La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, anunció hoy que el Gobierno central ha aprobado una partida de diez millones de euros para la ejecución de obras en el muelle del puerto de Carboneras (Almería) que permitirán trasvasar el agua procedente de la desaladora del término municipal hasta los buques de suministro con destino a Catalunya.


En la rueda de prensa ofrecida con motivo de la XV Conferencia de las partes del Convenio para la Protección del Medio Marino y la Región Costera del Mar Mediterráneo (Convenio de Barcelona), que se celebra en Roquetas de Mar (Almería), Narbona detalló que la inversión habilitará conducciones para la canalización del agua pese a matizar que ésta es sólo una de las medidas que contempla el plan de choque diseñado por la Generalitat para enfrentar el tercer año de sequía consecutiva.


La titular de Medio Ambiente condicionó, no obstante, la efectiva puesta en marcha de la iniciativa, consensuada con la Consejería andaluza del ramo, a la evolución de las precipitaciones y declinó precisar el contenido del acuerdo entre administraciones y cuándo se hará realidad, aunque sí especificó que el coste que se traslada a los usuarios de agua desalada es de 0,5 euros por metro cúbico.


En esta línea, concretó que la medida caducará cuando entren en funcionamiento las dos desaladoras proyectadas en Catalunya, dentro del Plan Agua, y se complete la red de tuberías en la provincia de Almería, que permita un aprovechamiento al cien por ciento de la producción de la planta de Carboneras.


Al hilo de esto, justificó este modo de suministro y abastecimiento a Cataluña, extensible a otros núcleos de población de la costa mediterránea que pudieran necesitarlo, en el excedente actual de agua de la desaladora almeriense, de la que tan sólo se aprovecha un 20 por ciento de su capacidad.


Subrayó, asimismo, que la inversión "pública sin precedentes" que ha supuesto en Plan Agua aprobado por el Ejecutivo socialista ha puesto de manifiesto como las regiones "áridas pueden aportar agua a otros territorios" frente al uso de otros recursos hídricos como los embalses, que, según aseguró, "presentan un mayor nivel en Catalunya pese a que es el levante español la zona donde nunca se ha dejado de garantizar el abastecimiento urbano".


"Es un ejemplo --concluyó-- de cuán acertada ha sido la política de agua diseñada y adoptada por el PSOE, que se ha revelado más eficaz que la de trasvases entre cuencas por su dependencia del caudal y por su impacto medioambiental" que ejemplificó en el Delta del Ebro, "gravemente amenazado por el uso excesivo".