Environmental ministry offer water to be used in garden irrigation to town councils
Mon, 31/07/2006
El Ministerio de Medio Ambiente hace un llamamiento público a todos los ayuntamientos de la provincia (no sólo a los que iban a ser inicialmente beneficiarios del trasvase Júcar-Vinalopó) para que le pidan agua de este río para el baldeo de calles, el riego de jardines y otros usos ecológicos y «no consultivos», según explica el consejero delegado de Aguas del Júcar, José María Marugán. El Ministerio calcula que, una vez puesto en funcionamiento esta transferencia y abastecido el sector agrícola (de 40 a 45 hectómetros cúbicos al año), quedarán otros 40 hectómetros que pueden ser utilizados por los ayuntamientos como agua no potable.
El anuncio de Aguas del Júcar se produce tras la adhesión al protocolo de convenio que regirá el nuevo trasvase del Júcar (al que sigue oponiéndose la Junta Central de Usuarios) de los ayuntamientos de Elche, Villena, Aspe, Elda y Petrer.
Marugán, que está intensificando en las últimas semanas las reuniones con las comunidades de base de regantes de las comarcas alicantinas para explicarles la nueva filosofía del proyecto y lograr su adhesión (Aguas del Júcar ya da por rotas todas las posibilidades de negociación con la Junta Central de Usuarios), asegura que con la llegada del agua desde Cullera a finales del 2008 con destino a la agricultura y con la puesta en funcionamiento de la nueva macrodesalinizadora de Torrevieja (la obra se adjudica el próximo 12 de agosto y prevé hasta 80 hectómetros cúbicos de agua para usos urbanos al año) «están prácticamente resueltos los problemas de agua de la provincia de Alicante en un 70%». «Eso -subraya Marugán- sin tener en cuenta la ampliación de la desalinizadora de Agua Amarga, la nueva desalinizadora de Alicante, la de San Pedro del Pinatar, la de Dénia, Xàbia y El Campello», todas ellas proyectadas en el Plan Agua del Ministerio de Medio Ambiente.
Cauce del río en Elche
El «uso no consultivo urbano» del agua al que se refiere Marugán también destinado a la recuperación ecológica de espacios hídricos próximos al ciudadano. El Ministerio que dirige Cristina Narbona ya tiene decidido que va a dotar de un «curso fluvial estable» al cauce del río Vinalopó, a la altura de la ciudad de Elche, como ya informó este diario.
El llamamiento público a los Ayuntamientos alicantinos lo realizaba el consejero delegado de Aguas del Júcar el pasado viernes, después de que este diario revelara un informe firmado por cinco expertos en diversas materias de la Universidad de Alicante y que tiene fecha del 26 de julio que valida el uso para riego por goteo del agua del Azud de la Marquesa, en Cullera, punto geográfico desde donde se tomará el caudal con destino al Vinalopó y las comarcas de Alicante. El consejero de la empresa pública del Estado subraya que «con 1.100 microsiemens el agua es de calidad para el riego por goteo, porque en otras zonas del Vinalopó, como en Hondón de las Nieves, el agua se extrae ahora a 1.500 metros de profundidad y una conductividad de 7.000 micros».
Este estudio ha sido elaborado por encargo de la sociedad pública Aguas del Júcar, cuyo consejero delegado, José María Marugán,afirma que «los parámetros los vamos a mejorar todavía más con medidas que serán elevadas a la Confederación para reducir la conductividad natural del río Sellent».
Aparte de una serie de actuaciones para reducir la salinidad «natural» en esa parte del Júcar, donde llega el agua del Sellent, Aguas del Júcar ha encargado ya a la empresa adjudicataria del tramo A de la nueva conducción (la UTE Dragados-Cleop) la «mejora del proyecto constructivo para realizar una balsa de pretratamiento de agua, por el sistema de decantación de residuos sólidos en suspensión previamente de llegar a la zona de bombeo, en el Azud de la Marquesa». Aguas del Júcar SA asegura que esta mejora «no estaba en el proyecto informativo, pero sí estará en el proyecto constructivo que elabora la UTE tras la adjudicación».
