The revision of the Júcar Hydrologic plan not satisfies to environmentalists and the irrigators
Wed, 10/03/2010
Pocas veces regantes y ecologistas consiguen ponerse de acuerdo. Pero ayer lo hicieron, aunque los motivos esgrimidos por cada uno no fuesen los mismos. El milagro lo obró la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y en concreto la jornada de presentación del "Esquema Provisional de Temas Importantes" en el Júcar que, con motivo de la revisión del plan hidrológico de cuenca, se ha elaborado.
Y es que ni a la organización Ecologistas en Acción ni a la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental (JCRMO) les gusta cómo se está llevando a cabo el proceso ni en qué puede derivar la revisión del Plan Hidrológico del Júcar.
Tanto el representante de Ecologistas enAcción, Cipriano Escribano, como el presidente de los regantes albaceteños, Francisco Belmonte, no dudaron en tildar de «paripé» la jornada que se llevó a cabo ayer. «Llevamos ya muchas reuniones de estas y aquí los puntos importantes no se aclaran», manifestó Belmonte en el transcurso de la jornada. Y es que, en su opinión, lo primero que debería hacerse es definir la cuenca del Júcar y una vez realizada esta definición hacer los balances de ésta «Y si después después se quiere gestionar por demarcaciones se puede hacer, pero los balances y las asignaciones se hacen por cuencas que es lo que dicen tanto la Ley de Aguas como la Directiva Marco del Agua», apuntó Belmonte quien consideró que lo demás «son paripés para intentar mezclar cuencas intracomunitarias valencianas que tienen poca agua con el Júcar, que sí que tiene».
El presidente de los regantes recordó que la negociación del plan vigente vino precedida de las afirmaciones de la entonces ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, quien aseguró que el Júcar era histórica y jurídicamente de Valencia.
Algo que desde la JCRMO sospechan que puede volver a ocurrir. «Si no damos un puñetazo en la mesa no sólo los usuarios, sino también el Gobierno regional, y decimos que así no seguimos sentándonos en las mesas y que vamos a tratar las cosas seriamente, pues al final el agua será efectivamente de Valencia».
Belmonte lamentó que se siga pretendiendo que «el agua vaya toda a Valencia, que se apliquen restricciones en la Mancha Oriental y que se recupere el río» en esta misma zona. El representante de los regantes, que manifestó su temor de que con la revisión del plan se pierdan algunos de los logros conseguidos en el vigente, se preguntó por qué no se recupera el río Turia o el Vinalopó que se encuentran en peor situación que «las aguas de la Mancha Oriental».
Tampoco a los ecologistas les gusta el cariz que está tomando la revisión y hacia donde se dirige el futuro nuevo plan. Escribano manifestó que el plan en vigor «fue una chapuza» que se saldó con dos hipotecas.
En este sentido apuntó hacia la Unión Sindical de Usuarios del Júcar (Usuj) y hacia la Junta Central de Regantes de la ManchaOriental. «Mientras no se levanten estos créditos hipotecarios va a ser difícil que el río fluya», manifestó el responsable de Ecologistas en Acción.
Pero su crítica no quedó ahí. Escribano acusó igualmente a las instituciones y a entidades tales como la universidad, en una y otra región, de haberse convertido en «comparsas» y «correas de transmisión» de los dos colectivos de regantes.
«Mientras las reservas ambientales de los ríos no sean lo suficientemente tenidas en cuenta no vamos a ninguna parte», se quejó.
También llamó la atención el responsable de Ecologistas sobre la angustia que sufren muchos municipios de la cuenca por no saber si tendrán agua para abastecimiento mientras que el 80% de los recursos se destinan a regadíos.
Desde Ecologistas aseguraron no compartir los datos que la Confederación maneja sobre el estado de la cuenca. «No nos fiamos de los datos que nos da la Confederación», subrayó apuntando la posibilidad de que éstos se manipulen.
«Los mejores niveles piezométricos que tenemos en la cuenca son las fuentes y arroyos, y éstos cada vez bajan más», indicó lamentando que la CHJ reconozca que el acuífero de la Mancha Oriental se encuentra en buen estado.
