Portugal and Spain will fix the monthly minimum volume in Spain and Portugal rivers

Thu, 16/11/2006

EFE

La Comisión para la Aplicación y Desarrollo del Convenio de Albufeira ha creado un grupo de trabajo específico para fijar un caudal mínimo mensual que deberán tener los ríos que nacen en España y desembocan en Portugal cuando entren en territorio portugués.
Hasta ahora el Convenio de Albufeira, firmado entre España y Portugal en 1998, establecía un caudal mínimo anual que se podía aportar de una sola vez pero en un futuro se pretende fijar un volumen mínimo trimestral y mensual para que la aportación de agua se haga de forma escalonada, según aseguró hoy el director general del Agua del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Palop.
Palop realizó estas declaraciones en una rueda de prensa tras encabezar la delegación española que participó hoy en la sede zamorana de la Fundación Rei Afonso Henriques en una jornada de trabajo hipanolusa organizada por la Comisión para la Aplicación y Desarrollo del Convenio de Albufeira.
En la jornada, que versó sobre la gestión de situaciones de sequía en la Península Ibérica en el contexto transfronterizo, un grupo de trabajo estudió las fórmulas para establecer un volumen mínimo mensual con el fin de dar, según Palop, "racionalidad al empleo del agua y de los caudales que pasan".
"Para los ecosistemas y el medio ambiente no es lo mismo que los caudales pasen de golpe que lo hagan de forma pausada como sería lo natural", explicó el director general del Agua.
Por su parte, el presidente de la delegación portuguesa en la reunión, Gonzalo Santa Clara Gomes, declaró que con la fijación de los caudales mensuales se pretende asegurar "un flujo de aguas para Portugal más normal".
Santa Clara Gomes precisó que en el establecimiento de estos caudales deben tenerse en cuenta las necesidades reales de consumo tanto para el abastecimiento como para el riego agrícola, el uso del agua en industrias, producción energética y para la conservación de los ecosistemas.
El responsable portugués reconoció que aunque ésta es una cuestión compleja ambos países "estamos avanzando en definir criterios y comparar datos sobre lo que pasa".
Además de este asunto, en la jornada de trabajo transfronteriza se abordó la calidad de las aguas de los ríos hispanolusos, una cuestión que "nos preocupa mucho", según reconoció Palop.
A este respecto, el presidente de la delegación portuguesa en la reunión indicó que la calidad de las aguas de ríos transfronterizos es una preocupación para ambos países pero a la vez supone "un estímulo para hacer las cosas un poco mejor".
Para mejorar la calidad, España y Portugal deberán implementar antes del año 2009 la directiva marco europea sobre calidad de las aguas que obliga a hacer una planificación integrada de ambos países.
Sobre el precio del agua en España, el director general del Ministerio de Medio Ambiente recordó que el agua para el consumo humano es barata y no se traslada a los ciudadanos su coste real.
Preguntado por la posibilidad de establecer un canon, señaló que el Ministerio no está por penalizar el derroche excesivo de agua porque sí, y dará "una batalla sin cuartel cuando el abuso significa la desgracia de la comunidad" y cuando el derroche de unos afecte a otros que sí cumplen con la norma.