Mas de treinta activistas de Greenpeace y de la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE) paralizan desde las siete de esta mañana las obras de la planta desaladora de Valdelentisco, situada entre Mazarrón y Cartagena (Murcia), dijo a EFE Pedro García, presidente de ANSE.
Los ecologistas denuncian que la desaladora se construye dentro del Lugar de Interés Comunitario (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de "La Muela-Cabo Tiñoso", a pesar de la normativa fijada por la directiva Hábitat de la Unión Europea.
Además, han paralizado en el mar las obras de dragado del emisario submarino por causar daños a la pradera de posidonia existente en el zona, según Anse.
García explicó que la desaladora de Valdelentisco afecta a varios espacios que gozan del mayor grado de protección en tierra y en mar, por lo que el Ministerio de Medio Ambiente "no puede ser el patrocinador de las destrucción de la costa".