(EUROPA PRESS) -

La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) ha multiplicado por cuatro la producción de agua desalada en tres años, al pasar de 18 a 72 hectómetros cúbicos anuales, según anunció hoy, en una rueda de prensa para hacer balance desde su toma de posesión, el presidente del organismo de cuenca, José Salvador Fuentes Zorita.

En este sentido, señaló que esta apuesta por la desalación, junto a otras medidas como la cesión de derechos o las extracciones del Sinclinal de Calasparra, "han permitido soportar la situación de sequía sin un minuto de corte o restricción del suministro urbano, ni a ninguna actividad productiva dependiente de él".

"Esto contrasta con 2003, año en el que había restricciones de 8 a 12 horas que afectaron a varios cientos de miles de murcianos y no había sequía", rememoró Fuentes Zorita, quien reiteró que durante el presente año hidrológico tampoco habrá cortes de agua, pese a las escasas aportaciones del Taibilla.

Y es que, según Fuentes Zorita, "la Mancomunidad de los Canales del Taibilla recibe más agua desalada, aproximadamente el 60 por ciento, que aportaciones del río Taibilla". "Creo que esto permite dar una idea de la magnitud de lo que se ha hecho en desalación en la Región, y en un tiempo record", apostilló.

De hecho recordó que, de no ser por el trasvase Tajo-Segura y la desalación, los abastecimientos tendrían serias dificultades para ser atendidos, ya que "lo que se necesita para beber son 250 hm3, y las aportaciones son 170 hm3".

Respecto a la desalinizadora que el Ente Público del Agua (EPA), dependiente del Gobierno de Murcia, realiza en el Valle de Escombreras en Cartagena, Fuentes Zorita recordó que "ni tiene autorizada la toma de agua, ni la de vertido, pero tampoco concesión".

A su entender, el Gobierno regional se escuda en una "teoría peregrina" en virtud de la cual el Estatuto de Autonomía le permite autorizar esta obra, pero "una cosa es la competencia de un Gobierno para hacer obras de interés general para la Región, y otras tomar recursos del mar sin concesión, como establece la Ley de Aguas".

Para Fuentes Zorita, la planta en la actualidad "a los efectos del Ministerio es como si se hace una planta de componentes eléctricos; nos da lo mismo". "El problema vendrá cuando quieran tomar el agua y hacer el vertido, ocupando el domínio marítimo-terrestre", auguró.

No obstante, recordó que "yo ya avisé lealmente el consejero de Agricultura, Antonio Cerdá, advirtiéndole de la necesidad de los servicios", y puso en duda "que se vaya a cumplir todo lo que anuncian, porque están firmando convenios con municipios que está a cien kilómetros de la planta".

Y es que, para Fuentes Zorita, "el único objetivo de esta planta es que los órganos urbanísticos de los ayuntamientos puedan obviar los informes sobre garantías de suministro a los que obliga el artículo 25 de la Ley de Aguas, lo que es absolutamente irregular".

DEVOLVER EL AGUA A LOS REGANTES

"Lo que tiene que hacer el Gobierno regional, en lugar de plantas que paga la consejería de Agricultura para abastecer a las nuevas urbanizaciones, es devolver a los agricultores los 45 hm3 que les quitaron en el año 2003", aseveró Fuentes Zorita, quien recalcó que "no nos engañemos, pero el problema principal que tenía la cuenca era el enorme déficit de la Mancomunidad del Taibilla, y que el PP 'arregló' quitándole el agua a los agricultores".

No obstante, reiteró su compromiso de salvar esa deuda "aunque no la generara este gobierno, ya que las deudas hay que pagarlas", y auguró que con toda seguridad éste será uno de los planteamientos que el Comité de Crisis para la Sequía expondrá el próximo lunes a la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, en la reunión que mantendrán en La Moncloa.