The water consumption lowers a 2.3% and Emasesa insists on raising the bill
Wed, 26/08/2009
Los sevillanos pagarán más por el agua en los próximos meses, pese a que el consumo se haya reducido un 2,3% en el primer semestre del año respecto al mismo periodo de 2008. En concreto, el pasado 10 de julio se registró la cifra de menor consumo del año, con un total de 227 metro cúbicos. Con estos datos, la conclusión a la que llegan en el Ayuntamiento es que aunque se cierre más el grifo la factura no será menor, sino todo lo contrario. Éste es el mensaje que ayer dejó entrever el consejero de Emasesa Manuel Marchena, que aseveró, de nuevo, que para sostener el actual ritmo de inversión se encarecerá el recibo. Marchena aseguró que «para continuar las mejoras de abastecimiento y de saneamiento, y para mantener los puestos de trabajo es necesario que se equilibren los ingresos», debido al descenso del consumo de los últimos meses.
Desde que se anunció esta medida, el responsable de Emasesa pretende quitar hierro al asunto e insiste en que no «alcanzará a los sectores menos pudientes».
Para ello, ya está trabajando una comisión formada por técnicos, empresarios y vecinos, que pretende dar forma al mapa del precio del agua en Sevilla. El próximo mes de septiembre la comisión se reunirá de nuevo para decidir cuáles serán los cuatro cánones que se aplicarán, ya que se ha dejado claro, desde el principio, que no todos pagarán lo mismo, aunque se consuma igual o menos que otros sevillanos.
La dirección de Emasesa quiere que las zonas en las que haya un mayor índice de desempleo y que cuenten con menos recursos económicos se vean menos afectadas por el incremento, en detrimento de las más pudientes. Para ello, se está trabajando con la Delegación de Empleo para redactar un primer informe en el que se incluirán los niveles de renta y se conocerá si los vecinos de esa zona reciben alguna bonificación de carácter social.
Marchena insistió en que es necesario que se suba el precio del recibo ya que las técnicas con las que se trabaja en Emasesa han provocado un «bendito encarecimiento». Como ejemplo, pone los cinco millones de euros que han invertido en la remodelación de la calle Asunción, en la que se utiliza un microtunelado para efectuar la canalización de agua, que evita molestar a los vecinos. Un método, que según Marchena, es «único» en España. La empresa municipal lleva gastados más de 400 millones de euros en nuevas infraestructuras en los últimos cinco años y asegura que pretende reducir al 14 por ciento la fuga de aguas en toda la red metropolitana. Una de las novedades en la que se trabaja es unificar en una misma factura de los impuestos del agua y de la basura. Una medida que sólo puede traer «beneficios en eficacia y agilidad», aseguró Marchena cuando avanzó los cambios. Además. se estudia facilitar el pago a los vecinos por trimestre, en lugar de cada seis meses como se realiza ahora.
Desde que se anunció esta medida, el responsable de Emasesa pretende quitar hierro al asunto e insiste en que no «alcanzará a los sectores menos pudientes».
Para ello, ya está trabajando una comisión formada por técnicos, empresarios y vecinos, que pretende dar forma al mapa del precio del agua en Sevilla. El próximo mes de septiembre la comisión se reunirá de nuevo para decidir cuáles serán los cuatro cánones que se aplicarán, ya que se ha dejado claro, desde el principio, que no todos pagarán lo mismo, aunque se consuma igual o menos que otros sevillanos.
La dirección de Emasesa quiere que las zonas en las que haya un mayor índice de desempleo y que cuenten con menos recursos económicos se vean menos afectadas por el incremento, en detrimento de las más pudientes. Para ello, se está trabajando con la Delegación de Empleo para redactar un primer informe en el que se incluirán los niveles de renta y se conocerá si los vecinos de esa zona reciben alguna bonificación de carácter social.
Marchena insistió en que es necesario que se suba el precio del recibo ya que las técnicas con las que se trabaja en Emasesa han provocado un «bendito encarecimiento». Como ejemplo, pone los cinco millones de euros que han invertido en la remodelación de la calle Asunción, en la que se utiliza un microtunelado para efectuar la canalización de agua, que evita molestar a los vecinos. Un método, que según Marchena, es «único» en España. La empresa municipal lleva gastados más de 400 millones de euros en nuevas infraestructuras en los últimos cinco años y asegura que pretende reducir al 14 por ciento la fuga de aguas en toda la red metropolitana. Una de las novedades en la que se trabaja es unificar en una misma factura de los impuestos del agua y de la basura. Una medida que sólo puede traer «beneficios en eficacia y agilidad», aseguró Marchena cuando avanzó los cambios. Además. se estudia facilitar el pago a los vecinos por trimestre, en lugar de cada seis meses como se realiza ahora.