El director del Instituto Aragonés del Agua (IAA), Alfredo Cajal, ya ha mantenido contactos con los regantes y la CHE de cara a la constitución de una comisión técnica de seguimiento de la regulación del Gállego. La idea es velar por el cumplimiento de los acuerdos sobre dicha regulación, revisar todo el expediente para que lo conozcan todas las partes y seguir todo el procedimiento administrativo previo a la adjudicación de la obra.

En principio, se crearán dos grupos de trabajos con dos objetivos diferenciados: uno seguirá el proceso relativo al embalse de Biscarrués de 35 hectómetros cúbicos, y el otro el referente a las cinco balsas laterales.

En un repaso al estado de las principales piezas de regulación hidráulica del Alto Aragón, Cajal señaló que no tiene noticia oficial sobre una aprobación inmediata del modificado del proyecto de la presa de Yesa y, aunque indicó que el Ministerio trabaja en él, estimó que se va “despacio”. Por contra, el embalse de San Salvador ya tiene el proyecto redactado y está a expensas de su aprobación. Aunque no hay notificación oficial, parece ser que la partida que en su día presupuestó ACESA para la construcción del desestimado embalse de Santaliestra se destinará al de San Salvador.