La adjudicación de las obras del nuevo trasvase Júcar Vinalopó hablan de un coste total de 179,9 millones de euros, cifra que supone una rebaja del 16,95% respecto al importe de licitación recogido en el pliego del concurso público (216,63 millones). El Ministerio mantiene que el proyecto estará finalizado en diciembre del 2008.
El anuncio de Aguas del Júcar se produce tras la adhesión al protocolo de convenio que regirá el nuevo trasvase del Júcar (al que sigue oponiéndose la Junta Central de Usuarios) de los ayuntamientos de Elche, Villena, Aspe, Elda y Petrer.
Marugán, que está intensificando en las últimas semanas las reuniones con las comunidades de base de regantes de las comarcas alicantinas para explicarles la nueva filosofía del proyecto y lograr su adhesión (Aguas del Júcar ya da por rotas todas las posibilidades de negociación con la Junta Central de Usuarios), asegura que con la llegada del agua desde Cullera a finales del 2008 con destino a la agricultura y con la puesta en funcionamiento de la nueva macrodesalinizadora de Torrevieja (la obra se adjudica el próximo 12 de agosto y prevé hasta 80 hectómetros cúbicos de agua para usos urbanos al año) «están prácticamente resueltos los problemas de agua de la provincia de Alicante en un 70%». «Eso -subraya Marugán- sin tener en cuenta la ampliación de la desalinizadora de Agua Amarga, la nueva desalinizadora de Alicante, la de San Pedro del Pinatar, la de Dénia, Xàbia y El Campello», todas ellas proyectadas en el Plan Agua del Ministerio de Medio Ambiente.
Cauce del río en Elche
El «uso no consultivo urbano» del agua al que se refiere Marugán también destinado a la recuperación ecológica de espacios hídricos próximos al ciudadano. El Ministerio que dirige Cristina Narbona ya tiene decidido que va a dotar de un «curso fluvial estable» al cauce del río Vinalopó, a la altura de la ciudad de Elche, como ya informó este diario.
El llamamiento público a los Ayuntamientos alicantinos lo realizaba el consejero delegado de Aguas del Júcar el pasado viernes, después de que este diario revelara un informe firmado por cinco expertos en diversas materias de la Universidad de Alicante y que tiene fecha del 26 de julio que valida el uso para riego por goteo del agua del Azud de la Marquesa, en Cullera, punto geográfico desde donde se tomará el caudal con destino al Vinalopó y las comarcas de Alicante. El consejero de la empresa pública del Estado subraya que «con 1.100 microsiemens el agua es de calidad para el riego por goteo, porque en otras zonas del Vinalopó, como en Hondón de las Nieves, el agua se extrae ahora a 1.500 metros de profundidad y una conductividad de 7.000 micros».
Este estudio ha sido elaborado por encargo de la sociedad pública Aguas del Júcar, cuyo consejero delegado, José María Marugán,afirma que «los parámetros los vamos a mejorar todavía más con medidas que serán elevadas a la Confederación para reducir la conductividad natural del río Sellent».
Aparte de una serie de actuaciones para reducir la salinidad «natural» en esa parte del Júcar, donde llega el agua del Sellent, Aguas del Júcar ha encargado ya a la empresa adjudicataria del tramo A de la nueva conducción (la UTE Dragados-Cleop) la «mejora del proyecto constructivo para realizar una balsa de pretratamiento de agua, por el sistema de decantación de residuos sólidos en suspensión previamente de llegar a la zona de bombeo, en el Azud de la Marquesa». Aguas del Júcar SA asegura que esta mejora «no estaba en el proyecto informativo, pero sí estará en el proyecto constructivo que elabora la UTE tras la adjudicación».
La adjudicación de las obras del nuevo trasvase Júcar Vinalopó hablan de un coste total de 179,9 millones de euros, cifra que supone una rebaja del 16,95% respecto al importe de licitación recogido en el pliego del concurso público (216,63 millones). El Ministerio mantiene que el proyecto estará finalizado en diciembre del 2008.