El Ministerio de Medio Ambiente ha licitado por 4,92 millones de euros los trabajos para el desarrollo del Sistema Nacional Cartográfico de Zonas Inundables en la cuenca del Duero. Supondrán la elaboración de mapas de peligrosidad por inundaciones, que incluirán las zonas geográficas con baja, media y alta probabilidad de inundación, así como la caracterización de la zona inundable, es decir, su extensión, el nivel que podría alcanzar el agua y la velocidad de la corriente. Supondrá delimitar 2.500 kilómetros de cauces, lo que se traducirá en 187.500 hectáreas de cartografía.

Las obras, que serán realizadas por la Confederación Hidrográfica del Duero, consistirán en el análisis preliminar del riesgo de inundaciones, un estudio de antecedentes de inundaciones, elaboración de cartografía, estudio geomorfológico de los tramos, revisión y adaptación de los estudios hidrológicos existentes, estudios hidráulicos y, finalmente, determinación del Dominio Público Hidráulico y de las zonas inundables.

España espera ultimar para 2011 (dos años antes de lo establecido por la UE) el Sistema Cartográfico de Zonas Inundables, con el que se pretende

evitar los desarrollos urbanísticos en zonas de riesgo y las probabilidades de inundaciones. Se completará con un «mapa de riesgo» de esas zonas para definir el número de personas, el tipo de actividad económica y las industrias o actividades susceptibles de producir contaminación que se podrían ver afectadas por una catástrofe de esas características. Además, contribuirá a aumentar la protección de bienes y de personas, recuperar el espacio fluvial y mejorar la conservación de los cauces.

Una vez concluido, y a través de Internet, cualquier administración o ciudadano podrá obtener una cartografía formada por ortofotos aéreas y mapas oficiales del Instituto Geográfico Nacional, que permitirán identificar la cartografía de determinación del Dominio Público-Hidráulico, la zona de servidumbre y policía, las áreas inundables para probabilidades de ocurrencia de 100 y 500 años, así como las áreas inundables derivadas de las normas de explotación de las presas y de la eventual rotura o funcionamiento incorrecto de las mismas.

Presas y balsas

El Sistema también se ocupará de la seguridad de las presas, tanto estatales como particulares, que pasan a tener una única norma. Además, incluye las balsas de agua y se incorpora a las comunidades autónomas en el control de la seguridad de las presas y balsas que no están en el dominio público hidráulico.

Esta iniciativa se suma a otras actuaciones del citado Ministerio para prevenir inundaciones y minimizar sus consecuencias, como el Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH), que ofrece información en tiempo real y es capaz de captar las variables hidrológicas e hidráulicas y el estado de la infraestructura hidráulica, para procesarlas y transmitirlas al centro de decisiones ofreciendo un conocimiento sobre el comportamiento del río y facilitando la actuación tanto en episodios de inundaciones como de sequías.

SAIH, además de pluviómetros, pluvionivómetros y telenivómetros, dispone de estaciones de aforo y marcos de control en los ríos a su paso por las ciudades, sensores para medir nivel de agua, caudal circulante en tuberías forzadas, velocidad del agua en los canales, medida de las posiciones en las compuertas, de precipitaciones líquidas y sólidas, o de temperatura.