En términos similares se expresaron desde la organización ecologista valenciana XúquerViu. Su representante, Graciela Ferrer, insistió en la importancia de Directiva Marco del Agua que establece la necesidad de gestionar los ecosistemas para que estén en buen estado. De esta forma se consigue, en opinión de Ferrer, hacer un uso sostenible del agua y evitar una gestión «productivista» del agua.
Y es que ni a la organización Ecologistas en Acción ni a la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental (JCRMO) les gusta cómo se está llevando a cabo el proceso ni en qué puede derivar la revisión del Plan Hidrológico del Júcar.
Tanto el representante de Ecologistas enAcción, Cipriano Escribano, como el presidente de los regantes albaceteños, Francisco Belmonte, no dudaron en tildar de «paripé» la jornada que se llevó a cabo ayer. «Llevamos ya muchas reuniones de estas y aquí los puntos importantes no se aclaran», manifestó Belmonte en el transcurso de la jornada. Y es que, en su opinión, lo primero que debería hacerse es definir la cuenca del Júcar y una vez realizada esta definición hacer los balances de ésta «Y si después después se quiere gestionar por demarcaciones se puede hacer, pero los balances y las asignaciones se hacen por cuencas que es lo que dicen tanto la Ley de Aguas como la Directiva Marco del Agua», apuntó Belmonte quien consideró que lo demás «son paripés para intentar mezclar cuencas intracomunitarias valencianas que tienen poca agua con el Júcar, que sí que tiene».
El presidente de los regantes recordó que la negociación del plan vigente vino precedida de las afirmaciones de la entonces ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, quien aseguró que el Júcar era histórica y jurídicamente de Valencia.
Algo que desde la JCRMO sospechan que puede volver a ocurrir. «Si no damos un puñetazo en la mesa no sólo los usuarios, sino también el Gobierno regional, y decimos que así no seguimos sentándonos en las mesas y que vamos a tratar las cosas seriamente, pues al final el agua será efectivamente de Valencia».
Belmonte lamentó que se siga pretendiendo que «el agua vaya toda a Valencia, que se apliquen restricciones en la Mancha Oriental y que se recupere el río» en esta misma zona. El representante de los regantes, que manifestó su temor de que con la revisión del plan se pierdan algunos de los logros conseguidos en el vigente, se preguntó por qué no se recupera el río Turia o el Vinalopó que se encuentran en peor situación que «las aguas de la Mancha Oriental».
Tampoco a los ecologistas les gusta el cariz que está tomando la revisión y hacia donde se dirige el futuro nuevo plan. Escribano manifestó que el plan en vigor «fue una chapuza» que se saldó con dos hipotecas.
En este sentido apuntó hacia la Unión Sindical de Usuarios del Júcar (Usuj) y hacia la Junta Central de Regantes de la ManchaOriental. «Mientras no se levanten estos créditos hipotecarios va a ser difícil que el río fluya», manifestó el responsable de Ecologistas en Acción.
Pero su crítica no quedó ahí. Escribano acusó igualmente a las instituciones y a entidades tales como la universidad, en una y otra región, de haberse convertido en «comparsas» y «correas de transmisión» de los dos colectivos de regantes.
«Mientras las reservas ambientales de los ríos no sean lo suficientemente tenidas en cuenta no vamos a ninguna parte», se quejó.
También llamó la atención el responsable de Ecologistas sobre la angustia que sufren muchos municipios de la cuenca por no saber si tendrán agua para abastecimiento mientras que el 80% de los recursos se destinan a regadíos.
Desde Ecologistas aseguraron no compartir los datos que la Confederación maneja sobre el estado de la cuenca. «No nos fiamos de los datos que nos da la Confederación», subrayó apuntando la posibilidad de que éstos se manipulen.
«Los mejores niveles piezométricos que tenemos en la cuenca son las fuentes y arroyos, y éstos cada vez bajan más», indicó lamentando que la CHJ reconozca que el acuífero de la Mancha Oriental se encuentra en buen estado.
En términos similares se expresaron desde la organización ecologista valenciana XúquerViu. Su representante, Graciela Ferrer, insistió en la importancia de Directiva Marco del Agua que establece la necesidad de gestionar los ecosistemas para que estén en buen estado. De esta forma se consigue, en opinión de Ferrer, hacer un uso sostenible del agua y evitar una gestión «productivista» del agua.