Emasesa will charge a fourth canon to finance the new water purifier
Tue, 18/08/2009
Emasesa tendrá que incluir en su momento el cobro de un cuarto canon en la factura de sus clientes para recaudar fondos con los que financiar la construcción de una nueva depuradora en la carretera hacia La Algaba, en las instalaciones con las que ya cuenta la compañía. Se trata de una operación compleja valorada en unos cien millones de euros. Esta nueva infraestructura sustituirá a la depuradora abierta en San Jerónimo en 1984, cuyos terrenos quedarán liberados para la construcción de alrededor de 600 VPO a cargo de la Junta de Andalucía, según la propuesta que defenderá el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, en la próxima comisión ejecutiva de la compañía. En la actualidad, la empresa municipal de aguas cobra tres cánones a sus clientes. Estos cánones son el instrumento legal de financiación del que disponen las empresas de abastecimiento para mejorar sus infraestructuras. La aplicación de un canon tiene que estar debidamente justificada y aprobada por la Agencia Andaluza del Agua, dependiente de la Junta de Andalucía.
De los cánones que se cobran actualmente en todas las facturas, dos de ellos son por concepto de obras de mejora. De hecho, se trata de un único canon, pero desglosado en dos por exigencias de la normativa de la Junta, de tal forma que uno es por las infraestructuras de abastecimiento y el otro por las infraestructuras de depuración. El tercero corresponde al Consorcio Provincial de Aguas (CPA), también aplicado para mejoras de las infraestructuras. Estos tres cánones tienen como coeficientes de cobro 0,0960, 0,0840 y 0,1 céntimos de euros, respectivamente. El coeficiente se multiplica por el gasto de agua en metros cúbicos realizado por el cliente para obtener el importe a cobrar por este concepto.
Aún no se conoce con exactitud a cuánto ascenderá este nuevo canon en ciernes, pero la primera estimación apunta a que este nuevo coeficiente oscilará entre 0,06 y 0,08 euros, por lo que el titular de una factura que se mueva en términos medios de consumo (10 metros cúbicos de agua al mes por vivienda) tendrá que abonar 0,60 euros más aproximadamente. Los cánones correspondientes a abastecimiento y depuración se cobran desde el año 2001 hasta el año 2026. El del Consorcio Provincial de Aguas tiene un período de cobro de 2008 a 2028. El nuevo canon que porpondrá Emasesa tendrá un período mínimo de cobro de 20 años, aunque la normativa permitiría que fuera de 30 años en caso de necesidad.
Los técnicos de Emasesa han realizado esta primera estimación en el peor de los supuestos. Es decir, partiendo de la base de que la compañía no cuente con ninguna ayuda financiera estatal o autonómica para sacar adelante el proyecto de construcción de una nueva depuradora. El Ayuntamiento gestionará, además de la aprobación de este nuevo canon, ayudas económicas con cargo a planes en vigor sobre la calidad del agua y la mejora de las infraestructuras. En esos casos hará valer que la compañía abastece ahora mismo a una población de 1.030.000 habitantes.
La nueva depuradora de la Ranilla, cuyo coste asciende a 70 millones de euros, fue inaugurada en 2008 y se está financiando con un canon, pero a los clientes no les aparece desglosado en la factura como tal, pues figura incluido dentro de la propia tarifa del agua, al igual que otros conceptos como, por ejemplo, la cuota de mantenimiento de la estación del Carambolo o la conservación de las redes de abastecimiento. Respecto al pantano de Melonares, Emasesa no ha aplicado aún ningún canon, pues resta por conocerse cuál será el modelo de gestión: si la empresa municipal asume las riendas mediante una concesión directa, o si se hace cargo la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG).
