Murcia remembers in the day of Honor in Muestra, the water problems of the region
Tue, 15/07/2008
Murcia ha celebrado en la tarde de hoy su Día de Honor en la Exposición Internacional de Zaragoza, ocasión que el consejero de Agricultura y Agua del Ejecutivo murciano, Antonio Cerdá, ha aprovechado para recordar los problemas de agua que tiene esta región.
Tras presenciar el izado de banderas en la Plaza de Ceremonias de Expo, y acompañado por el comisario de la Muestra, Emilio Fernández Castaño, el secretario de Estado de Justicia, Julio Pérez, el delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, y el delegado del Gobierno en Murcia, Rafael González Tovar, entre otras autoridades, y después de firmar en el Libro de Honor del Palacio de Congresos, Antonio Cerdá inició su discurso recordando a un murciano ilustre, el conde de Floridablanca quien "hizo mucho por España y por Aragón" dado que impulsó la construcción del Canal Imperial de Aragón, "apoyado por Ramón Pignatelli".
Para Cerdá, "ambos representan una manera de trabajar conjuntamente que permitió traer agua a Zaragoza" y que convirtió al Canal Imperial "en un símbolo" que evitó que muchas personas pasaran penurias por la escasez de este recurso, en una obra que es "un ejemplo de la historia".
Así, en opinión del consejero de Agricultura y Agua de Murcia estos proyectos son un ejemplo de cómo se "creó una sociedad moderna" y de cómo aplicar soluciones al problema del agua "de manera inteligente".
"Se repite muchas veces, pero no hay que olvidar que en pleno siglo XXI millones de personas siguen sin tener acceso al agua potable", advirtió. En el caso de Murcia, "los recursos hídricos naturales de la región no alcanzan los 320 hectómetros cúbicos por habitante", lo que hace de ésta una región de "extrema escasez" que ha tenido que "agudizar el ingenio". De hecho, como ejemplo, en este momento el "85 por ciento de los regadíos en Murcia han sido modernizados".
Sin embargo, "a pesar de la buena gestión que hace Murcia" en materia de agua "necesitamos trasvases y aportaciones externas", porque ante el problema de escasez de este recurso "no tenemos suficiente con nuestros medios. Murcia necesita agua", aseveró.
Para conseguirla, Cerdá descartó los conflictos y animó a "prescindir de los tabús, recuperar el rigor en los análisis y la confianza en nuestros técnicos y transmitir a la sociedad" un mensaje de sosiego, de que "los dirigentes abordan los problemas de agua como cuestiones de Estado".
PROBLEMA DE GESTIÓN.
Por su parte, el secretario de Estado de Justicia, Julio Pérez, también recordó en su intervención la magnitud "mundial" del problema del agua ya que "mil millones de personas carecen de acceso al agua potable, 2.900 millones de personas no disponen de acceso a un saneamiento básico y 3.600 niños mueren cada día por falta de acceso al agua".
Estas cifras hacen más importante alcanzar uno de los objetivos del milenio "reducir a la mitad el número de personas sin acceso al agua potable", señaló.
Para Julio Pérez, el problema no es que haya escasez de agua sino que "existe un problema de gestión y de mala distribución" de este recurso, un problema que se agrava con la incidencia del cambio climático. Por ello, el secretario de Estado de Justicia consideró un "acierto" dedicar la Expo de Zaragoza a este "gran tema", porque la Muestra "es una gran plataforma de sensibilización sobre un problema que afecta día a día a la gente de la calle".
Además, "España, con esta Expo, tiene un instrumento al servicio del gran reto del siglo XXI: divulgar la necesidad de una nueva cultura del agua basada en tres pilares" fundamentales: el respeto al medio ambiente, "la cooperación internacional como única forma de afrontar el problema" y la dimensión técnica.
En el ámbito nacional, para Julio Pérez "las soluciones que no se basen en el diálogo no serán una buena solución sino una prolongación del problema". Por este motivo, el Gobierno de España "trabaja para garantizar agua para siempre y para todos".
Tras presenciar el izado de banderas en la Plaza de Ceremonias de Expo, y acompañado por el comisario de la Muestra, Emilio Fernández Castaño, el secretario de Estado de Justicia, Julio Pérez, el delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, y el delegado del Gobierno en Murcia, Rafael González Tovar, entre otras autoridades, y después de firmar en el Libro de Honor del Palacio de Congresos, Antonio Cerdá inició su discurso recordando a un murciano ilustre, el conde de Floridablanca quien "hizo mucho por España y por Aragón" dado que impulsó la construcción del Canal Imperial de Aragón, "apoyado por Ramón Pignatelli".
Para Cerdá, "ambos representan una manera de trabajar conjuntamente que permitió traer agua a Zaragoza" y que convirtió al Canal Imperial "en un símbolo" que evitó que muchas personas pasaran penurias por la escasez de este recurso, en una obra que es "un ejemplo de la historia".
Así, en opinión del consejero de Agricultura y Agua de Murcia estos proyectos son un ejemplo de cómo se "creó una sociedad moderna" y de cómo aplicar soluciones al problema del agua "de manera inteligente".
"Se repite muchas veces, pero no hay que olvidar que en pleno siglo XXI millones de personas siguen sin tener acceso al agua potable", advirtió. En el caso de Murcia, "los recursos hídricos naturales de la región no alcanzan los 320 hectómetros cúbicos por habitante", lo que hace de ésta una región de "extrema escasez" que ha tenido que "agudizar el ingenio". De hecho, como ejemplo, en este momento el "85 por ciento de los regadíos en Murcia han sido modernizados".
Sin embargo, "a pesar de la buena gestión que hace Murcia" en materia de agua "necesitamos trasvases y aportaciones externas", porque ante el problema de escasez de este recurso "no tenemos suficiente con nuestros medios. Murcia necesita agua", aseveró.
Para conseguirla, Cerdá descartó los conflictos y animó a "prescindir de los tabús, recuperar el rigor en los análisis y la confianza en nuestros técnicos y transmitir a la sociedad" un mensaje de sosiego, de que "los dirigentes abordan los problemas de agua como cuestiones de Estado".
PROBLEMA DE GESTIÓN.
Por su parte, el secretario de Estado de Justicia, Julio Pérez, también recordó en su intervención la magnitud "mundial" del problema del agua ya que "mil millones de personas carecen de acceso al agua potable, 2.900 millones de personas no disponen de acceso a un saneamiento básico y 3.600 niños mueren cada día por falta de acceso al agua".
Estas cifras hacen más importante alcanzar uno de los objetivos del milenio "reducir a la mitad el número de personas sin acceso al agua potable", señaló.
Para Julio Pérez, el problema no es que haya escasez de agua sino que "existe un problema de gestión y de mala distribución" de este recurso, un problema que se agrava con la incidencia del cambio climático. Por ello, el secretario de Estado de Justicia consideró un "acierto" dedicar la Expo de Zaragoza a este "gran tema", porque la Muestra "es una gran plataforma de sensibilización sobre un problema que afecta día a día a la gente de la calle".
Además, "España, con esta Expo, tiene un instrumento al servicio del gran reto del siglo XXI: divulgar la necesidad de una nueva cultura del agua basada en tres pilares" fundamentales: el respeto al medio ambiente, "la cooperación internacional como única forma de afrontar el problema" y la dimensión técnica.
En el ámbito nacional, para Julio Pérez "las soluciones que no se basen en el diálogo no serán una buena solución sino una prolongación del problema". Por este motivo, el Gobierno de España "trabaja para garantizar agua para siempre y para todos".