Sources capture water from reservoirs wasted almost 200,000 liters per day
Mon, 26/11/2007
Las fuentes públicas que sirven caudal procedente de los embalses de Vigo desperdician miles de litros que se van a ninguna parte. El Concello los ha cuantificado: 180.000 al día. Ochenta surtidores, según datos del departamento de Vías y Obras, funcionan con sistema de circuito abierto, lo que en la práctica se traduce en que el agua se sirve durante todo el día ininterrumpidamente, aunque no se consuma. Ponerle freno a este derroche tiene una solución sencilla, y la concejalía ha empezado a ponerla en marcha. En los próximos meses se colocarán pulsadores en las 80 fuentes para que sólo estén activas cuando los usuarios aprieten el botón.
El primero se ha instalado en Valladares, y está previsto que en febrero se complete el proceso para racionalizar el uso del caudal procedente de las presas y evitar situaciones de riesgo en periodos de sequía prolongada. Cada surtidor sin regular que recibe abastecimiento de la traída municipal desperdicia 2.200 litros de agua al día. En Vigo existen 350 fuentes públicas, muchas con agua procedente de manantiales.
Baldeo
Pese a la falta de lluvias hasta la semana pasada, los dos embalses vigueses -Eiras, de 22 hectómetros de capacidad, y Zamáns, de 2,2- permanecieron por encima del 60% de sus reservas. Aunque no se llegó a una situación crítica, el Concello activó un plan de restricción de baldeo de calles que todavía continúa en vigor. Con la medida se ahorran más de 800.000 litros de agua al día, pasando de 1,1 millones de consumo para limpieza a 270.000. Sólo las principales zonas del centro de la ciudad reciben baldeo nocturno a diario, mientras que en las demás se alterna el servicio.
Aunque las presas alcancen el 100% de su capacidad, el Concello ha proyectado reducir el uso de agua para baldeo con un plan de racionalización permanente, al considerar excesivo el consumo que se realiza. El servicio, antes de las restricciones, incluía el baldeo manual durante todas las noches de 28 zonas de la ciudad. Con la limitación aplicada en las últimas semanas se ha pasado a cuatro zonas. También se ha reducido el número de vehículos que limpian con agua las calzadas y aceras en los turnos de mañana y noche.
Un tercio del abastecimiento se pierde por las fugas
Las fugas de agua, por deficiencias en la red y conexiones ilegales a la traída municipal, provocan la pérdida de 35 millones de litros al día, casi un tercio del suministro de los embalses. La estación potabilizadora de O Casal sirve 1.500 litros por segundo, pero el 30% se pierde por el camino sin que el Concello y la concesionaria del servicio conozcan donde se producen los escapes.
Para paliar la situación se ha redactado un proyecto en el que se divide la red en sectores a fin de controlar la presión. Los técnicos instalarán medidores para conocer los puntos en los que se reduce el caudal, y válvulas para acotar tramos de la red. De esta forma se pretende localizar los puntos de fuga. El nuevo sistema estará en marcha en el primer semestre de 2008.
Tuberías viejas
Las tuberías de abastecimiento en la ciudad tienen, en numerosas zonas, más de 30 años de antigüedad. Pese a que el Concello las renueva progresivamente, el diagnóstico del avance del Plan Especial del Ensanche -área que abarca todo el centro- advierte de que es necesario renovar las redes en 40 calles, ya que se producen roturas y fugas continuas. El año próximo se sustituirá el colector de Areal con una inversión de más de 200.000 euros.
El primero se ha instalado en Valladares, y está previsto que en febrero se complete el proceso para racionalizar el uso del caudal procedente de las presas y evitar situaciones de riesgo en periodos de sequía prolongada. Cada surtidor sin regular que recibe abastecimiento de la traída municipal desperdicia 2.200 litros de agua al día. En Vigo existen 350 fuentes públicas, muchas con agua procedente de manantiales.
Baldeo
Pese a la falta de lluvias hasta la semana pasada, los dos embalses vigueses -Eiras, de 22 hectómetros de capacidad, y Zamáns, de 2,2- permanecieron por encima del 60% de sus reservas. Aunque no se llegó a una situación crítica, el Concello activó un plan de restricción de baldeo de calles que todavía continúa en vigor. Con la medida se ahorran más de 800.000 litros de agua al día, pasando de 1,1 millones de consumo para limpieza a 270.000. Sólo las principales zonas del centro de la ciudad reciben baldeo nocturno a diario, mientras que en las demás se alterna el servicio.
Aunque las presas alcancen el 100% de su capacidad, el Concello ha proyectado reducir el uso de agua para baldeo con un plan de racionalización permanente, al considerar excesivo el consumo que se realiza. El servicio, antes de las restricciones, incluía el baldeo manual durante todas las noches de 28 zonas de la ciudad. Con la limitación aplicada en las últimas semanas se ha pasado a cuatro zonas. También se ha reducido el número de vehículos que limpian con agua las calzadas y aceras en los turnos de mañana y noche.
Un tercio del abastecimiento se pierde por las fugas
Las fugas de agua, por deficiencias en la red y conexiones ilegales a la traída municipal, provocan la pérdida de 35 millones de litros al día, casi un tercio del suministro de los embalses. La estación potabilizadora de O Casal sirve 1.500 litros por segundo, pero el 30% se pierde por el camino sin que el Concello y la concesionaria del servicio conozcan donde se producen los escapes.
Para paliar la situación se ha redactado un proyecto en el que se divide la red en sectores a fin de controlar la presión. Los técnicos instalarán medidores para conocer los puntos en los que se reduce el caudal, y válvulas para acotar tramos de la red. De esta forma se pretende localizar los puntos de fuga. El nuevo sistema estará en marcha en el primer semestre de 2008.
Tuberías viejas
Las tuberías de abastecimiento en la ciudad tienen, en numerosas zonas, más de 30 años de antigüedad. Pese a que el Concello las renueva progresivamente, el diagnóstico del avance del Plan Especial del Ensanche -área que abarca todo el centro- advierte de que es necesario renovar las redes en 40 calles, ya que se producen roturas y fugas continuas. El año próximo se sustituirá el colector de Areal con una inversión de más de 200.000 euros.