Basque countrie has Water law
Sun, 23/07/2006
El País Vasco ha publicado esta semana su Ley de Aguas, que fue aprobada por el Parlamento el 23 de junio pasado. La viceconsejera de Ordenación del Territorio, Ana Oregui, informa que esta ley entrará en vigor a los seis meses desde su publicación, y que todavía faltan por desarrollar sus reglamentos, por lo que se calcula que estará vigente hacia el 2008. A través de esta norma, todos los usuarios del agua tendrán que medir su consumo y las facturas incorporarán todos los costes derivados de su gestión, incluido un tributo ecológico nuevo destinado a reparar los daños ambientales que causa la extracción y la contaminación. De acuerdo con Oregui, esta nueva normativa aporta una visión del agua como recurso natural que debe encontrar un punto de equilibrio entre su utilización y su preservación. La ley, se argumenta en un documento elaborado por el propio Gobierno vasco, favorecerá que se haga una mejor gestión de la política del agua al tratar de una manera integrada toda la cuenca; incentiva un consumo más racional de un recurso limitado y mejorará la restauración ambiental de los impactos causados en el medio ambiente por la extracción y contaminación. A través de la ley se crea la Agencia Vasca del Agua, un ente público de derecho privado dependiente del departamento de Medio Ambiente y que sustituirá a la Dirección de Aguas al asumir todas sus funciones. Sus competencias serán las obras hidráulicas (que no sean de interés general del Estado), grandes obras de abastecimiento y saneamiento, de restauración de cauces, de prevención de inundaciones, etcétera. También será la máxima responsable de la planificación hidrológica, de la gestión de autorizaciones y concesiones, de la inspección y control, y de las sanciones. Un canon de 0,6 euros El Gobierno vasco puso en marcha un nuevo tributo, de carácter medioambiental, «al que obliga la legislación comunitaria y que será aplicado en toda la UE», argumenta el citado documento. Se trata de un tributo de carácter autonómico, que ya viene siendo aplicado en varios países europeos. Se destinará a reparar los daños ambientales que la extracción, uso y contaminación del agua causa en el medio natural. Su cuantía se ha establecido en 0,06 euros por metro cúbico de consumo. Contraste Esta cantidad contrasta con la establecida en Cataluña, que es de 0,04 céntimos de euro por kilovatio producido o de 0,05 céntimos de euro por metro cúbico consumido. A la pregunta de si es más caro el canon vasco que el catalán, Oregui mantiene que no. «Son distintos -dice- porque la cuota catalana incluye el saneamiento. Aquí no. Nosotros lo que hacemos es gravar la extracción, el daño o la afección que le causamos al medio cuando extraemos el agua». Euskadi prevé recaudar unos 9 millones al año.