Madeira maintains in 42 the deads and reduces to 13 the disappeared
Wed, 24/02/2010
Las autoridades de Madeira rebajaron ayer por la tarde el número de desaparecidos por el temporal que azotó este fin de semana el archipiélago, situándolo en 13, mientras se mantiene por el momento el balance oficial de víctimas en 42.
El presidente de la región, Alberto Joao Jardim, había dado ayer por la mañana por hecho que los 32 desaparecidos por las inundaciones y corrimientos de tierra provocados por las intensas lluvias estaban con toda seguridad muertos.
Según informó la secretaria regional de Transportes y Turismo, Conceiao Estudante, de las 32 personas que se daba como desaparecidas ya sólo quedan trece que no han podido ser localizadas, ya que el resto se han encontrado con vida.
En cuanto a los muertos, se mantiene el balance de 42 fallecidos, mientras que hay 18 heridos que permanecen hospitalizados y otras 480 personas han tenido que ser realojadas por el Gobierno regional.
Por otra parte, la portavoz del Ejecutivo de Madeira desmintió las informaciones que apuntaban a la existencia de víctimas mortales en el parquin del centro comercial de Anadia, en Funchal, capital de Madeira, asegurando que hasta el momento no se ha hallado ningún cadáver. Por la mañana, un responsable del centro comercial ya había negado que hubiera víctimas en el lugar.
Por su parte, el presidente de Madeira había insistido en que declarar el estado de catástrofe sería en sí mismo una «catástrofe» para las islas, que viven principalmente del turismo. «En una tierra como ésta que vive del turismo y los servicios, la catástrofe era declarar el estado de desastre, incluso habiendo habido una calamidad», subrayó en una entrevista concedida a la televisión pública RTP.
En España, las lluvias y los desembalses provocaron la crecida del río Guadalquivir y la inundación de zonas de Jaén capital, de Córdoba y de Lora del Río, donde se tuvo que desalojar a numerosos vecinos, así como proceder a la interrupción del tráfico ferroviario en la provincia jiennense.
De los 84 embalses andaluces, que acumulan 9.300 hectómetros, el mayor volumen de su historia, 70 están desembalsando, y son especialmente importantes en la cuenca del Guadalquivir, la más importante de Andalucía, pues acumula el 70% de la capacidad de embalse de la comunidad y está al 81,7% de su aforo. El jefe de la Oficina de Planificación de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, Agustín Argüelles, dijo que la situación es «normal y controlada».
El presidente de la región, Alberto Joao Jardim, había dado ayer por la mañana por hecho que los 32 desaparecidos por las inundaciones y corrimientos de tierra provocados por las intensas lluvias estaban con toda seguridad muertos.
Según informó la secretaria regional de Transportes y Turismo, Conceiao Estudante, de las 32 personas que se daba como desaparecidas ya sólo quedan trece que no han podido ser localizadas, ya que el resto se han encontrado con vida.
En cuanto a los muertos, se mantiene el balance de 42 fallecidos, mientras que hay 18 heridos que permanecen hospitalizados y otras 480 personas han tenido que ser realojadas por el Gobierno regional.
Por otra parte, la portavoz del Ejecutivo de Madeira desmintió las informaciones que apuntaban a la existencia de víctimas mortales en el parquin del centro comercial de Anadia, en Funchal, capital de Madeira, asegurando que hasta el momento no se ha hallado ningún cadáver. Por la mañana, un responsable del centro comercial ya había negado que hubiera víctimas en el lugar.
Por su parte, el presidente de Madeira había insistido en que declarar el estado de catástrofe sería en sí mismo una «catástrofe» para las islas, que viven principalmente del turismo. «En una tierra como ésta que vive del turismo y los servicios, la catástrofe era declarar el estado de desastre, incluso habiendo habido una calamidad», subrayó en una entrevista concedida a la televisión pública RTP.
En España, las lluvias y los desembalses provocaron la crecida del río Guadalquivir y la inundación de zonas de Jaén capital, de Córdoba y de Lora del Río, donde se tuvo que desalojar a numerosos vecinos, así como proceder a la interrupción del tráfico ferroviario en la provincia jiennense.
De los 84 embalses andaluces, que acumulan 9.300 hectómetros, el mayor volumen de su historia, 70 están desembalsando, y son especialmente importantes en la cuenca del Guadalquivir, la más importante de Andalucía, pues acumula el 70% de la capacidad de embalse de la comunidad y está al 81,7% de su aforo. El jefe de la Oficina de Planificación de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, Agustín Argüelles, dijo que la situación es «normal y controlada».