Huebra y el Uces, que durante el verano eleva su población hasta los 20.000 habitantes.
En cualquier caso, el principal problema de la provincia de Salamanca con la llegada del verano sigue siendo la falta de potabilidad de algunos sondeos y captaciones. Con el descenso del nivel de agua de las reservas, se incrementa la presencia de arsénico lo que impide que el agua sea destinada para el consumo humano.
Entre los municipios más importantes que han necesitado la presencia de camiones cisterna por problemas de potabilidad se encuentra Alaraz, un municipio que cuenta con cerca de 650 habitantes y que lleva ya varias semanas arrastrando este problema.
También la localidad de Trabanca, con un población que ronda los 250 habitantes, situado en el Parque Natural Arribes del Duero, ha requerido alguna semana ser abastecido por cisternas debido a los problemas de falta de potabilidad de sus captaciones.
Bañobárez, Buenamadre, Canillas de Abajo, Cipérez, Encina de San Silvestre, Olmedo, Rollán, Sando, Villar de Samaniego, Villaseco de los Gamitos y Yecla de Yeltes, completan la lista de los municipios que han requerido en algún momento del verano camiones cisterna por este mismo problema.
A pesar de todo, las cifras de este año son notablemente inferior a las del 2005, año especialmente crítico en cuanto a la sequía por la falta de agua y los problemas de potabilidad que se derivaron.