La sociedad pública Trabajos Catastrales (Tracasa) del Gobierno de Navarra ha resultado adjudicataria de un proyecto de teledetección en la Comunidad de Madrid, que consiste en detectar y cuantificar la evolución de las zonas verdes urbanas y realizar cálculos que permitan estimar la demanda de agua de las nuevas áreas.
El proyecto encomendado tiene un presupuesto de 154.000 euros (IVA no incluido) y un plazo de ejecución de un año. El trabajo consiste en la puesta a punto de una metodología operativa, utilizando técnicas de teledetección, que permita la definición y elaboración de una base de datos cartográfica de la Comunidad de Madrid. Ésta se actualizará periódicamente, de forma que refleje la evolución temporal de las áreas urbanas, según explicó el Gobierno de Navarra en un comunicado.
Esta información será remitida a la empresa pública Canal de Isabel II, responsable de la gestión del ciclo integral del agua en la Comunidad de Madrid, quien la incorporará a su base de datos geográfica para poder dar respuesta anticipada a las futuras demandas, principalmente ocasionadas por el proceso de expansión urbana. Con ello se pretende realizar un ajuste más preciso de las prioridades de construcción de las nuevas infraestructuras.
El Canal de Isabel II fue creado en 1851 y pasó a depender de la Comunidad de Madrid en 1984. En la actualidad cuenta con más de 2.200 trabajadores. Entre sus cometidos están los servicios de abastecimiento, depuración de aguas residuales, y mejora y conservación de los ríos.
La información esencial del proyecto se compone de imágenes de satélite de alta resolución y de muy alta resolución en una zona piloto de 50 kilómetros cuadrados que serán sometidas al procesamiento básico (ortorrectificación, correcciones atmosféricas, fusión, mosaico) para, posteriormente, proceder a la detección de cambios entre imágenes de dos fechas distintas mediante distintos algoritmos, como la clasificación de imágenes, la diferencia de imágenes y el análisis de componentes principales, entre otros.
Asimismo, se delimitarán las zonas con demanda de agua mediante la generación de índices de vegetación en el caso de las zonas verdes y superficies agrícolas, y de técnicas espectrales y texturales en el de las piscinas.
Tracasa considera que la realización de este proyecto es "de enorme interés" por su contenido (cambios urbanos y demanda de agua), el cliente (Canal de Isabel II) y por tratarse de un proyecto que inicialmente se enmarca en las líneas I+D+i, pero que, en función de los resultados obtenidos, puede convertirse en operativo.