Los técnicos de Emasesa han dictaminado en un informe, al que ha tenido acceso este periódico, que sale más rentable cerrar la depuradora de San Jerónimo y construir una nueva que realizar las obras de modificación que dicta la normativa vigente. La actual estación de San Jerónimo sirve a la población del norte de Sevilla y a los municpios de La Rinconada y Alcalá del Río. Las instalaciones se han quedado obsoletas desde el momento en que no cumplen con los criterios de eliminación de nutrientes, nitrógeno y fósforo en los índices recomendados para el mantenimiento de los ecosistemas, así como no tienen capacidad para tratar el agua en la cantidad requerida, pues los técnicos consideran que se necesitaría que tratara un caudal medio de entre 90.000 y 100.000 metros cúbicos al día. Monteseirín propondrá que la nueva depuradora se construya a unos siete kilómetros de La Algaba, en las instalaciones que ya son propiedad de Emasesa. Esta nueva depuradora estará ya capacitada para aplicar el tratamiento terciario de eliminación de residuos en el agua, que la deja limpia al 95%.
De los cánones que se cobran actualmente en todas las facturas, dos de ellos son por concepto de obras de mejora. De hecho, se trata de un único canon, pero desglosado en dos por exigencias de la normativa de la Junta, de tal forma que uno es por las infraestructuras de abastecimiento y el otro por las infraestructuras de depuración. El tercero corresponde al Consorcio Provincial de Aguas (CPA), también aplicado para mejoras de las infraestructuras. Estos tres cánones tienen como coeficientes de cobro 0,0960, 0,0840 y 0,1 céntimos de euros, respectivamente. El coeficiente se multiplica por el gasto de agua en metros cúbicos realizado por el cliente para obtener el importe a cobrar por este concepto.
Aún no se conoce con exactitud a cuánto ascenderá este nuevo canon en ciernes, pero la primera estimación apunta a que este nuevo coeficiente oscilará entre 0,06 y 0,08 euros, por lo que el titular de una factura que se mueva en términos medios de consumo (10 metros cúbicos de agua al mes por vivienda) tendrá que abonar 0,60 euros más aproximadamente. Los cánones correspondientes a abastecimiento y depuración se cobran desde el año 2001 hasta el año 2026. El del Consorcio Provincial de Aguas tiene un período de cobro de 2008 a 2028. El nuevo canon que porpondrá Emasesa tendrá un período mínimo de cobro de 20 años, aunque la normativa permitiría que fuera de 30 años en caso de necesidad.
Los técnicos de Emasesa han realizado esta primera estimación en el peor de los supuestos. Es decir, partiendo de la base de que la compañía no cuente con ninguna ayuda financiera estatal o autonómica para sacar adelante el proyecto de construcción de una nueva depuradora. El Ayuntamiento gestionará, además de la aprobación de este nuevo canon, ayudas económicas con cargo a planes en vigor sobre la calidad del agua y la mejora de las infraestructuras. En esos casos hará valer que la compañía abastece ahora mismo a una población de 1.030.000 habitantes.
La nueva depuradora de la Ranilla, cuyo coste asciende a 70 millones de euros, fue inaugurada en 2008 y se está financiando con un canon, pero a los clientes no les aparece desglosado en la factura como tal, pues figura incluido dentro de la propia tarifa del agua, al igual que otros conceptos como, por ejemplo, la cuota de mantenimiento de la estación del Carambolo o la conservación de las redes de abastecimiento. Respecto al pantano de Melonares, Emasesa no ha aplicado aún ningún canon, pues resta por conocerse cuál será el modelo de gestión: si la empresa municipal asume las riendas mediante una concesión directa, o si se hace cargo la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG).
Los técnicos de Emasesa han dictaminado en un informe, al que ha tenido acceso este periódico, que sale más rentable cerrar la depuradora de San Jerónimo y construir una nueva que realizar las obras de modificación que dicta la normativa vigente. La actual estación de San Jerónimo sirve a la población del norte de Sevilla y a los municpios de La Rinconada y Alcalá del Río. Las instalaciones se han quedado obsoletas desde el momento en que no cumplen con los criterios de eliminación de nutrientes, nitrógeno y fósforo en los índices recomendados para el mantenimiento de los ecosistemas, así como no tienen capacidad para tratar el agua en la cantidad requerida, pues los técnicos consideran que se necesitaría que tratara un caudal medio de entre 90.000 y 100.000 metros cúbicos al día. Monteseirín propondrá que la nueva depuradora se construya a unos siete kilómetros de La Algaba, en las instalaciones que ya son propiedad de Emasesa. Esta nueva depuradora estará ya capacitada para aplicar el tratamiento terciario de eliminación de residuos en el agua, que la deja limpia al 95%.