La situación de los municipios de la montaña lucense incluidos en la cuenca alta del río Navia desde el punto de vista de los vertidos que hacen es buena, según afirmó ayer en Cervantes el presidente de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, Jorge Marquínez. Según esto, no se detectan focos de contaminación por aguas residuales incontrolados. El responsable de este organismo se reunió por la mañana en la casa consistorial con el subdelegado, José Vázquez Portomeñe, y con los alcaldes y representantes de los concellos de Pedrafita, As Nogais, Becerreá, Cervantes, Navia, A Fonsagrada y Negueira. La reunión es de las que celebra periódicamente la Confederación Hidrográfica del Cantábrico con grupos de concellos de una misma cuenca, ante la imposibilidad de hacerlo de forma individual con los varios centenares de municipios de su área, según explicó Marquínez. Ayer, con los siete del alto Navia fue realizado un repaso de los asuntos de gestión comunes para buscar mejoras en la comunicación entre ambas partes. El encuentro duró alrededor de dos horas, tiempo durante el que fueron repasadas todas las autorizaciones de obras y concesiones realizadas por la Confederación Hidrográfica en la comarca. En el último año fueron otorgadas cien concesiones, cifra que Marquínez consideró muy importante. «Este número da una idea de la importante gestión que se está produciendo sin que seamos casi conscientes de ello», dijo. Son todas concesiones para el uso del agua, tanto para riegos como para abastecimiento de viviendas y explotaciones. Con respecto a las autorizaciones para vertidos, ayer fue realizado un repaso del estado de todas las concesiones, que afectan fundamentalmente a saneamientos de núcleos rurales. «Son muchas decenas de autorizaciones y, en general, hemos constatado con satisfacción que hay una situación de legalidad muy buena», señaló Jorge Marquínez. En algunos casos faltan trámites por completar, pero son los finales que ya no inciden en la legalidad de los vertidos. También fue repasado el programa de obras de mantenimiento. En estos momentos están en ejecución trabajos de conservación de la cuenca por un importe total de 300.000 euros. «También son obras que casi no se ven porque son desbroces selectivos, retirada de basura y retirada de vegetación, en muchos puntos distintos», señaló. Tras la creación de la Confederación Hidrográfica del Miño y del Sil, la del Cantábrico solo tiene competencias en estos siete concellos lucenses y en los del Eo.